Treinta y uno

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Desde ayer,
Cuando tus manos tocaban mi alma como si fuesen su creador,
Sin cuidados y sin barreras,
Sin miedos.
Decidi dejar de pensar en que pasaria si,
O en las tantas veces que deje pasar un bondi lleno sabiendo que si dejaba que se fuera llegaria tarde.

Deje de pensar.
Porque pensar duele.
Porque en mi cerebro la unica suma es un nosotros,
Un nosotros inconcluso.
Una X y una Y.

Decidi que quizas debia dejar de pensar en que vos sos A y yo soy B.
Una suma imposible.
Factores que nunca podrian juntarse.

Decidi solo sentir,
Agarrar tu mano y bailar juntos al ritmo de mi estupido y acelerado corazon que tiene previa matematica desde hace 10 años,
Cuando me preguntaste donde quedaba el baño y yo con el corazon en una mano y mi barrita de cereal en la otra,
te dije que ahi,
atras de la Seño,
Al lado de los chicos mas grandes.

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