CAPÍTULO XI: NO SOMOS NADA.

225 16 0
                                    

Pasaron los días rápido, mis días de gloria expulsada del instituto acabaron. Por todas partes miraba noticias sobre el festival deportivo de la U.A.

Caminaba de camino al instituto con el mismo aburrimiento de siempre, aunque a diferencia de esta vez iba más temprano.

Después de lo qué pasó en aquel cementerio, aún no podido creerlo. Sigo sin entender.

Cambie mis zapatos y entre a los salones, caminaba con ambas manos en mis bolsillos de la falda.

—Los números algebraicos con variables menor que él exponente blablablabla—era lo que escuchaba, cuando hablaba el maestro. Recosté mi cabeza en el pupitre esta clase de matemática aburre.

Mire fijo a mi compañera de al lado, tenía curiosidad de saber en qué la podía manipular. Pero no se me ocurría nada.

Toda bola de niños bobos poniendo atención a la aburrida clase.

—¡________!, ¿empezamos otra vez?—dijo mirándome enojado.

—Ah, lo siento.—dije mientras levantaba mi cabeza y rascaba mi cabeza sonriendo tontamente.

Las clases pasaron rápido, había pasado bastante cosas en el maldito club de fotografías, habían más miembros del grupo y.., seguimos siendo un asco.

Como siempre me tocaba limpiar el club que teníamos, esta vez no lo hice y me fui directamente a la U.A.

¡¿Cuáles son mis intensiones?! Espiar a Todoroki por supuesto.

Agarre el autobús y me senté en la última parte de atrás, mire por la ventana mientras recordaba lo de anoche.

Las frías expresiones de Todoroki, su sonrisa, y su mirada. No dejaba de pensar en él. ¿Todo eso es debido a su infancia?

Finalmente llegue y mire como Todoroki venía hablando con Momo feliz, la chica que me encontré aquella vez...

Debo admitir que sentí un poco de celos al verlos así. ¿Qué están haciendo? Vale que es normal que se sonrían ya que son compañeros..pero.

Sin entrar a la U.A ya que se necesitaba un permiso autorizado. Me oculté detrás de un árbol mirando y los arbustos mientras escuchaba lo que hablaban.

—¡Gracias por aquel voto! Me hace sentir feliz.—escuche lo que decía la chica.

—Ah, si.—fue lo único que respondió Todoroki

—Eres uno de los mejores estudiantes de la A-1 ¿no es genial?—dijo Momo.

—Esto tiene algo que ver con mi padre seguramente.—respondió frío. Mediante caminaban me iba arrastrando por el suelo detrás de los arbustos.

¿Qué son esas estúpidas conversaciones? En definitiva, los celos empezaban a apoderarse en mi. Pero Todoroki y yo no somos nada, ¡maldita sea! Dije mientras me agarraba la cabeza y me recostaba boca arriba en el suelo. Mirando los arbustos. ¿No somos nada? Eso era algo que no me había quedado tiempo para pensar.

Volví a levantarme y observarlos. Una vez llegando lejos ellos, salí de los arbustos y quede observando cómo caminaban esos dos juntos. Mire hacia abajo observándome mi cuerpo, esa chica tiene todo lo que cualquier mujer quisiera.

—¡A un lado, maldita perra!—escuche una voz chillona detrás de mi junto a explosiones. ¡Él es..el chico número 1 en el festival deportivo.

Mire de espaldas a ese chico de cabellos de amarillos de la explosión que hizo mi cabello se había pasado sobre mi rostro. Moviéndose.

Rápido me quite de su camino al verlo tan enojado.

—Eh, lo siento..—dije inclinándome.

—Tch.—fue lo único que escuche de su parte. ¿Así es como son los chicos de la U.A?

Esa explosión fue bastante fuerte, ¿ese es su Quirk? Es bastante poderoso..

Seguí al chico cabello rubio, solo que iba a mi casa por supuesta, aunque se mirara que lo perseguía. Delante, muy adelante todavía iba Todoroki con Momo.

—¿Me estás siguiendo?—dijo el pelirrubio mirándome enojado.

—¡Ah! ¡No, claro que no! ¡Solo que en esta dirección queda mi—no termine mi brazo cuando él me agarro del cuello de mi camisa mientras hacía explosiones con su mano libre.

—¿Ah?—dijo con su voz ronca.

Rápido empecé a sudar de los nervios.

—¡Lo-lo digo enserio!—dije.

Me soltó empujándome hacia el suelo.

—Maldito loco..—dije en susurro.

Él volteó a verme nuevamente de espaldas y se volvió a acercara mi. Mi respiración empezó a hacerse agitada.

Mire como un muro de hielo se hizo frente a mi y a ese chico. ¿Todoroki? Voltee a ver de donde salía el hielo.

—¡¡Ah!!—grite asombrada. —¿Qué haces aquí?—Dije sorprendida.

—¡Bakugō!— escuche la voz de un niño chillón. Mire de donde venía esa voz, era uno cabello verde despeinado, junto con una chica cabello café y otro aún más alto.

Hice una tontería al venir aquí, que gran alboroto he causado..

—Soto, vuelve de donde viniste...—dije nerviosa.

—No puedo, hasta que pasen las tres horas.—dijo tranquilo.

Mi respiración era difícil tomaba bocados de aire.

—¿Hmm? ¿Quiénes son ellos? Kacchan, ¿amigos tuyos?—dijo el peliverde.

—¡Ni de coñá tendría una amiga cómo está estúpida, perdedor.—le dijo con superioridad.

—¿Ah quien llamas estúpida?—dije entrecortado con mi respiración agitada.

Bakugō con sus explosiones botó el muro de hielo.

—¿Eh?—dije mientras miraba como se acercaba dispuesto a hacerme explotar.

Cuando quedó congelado totalmente. ¿Eh?

—Vámonos de aquí, antes de que ese hielo se derrita.—dijo el chico que se supone que es parte de mi Quirk cabello rojo.

—Que curioso.—dijo el chico alto que venía con el despeinado y la enana.

—Levántate, ______.—dijo el pelirrojo.

La respiración me ahogaba, hasta que llegue a un punto que no pude seguir respirando, cuando quedó todo negro.

Borrar los pensamientos de alguien, no son bueno ¿sabes? Tú Quirk es peligroso. Aunque no lo muestres en lucha, el Quirk de ese chico que haz tomado es poderoso.

¿De donde viene esa voz?

—Su respiración aún no vuelve a la normalidad, ¿será asmática?—escuche que hablaban.

—No lo sé, lo mejor sería llevarla a un hospital.—escuche la voz del peliverde.

—Uraraka, ayúdanos un poco.

—¡Sí!

Solo escucho voces..

—Yo que ustedes, dejaría a esta mujer aquí.—escuche la voz de Soto

—No podemos hacer eso, es una persona civil, nuestro deber como estudiantes de la U.A es ayudarla.

Sentí como mi cuerpo flotaba y así se movía. Jamás había sentido así... quiero abrir mis ojos pero me pesan..

『PRIMERA VEZ』Donde viven las historias. Descúbrelo ahora