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Cuando Jungkook habló de conocerse lo decía enserio, porque a partir de ese momento intentaba pasar la mayor parte del tiempo posible con Tae, omitiendo el tiempo de estudio y trabajo. Empezaron a desayunar juntos todos los días; Jungkook iba a dejar a Tae a la Universidad los días en que su horario coincidía y luego se iba a trabajar, le pasaba a recoger al medio día o por la tarde y cada vez que podían compartían la hora de comida. Por las tardes cuando Tae no tenía trabajos pendientes o que estudiar salían a cumplir con las actividades del proyecto. De parte de ambos era más que evidente el sentimiento de unión que estaban creando y por lo visto ambos se sentían sumamente satisfechos de ello. Cada vez se tenían más confianza para hablar de temas personales y para confiar en el otro sus proyectos de futuro―Quiero terminar mi carrera y viajar, ya sabes Paris, New York, Italia...las capitales de la moda. Buscaré trabajo ahí y después de tener experiencia suficiente regresaré a Seúl― ¡Lo tienes todo muy claro! ― Son solo proyectos... todo puede cambiar― ¿Y algo especial, algo que sea como un sueño para ti? ― Supongo que como no he tenido una, tener una familia es lo más importante para mí. Quiero a mi lado una persona a la pueda amar y que me ame y también quiero hijos― Terminó la frase con una media sonrisa que fue respondida por otra de parte de Jungkook. Esa sonrisa era la máscara que utilizó el mayor para esconder la profunda tristeza que sintió al pensar en lo dicho por Tae. No era una tristeza consiente, tampoco era que se hubiese tomado el tiempo para analizar o reflexionar sobre lo dicho por el menor. En su mente solo surgió espontáneamente un pensamiento Yo no encajo en ese futuro. Tae por su parte no se dio cuenta de lo mal que sentó al mayor su cometario, por el contrario, creyó que entre ellos los lazos se estrechaban cada vez más.
Jungkook no pudo evitar que lo dicho por Tae le hiciera reflexionar. Se sentía claramente triste y era tonto negarlo. Llevaba varios días analizando su relación con Tae y pensando en cómo el pequeño grosero había empezado a ser "mi pequeño". Cada vez sentía que Tae ocupaba un lugar más importante en su vida y estaba seguro que él también era importante para el menor. Incluso llegó a confesarse a sí mismo que lo que sentía a nivel físico y sentimental era claramente atracción y gusto. Jungkook nunca cuestionó su orientación sexual porque nunca fue lo suficientemente cercano a nadie, pero desde que conoció a Tae, la idea de enamorarse de él no le fue ingrata, al contrario la empezó a vivir con toda naturalidad. Pero ahora que sus ideas estaban claras, había descubierto que Tae añoraba una vida que sin duda él no podría darle y sufría en silencio. A partir de ese momento y sin deshacer lo andado, intentó alejarse sutilmente de Tae, de tal forma que su corazón no siguiese acumulando sentimientos.
Tae con el paso de los días notó la distancia de Jungkook. Al principio este se justificaba en el trabajo, en sus eventos, en sus compromisos, pero esas justificaciones no evitaron que Tae notase su ausencia. Casi no le iba a buscar a la Universidad y la mayoría de los días quedaban a comer con el resto de los integrantes del proyecto, También las actividades que antes eran cosa de dos, ahora pasaron a ser grupales con la clara intención de no estar a solas, las cenas juntos acabaron porque Jungkook se quedaba hasta la madrugada en el estudio y Tae empezó a pasar demasiadas horas en soledad. Esta situación duró más de un mes y no solo no pasó desapercibida para ambos, sino también para el resto del grupo ― ¿Habéis peleado? ― Preguntó directamente Suga ― No sé de qué hablas ― Obviamente de Tae y de ti ― No, no hemos peleado ― ¡Vaya! ¡Qué tonto soy! ¡Cómo van a pelear si no se ven! Tú has vuelto a ser el mismo de siempre ― Realizamos las actividades juntos ¿Qué más quieres? Yo...debo trabajar ― Algo pasó ¿A quién crees que engañas? ¡Lo vemos todos claramente! Vuelves a ser el trabajólico Jungkook después que has tenido un maravilloso mes en que parecías una persona normal ― Descuidé el trabajo, solo lo he retomado ― ¿Me lo vas a decir o no? Creí que después de tantos años de conocernos me tenías al menos algo de confianza ― Jungkook dejó lo que estaba haciendo y miró a Suga con atención. En realidad había algo que lo estaba matando y el trabajo ya no era medicina ¿Tal vez hablarlo? Pero, no fue capaz de decir nada. Al contrario guardo silencio mientras su mirada bajaba al piso― Oye, si no quieres decir qué pasa, está bien... solo quiero que sepas que me preocupas y Tae también ¿Acaso no ves lo triste que está? ― Jungkook levantó la mirada como un resorte ― ¿Él está triste? ¿Por qué?― ¡No lo sabes y vives con él! Tal vez sea por la misma razón que tú estás triste ― Jungkook miró a Suga preocupado, no sabía qué pensar. Pero, Suga tenía razón en algo, prácticamente había abandonado a Tae solo porque él no compartía sus sentimientos. Había sido sumamente egoísta.
