¿Han oído aquel dicho popular que decía que "después de la tormenta viene la calma"?
Suena algo irreal considerando las circunstancias pasadas, pero aquel dicho parecía tener cierta verdad en él.
Masahiro sentía una indescriptible sensación de tranquilidad en todos los ambientes donde se desarrollaba; en la escuela sus notas iban mejorando llegando a ser el segundo mejor de su clase siendo solamente rebasado por su mejor amigo, en cuanto a Hasekura, todo parecía indicar que iban por buen camino en su amistad, exceptuando las pequeñas tensiones que a veces provocaba la novia del ojimiel por exigir más atención haciendo que los amigos tuvieran que dejar sus actividades a medias. Aún con esto, ambos se seguían tratando como si nada cuando podían, divirtiéndose y sincerandose el uno con el otro.
Pasando a sus regularizaciones, podía decir que le había tomado mucho aprecio a ambos Oshiba, al menor por ser el que le ayudó en el momento que más lo necesitaba y el mayor por brindarle ayuda aun con todo el temor por ser un desconocido. Les debía mucho, por lo que solo podía compensarlo un poco con su comida y la limpieza, aunque aún sentía que no era suficiente.
Inundado con la idea de como devolver la amabilidad recurrió al ojimiel quién lo escuchaba seriamente desde el sillón de la casa del ahora rubio.
-¿No crees que eres algo estúpido dándole tantas vueltas a ese asunto?-Preguntó el mayor de estos llevándose el primer bocado de *soba* a la boca.
-Es que Aya-chan, no es cortés que solo les cocine y lave por ellos.
-¿Y eso es poco, Settie? Disfruta de la tranquilidad que ahora gozas y deja de ser tan cabezota por primera vez en tu vida.
-¿Tuviste un mal dia?-Interrogó el rubio extrañado de que su amigo viniera tan agresivo, especialmente con él.
-Algo así-Respondió el ojimiel mientras recogía su plato vacio.
-Lo siento, a veces olvido que tienes tus propios problemas-Dijo Masahiro con el rostro rojo debido a la vergüenza que sentía por no ser considerado con su amigo.
El rubio apago la comida puesta en la estufa, se quito el mandil y esquivo a su amigo quien había terminado de lavar su plato, pero Hasekura lo tomó de la mano. Masahiro dispuesto a disculparse nuevamente se sorprendió al sentir como el otro lo rodeaba fuertemente.
-¿Hasekura? ¿Paso algo?
-Me pelee con Ayaka-Dijo de manera fría pero sin ser grosero.
Masahiro entendiendo todo, correspondió el abrazo dejando que el otro descansara su rostro en su hombro, era lo mínimo que le correspondía hacer por su amigo quien había soportado cada lloriqueo suyo.
Ahora entendía por que Hasekura se portaba asi, y él agobiandolo más, realmente se merecía el premio al amigo más estúpido. Dispuesto a pedir perdón de manera correcto, abrió la boca para hablar siendo interrumpido por el ojimiel,
-Settie, solo... Haz lo que tu quieras hacer, no te sobreexijas, si quieres hacer algo más, no te detendré en hacerlo. Es tu problema, solo que no te estreses, disfruta estos momentos de paz. La vida es una ruleta, algunos como tú están arriba, sintiéndose tan libres y felices, mientras que otros estamos abajo sintiéndonos como la asquerosidad mas grande del mundo.
-¿Aya-chan? Yo...lo haré-Dijo Masahiro con las lagrimas resbalando por sus mejillas.
Hasekura con una sonrisa en el rostro se permitió disfrutar la sensación de tener a una persona tan preciada para él entre sus brazos. De repente recordó el motivo de la pelea con su hermana, vió a Masahiro y tomando aire se dio valentia para hablar.
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My First Love [Editando]
FanfictionMuchas veces conocemos a personas que nos hacen experimentar nuevas emociones desconocidas para nosotros, cosas que nunca en la vida creeríamos haber experimentado. Y al ser las primeras en hacer todo esto en nosotras, creemos que estas personas son...