vigilado

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La cara de asombro no se podía ocultar, su mente luchaba contra los espasmos involuntarios de un inminente orgasmo, no daba tiempo de pensar en lo que acaba de leer…
Ariel la miro directo a los ojos, ella esquivo la mirada… que malos modales pensó para sí, creo que tendré que trabajar en eso.

Verde, su mente solo respondió verde, fue liberada de sus ataduras, y tomo una posición cómoda, miro directo a los ojos de Ariel-Sama y dijo: Lo siento, no puedo contar los detalles de este juego, solo diré que tus preguntas serán respondidas el día lunes cuando elijas una nueva llave, el orden de las llaves, influirá directamente en tus dudas.

Ariel volvió a su casa, su mente abrumada por una serie de dudas y paradojas mentales, en estos momentos eres menos que un juguete, no paraba de divagar. Entro en su cuarto abrió una cajita de madera recuerdo de cuba, tomo el contenido preparo un cigarro de hierba y fumo, solía reflexionar con hierba cuando su mente no lograba serenarse, justo como esa madrugada, sus ideas volaban, era real?, Todo este juego es real, o será simplemente una venganza de Fernanda…

Despertó tarde para el trabajo, habitualmente era puntual, esta vez dos horas de retraso no lo salvaron de una reprimenda. En su mente todo era una cosa mínima, deseaba saber el siguiente paso en su juego, por alguna razón le gustaría saber qué llave es la de la mujer imponente, un leve presentimiento sobre ella lo inquietaba.

En su hora de almuerzo acepto una invitación de su compañero de trabajo, todo era normal hasta el momento en que el mesero deslizó un papel en su mesa, lo desplegó y leyó: “ Hola, si vuelves a intentar recolectar información sin las cuatro presente, será castigado con el destierro de este
juego y sus dudas nunca serán resueltas, por ahora solo debes saber que nada malo pasará"…

Una pequeña gota de sudor se enfiló por su mejilla en dirección descendente, observó lo más cuidadoso posible, nada, nadie rodeaba el lugar ninguna de sus cuatro “dueñas” estaba en las cercanías.

Su día transcurrió bastante rápido, su sábado fue directamente una preparación mental y corporal, dado que las llaves que le quedaban eran solo de Dominas, su comida, y rutina de ejercicios totalmente a conciencia de lo que viviría el día siguiente.
Fernanda salió cerca de las seis de su departamento, se dirigió directo al bar, cuando ingreso pensando que sería la primera en llegar… Su asombro fue basto cuando en la mesita se encontraba Lady Gaskell, así se hacía llamar la más imponente de las dominas restantes, esta vez en pantalones de cuero y chaqueta a juego, sin ocultar su fusta de bolsillo. Tomo asiento lentamente, nunca ha logrado explicar el porqué Lady Gaskell tiene aquel nombre, sabe muy bien quién es la dueña de ese apellido, una mujer de la época victoriana la cual se dedicaba a relatar la sociedad desde los más poderosos a los pobres campesinos. Volvió en sí, Lady Gaskell fue clara y precisa, como siempre.

Hoy no tendrá que elegir llave, yo tomaré el puesto del día domingo, por la simple razón de que me gusta cómo queda la musculatura cansada por la semana, luego de una buena sesión de spank.

- Fernanda: por mí está bien, pero el deseara hacer preguntas y lo sabes.

- Lady Gaskell: solo debes relajarte estará completo para la siguiente y satisfecho con las preguntas.
Una leve sonrisa asomo por la comisura de los labios de Gaskell, Fernanda suspiro mientras el resto de las cuatro se acercaban a la mesa.
Lady Gaskell fue bastante clara “hoy es mio, alguna objeción?”, un silencio recorrió a las integrantes de aquella mesa, miro su reloj y suspiro, creo que deberá aprender a llegar a la hora acordada, cuatro minutos de retraso equivalen a cuarenta golpes extra, aún no decido qué tipo de juguete usaré….

