11/02/2008
»Buenos días, chico de la mirada marchita.
¿Qué hacías con aquellas flores? ¿por qué arrancabas con desesperación sus hermosos pétalos llenos de gracia?
¿Por qué luego las enterrastes al lado de aquel árbol viejo?
Te ensuciaste tus manos de barro. ¿Qué dirán tus papás al verte así?
Por tu mirada no creo que te importe. Tu camisa estaba hecha un desastre, y tus pantalones con agujeros. Reía sin querer cuando veía que te entraba barro en tus ojos y creías que restregándote con tu camisa sucia te limpiarías.Quería prestarte mi pañuelo, con decorado de lazos morados. Mi abuelita es la mejor tejiendo, ¿no crees? Ella me mima, tanto que a veces no sé que hacer con tantas cosas.
Pero te alejaste cuando estaba apunto de alcanzarte.
Ey, ¿quieres jugar conmigo?
Atte: llámame lanita, mi abuela me llama así.