Fuera de la burbuja [Editando]

Problemas en el hospital

—Bien, Alejandro y yo vamos a ir al poblado a recoger suministros —indicó Alex.

—Nosotros vamos a Suhag a por el refugio ¿Verdad? —dedujo Aaron.

—Pero ¿cómo vamos a ir en dos direcciones distintas si solo hay un vehículo? —Agregó Daniela.

—Justo de eso me encargué anoche y descubrí que el Nilo está bajo Suhag —dijo Alex— Bueno ¿alguien tiene celular cargado?

—Es el desierto —comentó Blanca.

—Pues yo traje cargador portátil, soy muy precavido —dijo en un tono casi burlón.

—Como sea, Alejandro tiene su celular si no me equivoco —dijo Blanca con molestia.

—Si, aquí lo tengo —Lo saqué y se lo lancé a Alex, lo atrapó y empezó a revisar algunas cosas.

—Aaron, te estoy enviando las coordenadas del refugio a tu celular. -Dijo Alex.

—Sí, acaba de llegarme —Confirmó Aaron mientras veía su celular.

—Ahora vayamos al buggy —Ordené.

Todos subimos al buggy, Blanca fue quien se encargo de manejarlo. Miré toda la arena que había y me quedé pensando en cuando acabaría todo esto, me frustraba mucho no haber podido encontrar a mis padres en Nueva York. Por eso estaba decidido a encontrar la cura para que este termine de una vez por todas.

En todo el transcurso del camino nadie dijo ni una sola palabra, no era el momento necesario para hablar de todas formas. Estoy seguro que todos pensaban en lo que necesitábamos para sobrevivir.

—Ya llegamos a su parada —avisó Blanca refiriendose a Alex y a mi.

—Nos vemos después, no olviden comunicarse con nosotros por si pasa algo. —advirtió Alex.

—Ustedes tampoco se olviden de eso —respondió Daniela.

Alex y yo bajamos del Buggy y empezamos a caminar por la arena en dirección hacia el poblado que no debería de estar muy lejos de donde estábamos ahora.

Estuvimos caminando por unos diez minutos hasta que desde lejos logramos visualizar unas casas, de seguro ya estábamos cerca al pueblo.

—Según el mapa es aquí —dijo Alex revisando el celular —Hay que hacer esto rápido, no quiero encontrarme de nuevo con los zombies.

—Tú busca en las casas de la izquierda y yo en las casas de la derecha —Indiqué.

Alex asintió y cada uno fue por su lado, en estos momentos lo que más necesitamos es comida y lo peor es que en estas situaciones encontrar comida es muy difícil.

Entra a una de las casas y vi que estaba en un buen estado eso debería de significar que aún habían cosas. Me dirigí a la cocina y empeze a buscar por todos lados comida.

Abrí unos cajones y encontré algunos sobres de galletas pero nos duraria muy poco como unos dos días contando el día de hoy. Segui buscando en los demás cajones y encontraba latas de salsa que nos serviría para nada, ya me estaba preocupando mucho porque si en esta casa que estaba en buenas condiciones no había mucho de seguro en las otras no habria nada.

Terminé y no había encontrado nada más, me dirigí hacia el baño para ver si encontraba un botiquín o algunos medicamentos que nos ayudarán. Por suerte encontre uno que todavía estaba sellado.

—Parece que aún tenemos esperanza de sobrevivir esta semana —susurré.

Guardé todo en la mochila que llevaba y estaba dirigiéndome hacia la puerta para salir de la casa pero escuche un extraño sonido que provenía de una de la habitaciones.