¡Cariño! ¡creo que perdí a los niños!

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— ¡Omma! KyungSoo se quiere llevar esa cosa satánica que contacta demonios.. esa iuja..ouja... demonios esa.. ¡OUIJA! — Delato BaekHyun a gritos desde la sala mientras que observaba como el mencionado guardaba aquel artefacto en su bolso. 

— ¡ES MENTIRA! No lo creas. — Replico a la par que el mencionado alzaba su puño mostrándoselo amenazador y con gesto de "si sigues hablando, dormirás con los peces". 

— ¡AHORA ME AMENAZA! —  Exclamo nuevamente el muchacho tomando con rapidez un sable de luz jedi perteneciente de un pequeño moreno que hace horas había estado jugueteando por allí con el.

 — ¡WU XIUMIN! TE DIJE QUE VIGILES A TUS HERMANOS Y NO DEJES QUE SE MATEN ENTRE ELLOS. — Se escucho desde el fondo de un pasillo la voz autoritaria de JunMyeon que preparaba la ropa del pequeño JongIn y la guardaba junto a la de su marido y la suya.

En el momento que aquel grito fue emitido el mayor de los hermanos, despego la mirada de su móvil para encontrarse con un pequeño moreno que ahora coloreaba un libro de dibujos de Pororo y a sus otros dos idiotas hermanos en plena batalla por ver que demonios metían en sus maletas. 

—  Aaargh.. — Gruñó molesto mientras que ocultaba su rostro contra un cojín del sofá y con sumo disgusto, se coloco de pie para así avanzar hasta ellos y quitarle al más ojón de ambos aquel articulo que había generado la disputa. — KyungSoo ya sabes que papá acabo aterrado la última vez que tuvo esta cosa maldita cerca y créeme que no planeo repetir lo sucedido en la casa de la abuela cuando quisiste contactar al abuelo y terminamos hablando con un niño de siete años que murió ahogado  ¿de acuerdo?— Pronunció aun con cierta molestia el mayor mientras que el acusado asentía suspirando derrotado para luego notar como en la maleta de su rival habían una tonelada indiscriminada de  equipos que le permitieran obtener conexión de internet y más. —

— ¡No es justo que el pueda llevar todo eso y yo no pueda llevar mi miserable ouija! — Dijo totalmente enfurecido el pequeño ser diabólico. 

 — ¡Eso es porque yo no atraigo demonios malvados o niños pequeños muertos que intenten poseer a nuestra abuela para que sacrifique a una cabra! — Riño el mayor por un año mientras que XiuMin observaba a ambos menores con impaciencia. 

JongIn quien se había mantenido al pendiente de sus hermanos con su mentalidad de niño, dejo los colores que había estado usando para pintar a su personaje favorito de Pororo y salió corriendo hasta su cuarto para luego regresar cargando entre sus brazos dos cosas, las cuales depósito ante los ojos de sus tres hermanos en las maletas que se encontraban abiertas. Ahora en la maleta de KyungSoo se podía ver un pequeño peluche de Crong y en la de BaekHyun un Pororo. 

—  Lleven mis peluches, hyung, ya que ustedes no pueden llevar sus cosas favoritas, yo les presto las mías. — Menciono sonriente para sus hermanos y los dos que habían estado peleando se observaron y luego observaron al menor para proceder a suspirar. 

— Mmh..esta bien, puedo sobrevivir sin mi ouija, me haré cargo de tu Crong, moreno. —Dijo KyungSoo mientras que llevaba su diestra hasta los cabellos de su hermano más pequeño para después despeinarlo a gusto.

— Quizá pueda dejar mis cosas y hacerme cargo de tu Pororo..  — Habló BaekHyun mientras que pasaba la vista sobre aquellas cosas que le iban a permitir obtener algo de diversión en aquella isla en la que estarían. 

XiuMin quien había estado todo el momento a lo que sucedía en aquel preciso instante sonrió enternecido por el gesto del menor, JongIn siempre lograba que la paz se generara aunque dudaba que esta perdurara lo que restara del viaje. 

— Bien, ya acabe con tus cosas JongInnie.. ahora ustedes tres par de moustritos bellos, ¿guardaron lo necesario? Miren que solo tienen hasta la noche de hoy para decidir, ya que mañana le iremos a dejar las cosas a sus tíos y nos vamos al aeropuerto.  — Dijo JunMyeon haciendo acto de presencia mientras que observaba la rara situación, viendo como dos de sus hijos mayores tenían los peluches favoritos del pequeño de la familia y como el mayor de todos tenía entre sus manos un tablero que al reconocer al instante hizo que se le acercara para sacárselo y arrojarlo al suelo. — ¡XIUMIN! ¡ve por mi crucifijo! ¡BAEKHYUN! ¡el agua bendita!  ¡KYUNGSOO! ¡busca un encendedor! ¡JONGIN! ¡ve a buscar el zapato izquierdo de tu padre y sostenlo, el olor de esa cosa aleja hasta a los demonios!  —Ordenó como capitán de una base militar.— Finalmente me desharé de ti cosa del demonio. — Pronunció señalando el objeto que estaba en el suelo.  

— ¡YAH! ¡omma no invoque nada esta vez! — Dijo apurado KyungSoo protegiendo el regalo que su padrino KyuHyun le había dado, ganándose una mirada algo escéptica de su padre. 

—  Mmh.. ¿en serio? — Inquirió interrogando a los otros dos mayores que asintieron rápidamente y observaron como el pequeño moreno se estaba preparando para ir a buscar el zapato de su padre a la habitación de estos.  — De acuerdo les creo.. JongInnie ya no es necesario hacer nada. — Respondió deteniendo al menor para que así se quedara tranquilo donde estaba. 

— Eso si, omma, lo que si tendrías que quemar son esos zapatos, me sorprende que todavía no maten a JongIn cuando va a buscarlos para dárselos a papá. — Dijo BaekHyun haciendo una ligera mueca de disgusto de tan solo pensar en el olor de aquellos pies. 

— Tiene razón, no perdimos a nuestro negro..  — Comenzó diciendo KyungSoo para luego cambiar aquella última palabra al ver el cambio en el rostro de su padre/madre. — A nuestro moreno de pura suerte. 

— Creo que este enano se hizo inmune a los apestosos pies de papá. — Comentó el mayor de los hermanos tocando la cabeza del niño mientras que su padre suspiraba. 

—  O quizá perdió el olfato aunque bendito sea si así fue, ya que no debe sentir el olor de esa peste.. — Murmuró el único mayor de la casa observando a su hijo más pequeño con cierta lastima, es que sin duda los zapatos de su marido eran peor que cualquier olor a queso o algo así.