Mierda pensó Ariel, un pequeño problema en el ascensor de su edificio le costó casi ocho minutos de retrasó, al entrar en el bar observó claramente la silueta de las cuatro mujeres, antes de llegar a la mesa, la Dom mas imponente se levanto, lo miro a los ojos por instinto le mantuvo la mirada, ella río y dijo “ hoy no hay llaves, ponte esto nos vamos chucho”, le tendió un collar de perro rosado, lo tomo en sus manos y lo ajusto alrededor de su cuello, pensó para si “creo que hoy dolerá”. Caminaron en silencio por las laderas del Cerro Santa Lucía, enfilando hacia el barrio antiguo, doblaron a la derecha y ella dijo claramente, debes dirigirte hacia mi persona como “Lady Gaskell”, no tardó en responder de la forma que le habían informado.
Gaskell fue bastante clara, él era solo el “chucho” osea su perro, ingresaron por una puerta lateral, el cuarto claramente era su sala de juegos, “sientate chucho”, primero deseo establecer los límites Lady Gaskell, dijo con el mayor cuidado posible, era difícil actual de sumiso, cuando su rol era generalmente Dom. Ella lo penetró con la mirada y le dijo, no eres un novato, hoy tendrás una sesión de spank, la palabra de seguridad será Verde, y en caso de tener mordaza se te entregará un pulsador el cual enciende la luz que ves en la pared, ahora las reglas cuando digo que te sientes te sientas, los chuchos no usan ropa, tienes cinco minutos para volver aquí en cuatro patas y con la lengua afuera como un chucho.
Ariel se desvestía cuando por el rabillo del ojo observó la mesa de su Lady Gaskell, una paleta y una fusta, para sus adentros pensó “creo que hoy recibiré algo de placer brusco”.
Volvió en cuatro patas y se sentó en posición canina al costado de su Ama, ella lo miro y dijo “muy bien chucho”.
Sin más tomo asiento en un cómodo piso, y llamo fuerte y claro, “chucho ven”, él se dirigió hacia ella, con cuidado ella lo acomodo en su regazo, y con mano firme y sin aviso descargo el primer golpe en sus nalgas, su cuerpo dio un pequeño respingo, no había imaginado que tuviera una mano tan firme. Ella solo lo miro y dijo, si tienes una erección durante los azotes cambiaré de implementó, en la mesa está mi fusta y paleta para spank, además de una sorpresa en caso de que no puedas contener tu erección. Quedó ubicado de tal forma que su sexo presionaba el muslo de ella, una piel suave rodaba su sexo, cada cierta cantidad de golpes, ella acariciaba descaradamente su sexo, buscando una erección, su control se quebró cerca de los veinte minutos de un spank y motivación de sus genitales constante, lo suficientemente rudo y suave a la vez, claramente ella tiene un control superior a Fernanda. Llegó el momento de que su piel ya resentida por el constante golpeteo siempre “suficiente chucho, ahora controla esa erección tienes cinco minutos para que desaparezca, luego en ese pequeño altar con mi fotografia, en posición de plegaria...Tomo la fusta de la mesa.

Ariel tomo su posición, ajustaba su cintura para no perder firmeza durante el golpe, un destello llamo su atención en la pared inició una cinta de pornografía, “vista enfrente chucho, si no te controlas, la fusta será más dura…”
Pasaron cerca de quince largos minutos está vez no existió estímulo manual solo audiovisual, no logro contener su detección, un claro bufido de desaprobación, “chucho veo que estás en plena pubertad, no logras contener tu exitacion.” Nuevamente tomo su miembro erecto y esta vez fue más rápida la masturbación a punto de su eyaculación nuevamente retiro su mano.
Chucho este será tu castigo, tomo un bozal rosado de la mesa y lo ajusto, retiro la fusta y dejó el pulsador en la mano de Ariel, lo primero que sintió fue el agua helada correr por todo su cuerpo, “espero que con eso le bajes a tu temperatura”, al terminar la frase el primer golpe de la fusta, esta vez más rápido más enérgico, “chucho malo, chucho debe aprender a restringir sus niveles de exitacion”, repetía una y otra vez al cabo de unos diez minutos pulso el botón, no aguanto todos los golpes fueron en el mismo sitio… Lady Gaskell lo tomo en sus manos y lo llevo a su regazo, saco un pequeño frasco y con delicadeza inicio un masaje sobre la zona afectada, “chucho que voy hacer contigo, si continúas así, esta será la sesión más amigable que tendrás", pasaron cerca de diez minutos (según sus cálculos mentales), ella tomo su miembro y lo acarició, al momento de estar erecto, suavemente lo recostó sobre su espalda se subió las enaguas, y se montó sobre él, con movimientos suaves pero firmes monto a su chucho, nuevamente cuando estuvo a punto de acabar, ella salió de su montura, ubicando a Ariel  en cuatro patas, dando inicio la masturbación, esta vez sí acabo pero en el suelo, “chucho debes limpiar tu desastre, cuando termines alista tu ropa y tienes cinco minutos para retirarte”…
Ariel tomo sus cosas, y se dirigió hacia la puerta, Lady Gaskell se encontraba en medio del camino, lo miro a los ojos (el bajo la mirada ). No, dijo ella esta vez solo somos personas normales ya terminó la sesión, deseas realizar algunas preguntas, tienes cinco preguntas por tu mal comportamiento, de mis otras compañeras no conseguirás nada, solo yo responderé tus preguntas.
Ariel pensó seriamente en sus cinco preguntas.
-¿ Esto fue al azar?
- no.
- ¿cuan largo es este juego?
- eso depende de ti.
- ¿siempre serán sesiones individuales?
- no, no necesariamente, dependerá de cada una .
-¿ Se conocen?
- si
- podre realizar preguntas al grupo?
- Si, pero yo decido si contestan o no.
Gracias Lady Gaskell, hasta la próxima, ella lo detuvo y le tendió el frasquito, “toma para los dolores e inflamación”, gracias.
Se dirigió a su hogar exhausto y en un nivel de relajo que lograba desde sus tiempos de colegiatura en los cuales era un fiel participante de peleas.

Juego nocturnoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora