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Las fiestas formales eran totalmente aburridas. Sobre todo, cuando tienes a un malhumorado-sin-motivo-alguno-aparente novio de compañía.

No sabía cómo reaccionar del todo ante un Jongin ceñudo y que parecía odiar todo lo que pasaba alrededor. Normalmente Jongin era una persona tranquila, con un aura despreocupada, sus risas eran graciosas y tiernas, aunque pocas veces pudo presenciarlas a solas, ni hablar de ser ella el motivo de risas amorosas. Pero su relación era tranquila. Jongin aun ni siquiera la miraba con lasciva o algo así. A Baekhee no le importaba, mientras tuvieran el título de novios, estaba bien. Tan solo pedía unos pocos apapachos y atención.

Pensó que al ser la boda de la hermana mayor de Chanyeol, seria divertido, pero se olvidó de que, si Chanyeol no estaba con ella, no sería divertido. El alto chico estaba muy ocupado con algunos asuntos de la boda que tenía que atender. No comprendía del todo el por qué Luhan era quién ayudaba a Chanyeol con aquellos deberes, incluso vio a Kyungsoo ayudar un poco.

—Baekhee es una invitada de honor, debes disfrutar de la fiesta con tu novio.

Fue lo que dijo la madre de Chanyeol. Notó a la mujer algo triste (o quizás decepcionada) cuando Chanyeol presentó a Jongin como novio de la chica. Incluso el padre de Chanyeol y la misma novia tuvieron la misma aura por unos instantes.

Prefería estar corriendo para todos lados con sus tacones a estar incomoda al lado de su novio, que gruñía cada que preguntaba algo. Decidió mantenerse en silencio y observar mientras estaba al lado del chico, fingiendo que socializaba de vez en cuando.

Los tacones hacen ver su trasero aún mejor, no lleva un escote, pero aun así se veía sexy, el castaño la hacía ver madura y aún más hermosa, ni hablar de aquel vestido que la hacía ser el blanco de muchas miradas. ¿Dónde lo habrá comprado?

Luhan se veía radiante y Baekhee se sentía nadie en comparación. Se había arreglado y lucía un vestido que adoró cuando lo vio, pero, aun así, se sentía horrible comparada con Luhan.

Luhan tenía las medidas ideales, era alta, delgada, de piel rosada y tersa, sus ojos rasgados eran hermosos, y su cabello largo resaltaba aún más su figura cuando estaba suelto. ¿Quién sería el idiota ciego que la ignoraba?

Alegremente los ojos que ella esperaba no se quedaran demasiado tiempo en la hermosa chica, no lo hacían, y seguían felices sus tareas.

La fiesta siguió su rumbo y ahora todo era baile y comida. Logró ver a Chanyeol y Luhan estar descansando como sacos de papas en una de las mesas de la esquina, sus rostros cansados espantaban a los invitados de ellos.

Se volteó para decirle a Jongin si iban a hablar con sus amigos, pero al darse vuelta, su novio ya no estaba al lado suyo. Recorrió con su mirada el lugar, no encontrando al chico a simple vista, se decidió a caminar un poco buscándolo, y así llevárselo a sentar y descansar un poco sus pies junto al par de sacos de papas cansados de sus amigos.

Se paralizó al ver a Kyungsoo a unos cuantos metros de ella, al parecer manteniendo una conversación con su novio. Vio al chico irse y suspiró en alivio, no era momento para resolver asuntos pendientes con Kyungsoo. Se acercó a Jongin que parecía tener aún más mala cara que antes y se preguntó si el chico estaba harto de la fiesta y quería irse.

—Jongin. —terminó de acercarse, no sabiendo si su novio la escuchó— Hum, no sabía que conocías a Kyungsoo ¿O se han conocido aquí?

—Voy al baño. —gruñó, y se alejó de ella, dejándola algo anonadada. ¿De verdad odiaba tanto aquella boda?

No dejes de amarme. {ChanBaek}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora