Regresa para salvarme (segunda temporada)

Capitulo XIX La decisión de Rin...

"...Tal vez...te conocí...antes de que nacieras..."

-¿sabes que será nuestro hijo? ¿será un niño o una niña?-preguntaba la joven azabache en los brazos de Sesshomaru, con rostro de cachorrito para así persuadirlo y que le dijera la información que quería

-con eso no lo lograras Rin-contesto en su tono usual de siempre, mirando hacia el frente, porque sabia a la perfección que si la miraba directamente a los ojos sedería de forma inmediata, la verdad es que él sabia lo que era su cachorro, pero en cierta forma deseaba que su mujer se lo suplicara de una manera mas directa, así tomarlo como un pequeño placer culpable, pero... lo que no se explicaba es que como para él, el inútil de su medio hermano decía que era macho y la escandalosa de su mujer contestaba lo contrario, uno de ellos tenia la razón, pero el poder de convencimientos de ambos lo hacia dudar

-Sesshomaru ¿Qué sucede?-pregunto la azabache interrumpiéndolo en sus pensamientos haciéndolo detener en medio del pasillo, no sabia que contestarle, si seguían en el mismo tema sobre el sexo de su cachorro de seguro ella ganaría y el gran Lord no quería eso

-hmp! Nada-dijo cortante, no sorprendiéndola en su tan repentino cambio de actitud, solo limitándose dejándola recostada suavemente en la cama, para luego el posar su cabeza en su barriga, sorprendiendo a la azabache quedándose muy quieta a la acción del youkia plateado, volviéndose un momento muy intimo entre ambos, perdiéndose entre los minutos y las horas

Así fueron pasando las horas, Rin se había quedado dormida acariciando los cabellos del Lord como acostumbraba hacerlo siempre que se le presentaba la oportunidad, mientras que el Lord, al darse cuenta de aquello, la envolvió entre sabanas, para sacarla de la habitación y llevarla al auto, dirigiéndose a la casa de los padres de la joven, era el ultimo sitio donde se atrevería atacar el enemigo, lleno de humanos, muy céntrico y seria llamar demasiado la atención de su existencia, tomándolo que aquel ser no es estúpido, esperaría el momento para atacar nuevamente y él no le daría ese momento

Al poco avanzar por las calles, Rin comenzaba a abrir los ojos, un tanto desorientaba al verse que se encontraba en movimiento, encontrándose con los ojos dorados observándola con detenimiento

-Sesshomaru ¿adonde vamos?-pregunto de forma ingenua, mientras él volvía su vista al frente mirando el camino indiferente

-a tu casa

-¿Qué? ¿Con mis padres? Pero...

-ahí estarán a salvo, además tu amiga humana, te hará compañía al igual que Jaken-contesto

-pero...¿y tu que harás?

-matare a ese imbécil-musito

-pero...

-nada Rin-haciendo detener su automóvil de golpe-por una vez en tu vida obedece-dijo de una forma muy fría, doliéndole cada palabra a la joven, haciendo mirar hacia la ventana tratando de contener sus lagrimas, no mostrarse débil y a la vez se sentía inútil, sabia que el enemigo la deseaba a ella, no sabia porque razón o motivo, era solo ella su misma pista, pensando por un momento en aquella espada que apareció entre sus manos unos breves segundos para luego desaparecer como si nunca hubiese existido, decidida a encontrar respuestas con sus propias manos e incluso con la negación rotunda y obvia de Sesshomaru, opto que seria la mejor opción, era solo asentir con la cabeza afirmando que no se metería en problema, solo que eso era todo lo contrario

-esta bien...

-hmp!-el Lord se sorprendió a que ella aceptara tan rápido, haciéndolo sospechar, la conocía y a la vez no, era muy impredecible y predecible a la vez, y además ella conocía a la perfección los pensamientos de Yako, por lo que Rin tenia todo el control de él si quisiera