Letters to Juliet || l.s || - EDITANDO**

Capítulo 6.-

Ésta es una descripción muy corta porque ya no tengo pila y probablemente mi celu se apague en cualquier momento. Espero disfruten de éste capítulo porque se los dedico a todos/as ustedes que me leen. Btw, en mi perfil he puesto una nueva biografía para que me conozcan un poco si quieren, les he dejado mis redes sociales y todo eso en caso de que tengan preguntas o cualquier cosa que necesiten. Nos leemos pronto.

Muchos besos y amor,

-Annˇ

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Capítulo 6.-

-¿Ya?

-No.

-¿Y ahora?

-No, Lou.

-Vamos Hazz,¿Ya puedes quitar ésta venda de mis ojos? Es incómodo.

-Dios Santo, Louis. Eres tan desesperante.-Me rio y lo siento a él sonriéndo.

-¿A dónde me llevas?

-Ya verás.

-¿Cuándo?

-Pronto.-Dice entre dientes.-Okay, hay un escalón, sube con cuidado.-Lo hago, subo primero el pie derecho y luego el izquierdo, sosteniéndome del brazo de Hazza para no caer de donde quiera que estemos.-Bien. Ahora sí, puedes quitartela.-Con un poco de su ayuda, logro desatar la venda de mis ojos. Parpadeo un par de veces, acostumbrádome a la tenue luz que alumbra la habitación.

Observo a mi alrededor, hay sobres por todos lados, encima de los multiples escritorios, en el sillón, encima de la pequeña radio que está sobre un estante. Sin embargo, están perfectamente ordenadas. La habitación es como un duplex, ni tan grande, ni exageradamente pequeño. Como para pasar un buen rato contigo mismo.

-¿Dónde estamos?.-Le pregunto aun observando la habitación.

-Esto, es mi estudio.-Dice con una sonrísa, emocionado por enseñarme ésto.

-¿Estudio? Parece mas bien a donde llega el correo postal.-Digo riéndo y el me golpea levemente.

-Algo así.-Dice.

-¿Por qué hay tantas cartas aquí?.-Digo tomando un sobre, cuando estoy por abrirlo Harry golpea mi mano y la arrebata viéndome feo.

-No puedes abrirlas.

-¿Por qué?.-Le digo divertido.

-Son personales.

-¿Te refieres a que todas éstas son tuyas?.-Le respondo con el ceño fruncido, porque, ¿Quién podría enviarle tantísimas cartas a Hazza?

-Bueno, en realidad son Cartas para Julieta.

-¿Julieta?.-Digo y el ríe.

-Sí.

-Como...¿Julieta Capuleto?.

-Por supuesto que sí, bobo.-Suelto una fuerte carcajada.-¿Qué es tan gracioso?

-¿Bobo?.-Digo sin dejar de reír, el me vuelve a golpear levemente pero lo veo sonreír.

-No digo groserías. Creo que esas se guardan para los momentos en los que son necesarias, y es mucho mejor si nunca las necesito.-Sigo riéndo y me ve feo. Respiro tratando de calmarme.

-Ya, lo siento.-Carraspeo.-¿Qué hay con ésto? ¿A qué te refieres con que son para Julieta?

-Bueno, ¿Recuerdas que en la casa de Julieta, las personas dejan sus cartas en las paredes?