Sé que la mañana llegará.

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¿Qué haces cuando no puedes dormir? ¿Qué haces cuándo no puedes dejar de pensar?

Estoy consciente de que falta poco para el amanecer y mi cuerpo no aguanta el cansancio pero es que tengo miedo, le temo a cerrar los ojos, a mis sueños.

Se han acabado mis pastillas para dormir y no he salido desde hace cinco días y me la he pasado pegado a mi móvil perdiendo el tiempo, mirando cómo se me escapa la vida, deseando que mi propio ser se agote y deje de funcionar.

Sería muy conveniente.

En un momento de ocio instalé instagram. Me puse de nickname: Yukkuri acompañado de una foto mía de cuando no me veía tan lamentable, unos meses antes de dejar la escuela. Una maldita red social en la que todos exponen lo "maravilloso" de sus vidas mediante fotos.

Empecé a segur artistas de mi agrado, fotógrafos, pintores, cantantes urbanos... Uno en especial atrajo mi atención y me metí a su cuenta para averiguar más sobre él. 

En cada foto demostraba ser polifacético: modelo, compositor, dibujaba y bailaba, encontré unos vídeos de él rapeando y pasándola bien en fiestas. Apuesto, con estilo, una persona envidiable. 

Perfecto y una total mentira.

Tiré el dispositivo a un lado de mi cama y cerré los ojos con fuerza.

Nada, simplemente no puedo descansar. 

Ya casi llego a mi limite.



Demonios, sigo teniendo el teléfono en la mano. Torturándome por las publicaciones de toda esa gente que aparenta ser feliz. A mi no me engañan, sus filtros empañan la verdad pero la diferencia entre ellos y yo, es que ellos sí pueden mentir y estar contentos.

TaeLee127, el nombre de usuario del "chico perfecto" que empecé a seguir ayer. Había tomado una foto de su reciente percieng en la oreja izquierda, adornado con un brillante arete en forma de cadena. 

Toqué mi oreja, tiene uno igual al mío. 

No sé porqué, no pude darle doble click en acción a que me gustaba su publicación. Bueno, sí sé porqué.

Soy lamentable.


Solo me levanto para darme duchas rápidas, ni comer me atrae la atención. Siento que es una perdida de tiempo la cual podría estar consumiendo en navegar por internet. 

Sí, tengo un problema o mejor dicho, muchos. ¿Cómo de ser el típico "chico popular del colegio" terminé siendo un adicto al internet y renegado social? Nadie sabe, ni me importa realmente.

Me seco el cabello que no he cortado hace semanas, me cae sobre los ojos; mis costillas se notan fácilmente y no es algo agradable de ver. Me palmeo el rostro para sacarme del trance y vestirme. 

Lo gracioso de todo esto es que detesto las redes sociales y a pesar de lo anterior no puedo y no quiero despegarme de ellas. 

Lo perdí todo: mi novia, mis amigos, la escuela, mi futuro. Pude percatarme de como las cosas perdían sentido y me vaciaba lentamente, sintiéndome artificial, cual peón de un juego absurdo donde nadie va ganar nunca, de ninguna manera. Las personas de mi alrededor intentaron ayudarme y al final yo les hice el favor haciendo que se olvidaran de mí. Cuando menos me di cuenta todo eso me tenía sin cuidado porque estar acostado en mi cama, resguardado entre mis cuatro paredes era mucho más sencillo que soportar el exterior.

Lo único que me mantenía al tanto de todo, era mi aparato electrónico y sus miles de funciones. Suficiente para mí.

"Me estoy hundiendo en este mar cuadrado".


Una publicación más, este chico bailando al ritmo de una canción estilo hip hop lento, en la descripción mencionaba el nombre: "I am you, you are me" de ZICO. 

Se movía increíble, fluido y con pasos fuertes cuando el ritmo lo requería. Su presentación te cautivaba y sin duda sabía resaltar su cuerpo mediante los movimientos de cada centímetro de él. Pero nada, nada resaltaba más que su sonrisa. No paraba de sonreír mientras se deslizaba por todo el salón, disfrutando de la música, dejándose llevar tal como una tenue briza en una calmada playa. Parecía irreal, parecía genuina.  

Bloqueé la pantalla para parar de ver aquel vídeo y como de costumbre la ansiedad me empezaba a ganar, me muerdo el labio inferior, el que ya dejé todo rasgado en mis miles de intentos de separarme de mi teléfono. 

Joder, estoy podrido, pero él... 

No lo pensé dos veces y al fin apreté el icono que indica "like" y no solo eso, le comente:

"Me encanta como bailas."


¿Qué acaba de pasar? Creo que me quedé dormido por unas dos horas. Estupendo. Automáticamente tomo mi móvil y reviso todo, quedé sorprendido al notar que hace media hora, el chico a la cual le dejé un comentario me  respondió:

"Me alegra que te gustara."

Esa que parecía ser una insignificante respuesta de tan solo cinco palabras, probablemente haya sido lo mejor que me han pasado en mucho tiempo.

Instagram// NCT~ YuTaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora