lo que se sabe no siempre es cierto (pausada)

Capítulo 3: "Conociendo al enemigo"

******************** PDV Brooke ***********************

 Al levantarme, me fui al baño y me cambié. Cuando bajé para entrar a la cocina veo que hay una chica de pelo rubio sentada en un taburete de la mesada desayunanado. Todavía no le veía la cara porque estaba dada vuelta.

-Hola.- dije y la chica asustada se dió la vuelta, cayendo de culo al piso.

-Hola, tú debes ser Brooke ¿no?- dijo la rubia levanadose y frotandose el culo.- Me diste un susto de muerte, deberías de tener más cuidado de asustar asú a la gente. Mira que la próxima voy a estar armada con una pala, y yo soy muy peligrosa con una.- me dijo guiñándome un ojo por lo que me salió una carcajada involuntaria. Ya sabía que con esta chica yo me iba a llevar bien.- Perdona, casi me olvido. Soy Sarah. Sarah Robinson.

Ahhhhh, con que ella era la famosa Sarah.

-Si yo soy Brooke. Pero por favor llamame Bro. Odio que me digan así.- Sarah asintió mecánicamente y me sonrió.- Bueno, ya que ahora hicimos las presentaciones debidas. ¿Conoces algún buen lugar por aquí en donde pueda tomar sol?

-SIIIIIIIIIIIIIII!! Hoy vamos a ir con mis amigas a la playa. ¿Quieres venir?

-Claro, por qué no. Ahora vengo me voy a prepara las cosas para ir.- Me estaba dando la vuelta para subir a mi cuarto, pero cuando giré mi cabeza, me choqué contra algo duro.

-Mira, mira a quién tenemos aquí.- me dijo una voz que me sonaba ligeramente conocida.- Alma que lleva el diablo, alma que regresa fresca. Una pregunta ¿tú que haces en mi casa?

Me tienes que estar jodiendo. No, esto tiene que estar mal. No, esto está mal. No me puede estar pasando esto a mí ahora que estaba disfrutando vivir aquí. Voy a tener que aguantar vivir en bajo el mismo techo que este mujeriego de cuarta todo el tiempo que esté aquí. Mi vida no puede estar peor, ¿verdad?

-Veo que te comieron la lengua los ratones. Soy Derek, por cierto. Ayer no hicimos las presentaciones adecuadas.- me miró con una sonrisa burlona en la cara. Tenía ganas de borrarle esa hermosa sonrisa del rostro, pero mi cuerpo no obedecía. Y yo seguía sin habla.

-¿Ustedes ya se conocieron?-  preguntó una Sarah con la boca abierta y la cara intrigada con cara de saber más.

-Si...- dijo.

-No.- Respondimos al unísono. Mas obvios no podíamos ser ¿no?

-Osea, me están diciendo que ayer no se hicieron la presentaciones debidas pero que no se conocieron. Me lo pueden explicar porque la verdad es que no los entiendo. Ustedes realmente me marean.- dijo Sarah poniendose una mano en la frente haciendose que se desmayaba.

-Esta señorita que se encuantra enfrente tuyo, me llevó puesto cuando salía del aeropuerto.- dijo mirandome de reojo, con una sonrisa ladeada.

-Perdoname pero fuistevos el que me llevó puesto y para colmo empezaste a flirtear conmigo.- Le dije golpeandolo con un dedo acusador en su pecho.

-Baja el dedo que me lastimas.- dijo poniendo cara de dolor y moviendome el broza de su pecho.- Además se notaba que no podías apartar la vista de este cuerpo.- dijo señalándose completo. Bárbaro, además de mujeriego, creído y arrgante. Algo más.

-Andá bajandote lo humistos, mirá que yo...- fui interrumpida por Sarah que pegó tal grito que casi me deja sorda.

-Se pueden callar los dos pareces niños de cinco años. Bro, yo ya me voy a la playa, si querés acompañarme anda a cambiarte ya, porque las chicas me dijeron que me estaban esperando hace una hora y ya me demoré lo suficiente.- dijo mirando a Derek con una expresión de complicidad.

-Okay ahí voy.- dije subiendo la escalera.

-Yo también voy.- escuché decir a Derek antes de meterme en mi cuarto y cerrar la puerta.