CAPÍTULO XII: UN MIEMBRO MÁS EN LA LIGA DE VILLANOS.

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¿Dónde estoy? ¿Borrar las memorias es peligroso?

Mi respiración al menos había vuelto a como era antes. ¿Qué? Abrí mis ojos lentamente.

Unas luces blancas me hicieron entrecerrar mis ojos.

Mire a mi alrededor. Estoy en un hospital, ¿cuándo llegue aquí?

No hay nadie en la habitación, ¿como aparecí aquí?

Baje de la camilla y busque la salida de esta habitación, agarre la fría perrilla de la puerta y salí de ahí, solo mire hacia el frente di dos pasos cuando alguien me agarro del brazo con fuerza haciendo que lo viera. No me había dado cuenta que Todoroki estaba apoyado a la pared junto a esa puerta.

—¿Usas mi Quirk para hacer de las tuyas?—me dijo mirándome fijo.

Lo mire asombrado, y con algo de temor, nunca me había hablado así antes..

—¿De qué hablas?—me hice la víctima.

—Esos dos chicos cabello blanco y rojo, frente a todos entraron en tu cuerpo como si fueran una masa de carne molida.—me dijo.

Me asombre al escuchar eso, ¿en serio hicieron eso? Malditos idiotas harán que mi única relación que tengo se vaya a la mierda. ¿Relación? No somos nada....

Evite mirarle hacia su rostro, no sabía qué decirle.

—No lo hice por que quería, de un día para otros ellos aparecieron hacia por así...—dije mientras miraba hacia otra parte.

—¿Cómo es que tiene mi Quirk? ¿Tiene algo que ver con "esa noche"?—dijo

—¡Es tu culpa después de todo!—le grite soltándome de su agarre, él fue el que hizo que mi inocencia se fuera a la mierda.

—¿Cómo que mi culpa? Tú sabías cómo era tu Quirk y aún así continuaste, nunca me dijiste nada.—dijo con su sensual voz ronca aún enojado. Puso una de sus manos sobre mi hombro mientras yo le daba la espalda.

—¡Te equivocas!—dije mientras volvía a darle la cara y agarraba su mano quitándola de mi hombro, pero.., la fuerza se apoderó de mi.

Su mano la hice hasta atrás, dejando empujando a Todoroki hacia atrás, estaba apunto de caer cuando el saque su hielo atrás evitando caer al suelo.

—¡Jóvenes! ¡Por favor! Están en un hospital.

Al fin y al cabo nos sacaron del bendito hospital, caminaba directo al parque más cerca, Todoroki caminaba detrás de mi.

—¿Oye? ¡Aún no me haz explicado como diablos esos dos—no termine que dijera su frase

—¡Déjame sola!—grite aún sin darle la cara.

Cómo diablos le explicaré algo que apenas entiendo yo ¿cómo? Todoroki se quedó parado en la entrada de ese hospital mientras yo seguía mi dirección.

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