Cap. 4 Café

55 20 3
                                    

—¿Por qué no te fijas donde andas? — dice Nick muy molesto, nunca lo había visto así.

—Lo lamento encerio amigo.— dice muy apenado el chico; su cara estaba muy roja de vergüenza.

Parecía que Nick quería golpear al chico, el jamás había sido tan violento; era irreconocible.

—¡Cálmate Nick!— tomo su brazo intentando calmarlo.

*Se acerca otro chico*

—¡Hey Jhon! ¿Qué pasa?— pregunta el nuevo chico que al parecer conoce al del jugo.

—Esque por casualidad, bailando tropecé con él.— señala a Nick.— y derramé jugo en su camiseta; pero os juro que no fue mi intención.— resalta ese tal Jhon.

—¡Oh! Lo entiendo; disculpa a mi amigo, fue sin intención alguna.— se dirige a Nick.

Nick se va.

—Me llamo Marco Stlole y este chico despistado se llama Jhon Lockwood.— extiende su mano.

extiendo mi mano en dirección a la suya.  —Si bueno, yo me llamo Stayci.— obviamente no pensaba en darle mi nombre, no lo conozco y no se sus intenciones, inventé mi nombre pensando en una serie que veía de chiquita.

—Un gusto.— pongo una sonrisa fingida.

—Creo que tu novio se fue.— busca a Nick con la mirada.

—No es mi novio, es mi amigo. Creo que iré a buscarlo.— me doy la vuelta.

El chico toma suavemente mi mano.

volteo.— espero volverte a ver.— suelta mi mano y pone una sonrisa.

Asiento y me voy en busca de Nick.

*30 min. más tarde*

—¡Nick! Porfavor contestame el maldito teléfono, juro que no te volveré a hablar si me dejas aquí.— le grito al teléfono que instantaneamente me manda al buzón.

—¡Demonios!— exclamo.

Voy al CAFÉ más cercano y me siento.

*Flashback*

—Me llamo Marco Stole y este chico despistado se llama Jhon Lockwood.— extiende su mano.

extiendo mi mano en dirección a la suya.  —Si bueno, yo me llamo Stayci.— obviamente no pensaba en darle mi nombre, no lo conozco y no se sus intenciones, inventé mi nombre pensando en una serie que veía de chiquita.

—Un gusto.— pongo una sonrisa fingida.

—Creo que tu novio se fue.— busca a Nick con la mirada.

—No es mi novio, es mi amigo. Creo que iré a buscarlo.— me doy la vuelta.

El chico me coje suavemente la mano.

volteo.— espero volverte a ver.— suelta mi mano y pone una sonrisa.

*Fin del Flashback*

—¡Un café porfavor! Para llevar.— me dirigo a la camarera.

—Enseguida.— responde.

—¿Problemas en el amor?— dice alguién muy cerca a mi oido.

—de pronto siento un escalofrio que recorre todo mi cuerpo, estaba súper asustada.— mira no tengo dinero; solo tengo para pagar el café pero si deseas te puedes tomar mi café, al fin y al cabo que ni quería; solo no me hagas daño, estamos en un servicio público y no creo que quieras que todos te vean robándome, amablemente te pido que te tomes mi café.— no dejo de temblar y no puedo voltear.

—¡Pero que ridícula eres! Aunque ya me ofreciste tu café, y no pienso dejar pasar esa oportunidad.— dice Nick divertido.

—¡Tú me dejaste sola!— exclamo molesta.

—Lo lamento Clarisa, necesitaba cambiarme y no pensaba hacerlo delante de todos.— pone una mano sobre su cabeza y saca la lengua con diversión.

—¿Sabes como me sentí?— digo poniendo una mano sobre mi pecho y abriendo la boca fingiendo estar ofendida.

—Juro que te lo compensaré.— pone una mano en mi cabeza y me despeina.

—Quiero que me compres donuts por 2 meses.— explico con mi dedo indice alzado.

—¿2 meses?— abre sus ojos y deja notar lo hermosos que son.

—¡Si y no se digas más!— pago el café y salgo con Nick.

—Jóven Nick, lo estuve buscando.— nos dice el chofer.

—Lo lamento, fuimos a por un café.— señala el café de mi mano.

—Ya es tarde, su madre debe estar preocupada.— dice el chofer dirigiéndose a ambos.

Veo mi reloj.— ¡ouch! Es verdad, ¡Vamos!. — exclamo.

Fuimos a casa de Nick; mi madre se encontraba ahí, conversando con la madre de Nick.

ENTRAMOS Y AMBOS SALUDAMOS.

—¡Mamis!.— exclamamos ambos con cara de diversión.

—¡Y vaya hora que llegan!— menciona Rosset, cruzandose de brazos.

—¡Creo que nos deben una explicación!— dice mi madre haciendo lo mismo que Rosset.

Nick y yo nos miramos y reímos.

—Claro madres.— dice Nick sentándose al lado de Rosset.

—Todo estaba muy bien hasta que derramaron jugo en la camiseta de Nick.—  arqueo una ceja.

—¿En tu camiseta Nick?— dice Rosset con cara de preocupación.

—Si madre.— menciona Nick con la cabeza gacha.

¿Por qué le dan tanta importancia si fue solo un accidente?
Me quede pensativa...

Never Let You Go  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora