EMPIEZA OTRA CATÁSTROFE

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Los Namek estaban entrenando cuando de repente sienten unos ki acercándose al planeta.

—Esos ki no son comunes en el universo, son más altos que el promedio— dijo Chad.

—Tienes razón, no pensé que hubieran kis de esa fuerza tan considerable en otro lado del universo— dijo Nil.

(Gracias a su intenso entrenamiento, los Namekianos habían conseguido aumentar sus poderes en estos años, llegando a 10 millones hasta 30 millones los de clase baja, 30 millones hasta 70 millones los de clase media, 70 hasta 100 millones los de clase alta y los guerreros élite consiguieron un poder de 300 millones, siendo una de las razas más poderosas del universo)

—Son cuatro considerables kis y los demás son insignificantes— dijo un Namek.

—Espera, hay dos kis... ¿De namekianos?— dijo Mori.

—Es imposible, todos estamos aquí... Espera, ¿Los demonios Namekianos realmente murieron en la destrucción de nuestro antiguo planeta?— dijo Karz

—Eso supusimos todos, puede que sean dos de los demonios Namekianos— dijo Chad.

Al rato ven una nave muy grande acercándose al planeta y aterrizando rápidamente. Dos personas bajan de la nave, los Namekianos no reconocían esa raza a pesar de haber sido una raza muy avanzada tecnológicamente y haber viajado a través del universo.

—Hola, venimos en son de paz. Estamos buscando razas poderosas para que trabajen conquistando planetas para nosotros y así venderlos. A cambio, les podemos dar tecnología y mucho dinero— dijo un tipo de color blanco y partes moradas.

—¿Conquistar planetas? De ninguna manera haríamos eso, no somos la clase de raza guerrera que ustedes piensan— dijo Mori.

—Al parecer no quieren colaborar, bueno... Nos veremos obligados a hacer las cosas a la fuerza. Soldados, ¡ataquen!— grita el tipo.

Una gran cantidad de soldados salen de la nave dispuestos a atacar a los namek, pero Chad lanza una ráfaga de lo que acaba con la mayoría y deja gravemente dañados al resto.

—Ohh... Creo que son más fuertes de lo que creí, al parecer tendré que llamar a mis soldados de élite— dice el tipo— soldado Zarbon, soldado Dodoria, vengan de inmediato y acaben a estas sabandijas.

Los dos salen y se lanzan a atacar, pero otra vez son fácilmente detenidos por Chad, quien de un simple golpe los deja en el suelo.

—Ya veo... Al parecer eres el más fuerte de tu raza, ya que de otra manera no podrías haber acabado con mis soldados de élite.

—Eso es posible, ¿Pero que pasaría si te digo que hasta el más debil podría haber acabado con esas basuras?— dijo Chad.

—Ohh... Creo que son una raza prodigiosa— dice el sujeto.

—Pues piensas bien, nadie se puede comparar a nosotros, ¿Quién eres tú y por qué siento dos kis iguales a los de nosotros?— dice Chad.

—Te lo diré, yo soy Freezer el emperador del universo. El ser más poderoso, jefe de la organización interplanetaria de comercio... ohh, y los que se parecen a ti, son parte de mis soldados élite, los más fuertes que tengo. Les dije que entrenaran un poco junto con los demás soldados de élite  y aumentaron sus poderes  muy rápidamente— le responde Freezer.

—Lo sabía, son esos demonios. ¡Largo de aquí si no quieren ser acabados!— grita Chad.

—¿Que tú nos acabarás? JAJAJAJA... No me hagas reír, nosotros somos los más poderosos del universo, nadie puede derrotarnos y menos sabandijas como ustedes— le responde Freezer.

UNA RAZA PRODIGIOSA: Los NamekianosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora