a tu medida.

sorpresas

-uraraka san?- el pelirrojo se levantó de su asiento sorprendido.-vaya! Esto sí que es una sorpresa!!- la castaña sólo pudo tratar de no tener una crisis nerviosa cuando lo vio, de todas las personas jamás se imaginó encontrarse a asu ex compañero de la academia.

-eijiro kun.  Es grato volver a verte.- no puedo articular más,  puesto que el chico de cabellos rojos, la abrazo con mucha familiaridad, parecía más un abrazo de oso.
- que gusto volvernos a ver. Hace años que no se nada de mi clase y...
- eijiro kun... no respiro.
- oh si. Lo siento.- la soltó un poco incómodo,  lo siento je je no suelo ver a mis ex compañeros y amigos muy seguido.- la chica Solo pudo recomponerse y logró responder con gran cortesía. -debo suponer que eres la nueva encargada del proyecto o no?.- una gota invisible parecía en la cara de uraraka, mientras trataba de sonreír.

- etto...si je je.

-me alegro que te nos unas a la compañía.  Esto sí que es una sorpresa, dime que te motivo a venir a esta gran ciudad y más en la fiestas.- a la castaña casi se le fue el alma.
- bue..bueno, supongo que esta es una gran oportunidad y ...- fue interrumpida.

- oh disculpa,  debo atender una llamada.- salió de la oficina para contestar.- katsuki! Que bueno que me hablas te tengo Buenas noticias.

- déjate de estupideces kirishima!! Necesito que llames al tipo que llevará nuestro proyecto. Y no me hagas perder el tiempo, esto me costará más de lo planeado!!- kirishima suspiro. Hasta que se le ocurrió la brillante idea.

-oi, katsuki. Es precisamente lo que diría .. ya esta aquí acabo de hablar con el. Supongo que quieres conocerlo en persona.- comenzaba a sonreír ante la idea.

- tsk.. pues ya que. Dile que nos acompañe a la cena navideña. Tengo que adelantar el puto trabajo!.- colgó.  Una sonrisa malévola se formó en la cara de kirishima, esto lo disfrutaría mucho.

Mientras en la oficina una pobre ochako, se debatía entre sí al jefe no le gustará su trabajo o el saber que por error la aceptaron. Eso definitivamente sería terrible, sin mencionar que si no la aceptaban estaría desempleada. Hay No!  Y justo cuando empezaba a hiperventilar. Su amigo, ahora su "jefe" regresaba.

- Buenas noticias ochako san!!! El director quiere conocerte, estas oficialmente contratada!.-sintió unas grandes ganas de llorar de felicidad pese a todo lo que se imaginaba que pasaría.
- es en serio?-aún no se lo creía. -oh gracias!!!, muchas gracias.-una ochako muy sensible abraza a kirishima, del cual este no se negó.  Parece que no ha cambiado nada, sigue siendo la misma niña dulce y sonriente que conoció en la academia.- pensaba él.
- bueno, ahora que ya eres una de las nuestras. Aceptaría venir esta noche a cenar?  El director quiere conocerte y de paso te presentaré con los demás empleados.- hay katsuki, te espera una bonita sorpresa.- pensó. 
- por supuesto! Si el director quiere conocerme, por mi encantada y también deseo conocer a mis compañeros,  espero que les agrade mi compañía.- se sentía feliz. Pero nerviosa por conocer gente nueva eso aveces la ponía muy ansiosa.

- bien.- le dijo kirishima.- pasarán a traerte a alas 8. A tu? Eh donde te alojas ahora?

- es el hotel ibis bastille.- le dijo la castaña.- esta a un cuatro calles de acá.

- entonces no hay ningún problema, ah por cierto como son fiestas navideñas, nuestro director suele ser un poco exigente con la puntualidad.  Una recomendación más.  El director es un poco gruñón aveces pero es una buena persona.- uraraka sentía como el estomago se le encogía.  Estaba nerviosa.

- o.ok. bueno tomare en cuenta todo, eijiro kun. Daré mi mayor esfuerzo!- y salio de su oficina. El pelirrojo aún no podía dejar de reír,  - supongo que no estaba mal darle una sorpresa a su jefe después de todo.
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Ochako regresaba a su hotel. Tenia tantas cosas que comenzar. arreglar el proyecto,  conocer al director, socializar con los demás empleados y ah. Lo olvidaba no tenia ropa adecuada para la ocasión. Pero mientras pensaba en como dividirse el tiempo una llamada la saco de su pequeño dilema.
Era un numero desconocido. Umm seguro que es lida kun.- pensó.
- Hola ?
- en donde demonios te metiste uraraka ochako!- era la voz  de una furiosa mina. Oh no!.
- eh.. hola mina.. como estas.?

- quieres saber cómo estoy?- el tono se su voz cambiaba. La serie de reclamos seguía. - llevo cuatro malditos días tratando de comunicarme contigo. Pensé que estabas desaparecida, que te secuestraron o algo ... que clase de amiga eres!!- uraraka cerraba los ojos, cada que oía subir el tono de su amiga.- lida kun. Ya me lo conto- se puso tensa - dijo que te fuiste a  ayudar un amigo lejano. Tanto te costaba el haberme contado!!- pobre lida kun, seguro le mintió.
- asi es ... - tenía que contarle la verdad pero definitivamente no estaba preparada aún.  Dejaría esperar unos días para suavizarla. -mina ..yo  estaré fuera unos días.  No  pienso regresar en una temporada. - hubo un breve silencio. -mina?.

-tan grave es que tienes que esconderme lo que pasa?. Has lo que tienes que hacer , supongo que este motivo debe de pesar demasiado para que no me lo cuentes, como sea estaré esperando tu llamada cuando de verdad empieces a ser sincera conmigo.
- mina. No yo ..-colgó.

Un trago amargo para ella, sabía que sus decisiones tendrían consecuencias, pero de todos modos aún le dolía. Uno siempre lidea con sus propios demonios internos.- suspiro- esta no era la primera vez que se sentía rota por dentro, era consiente que lastimaba a Muchas personas con sus acciones pero era algo que tenia que hacer. No podía seguir atada a al vida que llevaba, eso lo pudo meditar semanas atrás.  Que estupidez!.- pensó - encontraría la forma de arreglar las cosas con mina y le contaría todo. No tenía caso ocultarlo si después de todo se darían cuenta de su cambio de vida. Comenzó a prepararse para la noche, arrojando su teléfono a la cama y se metió a la ducha para despejar su mente.