U N O

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Parecía estar frío en la ciudad de Seoul, Hyungwon sale a la calle con unos jeans, una camisa, un suéter, un tapado negro largo y una bufanda entre otros detalles.
Debido a que tardó abrigandose, iba casi corriendo para no llegar tarde a la escuela, sería su tercera llegada tarde en caso de que no llegué a tiempo y eso lo convertiría en una falta, y honestamente el no quería más faltas de las que ya tenía, ya que le costaría las materias.

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Su día iba tranquilo, llegó a tiempo, curso sus materias y era la hora del almuerzo.
Estaba en una mesa apartada de los demas como siempre, ya que no hacia amistad con nadie y según el no necesitaba más  que al pequeño de un año menor que tenía como unico amigo, Im Changkyun, quien no asistio a clases ese día.

Estaba punto de abrir su lonchera cuando enfrente de el se sienta un joven alto, casi de su estatura, cabellos rubios, mirada felina y una sonrisa que abarcaba de punta a punta la mitad de su rostro.

Lee MinHyuk, un chico de su mismo salón que lo persigue desde que entró al Instituto hace ya dos años. Le parecía atractivo pero el simple hecho de que a Hyungwon le gustaba hacerce de rogar, hacia que no le diera ni la hora.

Hyungwon estaba a punto de comer lo que su madre le había guardado, y para su suerte lo primero en agarrar fue una banana. La mirada de Minhyun se clavo en sus labios y eso lo estaba poniendo incómodo. Se acomodo con mirada firme y habló.

- Que quieres MinHyuk?- pregunta frió.

-Tienes una forma peculiar de comer una banana- sonrie - me gustaría saber que más haces con esa linda boquita- dice de manera seductora.

Hyungwon al instante sintió sus mejillas arder, pero trató de disimularlo para responder.

-La como igual que todo el mundo idiota, y si tantas dudas tienes de la función de mis labios deberías preguntarle a tu amigo.. hmmm como era su nombre? - dice fingiendo no recordar - Ah si, Shownu, el sabe muy bien- responde finalmente con una sonrisa placentera al ver el enojo de Minhyuk.

El de cabellos rubios se levanta y toma su camino hacia la mesa donde estaban sus amigos.

No era un secreto que a Hyungwon le iban los hombres, que muchos lo buscaban y que se había acostado con la mitad de su salón, pero tampoco era un secreto que Chae Hyungwon no era un chico sencillo de complacer. Muchos fracasaron repetidas veces en sus intentos de que el delgado de cabellos castaños se entregue. Hyungwon escogia a sus candidatos, no pueden solo darle chocolates, rosas, o piropos para tenerlo. Raramente buscaba chicos altos, de buenas proporciones de cuerpo y manos grandes.


No le gustaba involucrarse seguido con sus pretendientes por el hecho de que no quería llegar a sentir nada por nadie, su vida personal era bastante movida como para agregarle una pareja, según sus pensamientos.

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Debido a los acosos constantes de Lee Minhyuk en el salon, Hyungwon termina un poco molesto el día escolar.

Sale del Instituto con intención de llegar lo más pronto posible a su casa, cuando escucha un estruendo en el cielo.
Se había largado a llover.

 Se había largado a llover

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Golpe de suerte (2won)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora