Yuuri Katsuki un pequeño oso de 15 años volvía a su antigua escuela después de estar un año en Rusia como estudiante de intercambio junto con un amigo que haría el intercambio en su misma escuela pero no esperaba que al entrar su vida tranquila y pa...
En la habitación del oso menor, se encontraba este junto con un conejo que se encontraba bastante asustado, se aferraba al oso como si su vida dependiera de ello, aun no podían dormir, uno por lo asustado que estaba y el otro porque sentía que su corazón iba a salir al tener a su pareja a su lado.
v-viktor... puedes acomodarte mejor, me estas asfixiando -le decía el menor mientras trataba de alejarlo un poco-
yuuri~ -le llamo el conejo haciendo que el menor se estremeciera- no me alejes de ti por favor
viktor... -le acaricio la mejilla- no lo hago, solo quiero que te acomodes para que podamos dormir mejor
y si mejor -en unos instantes se posiciona arriba del oso- profundizamos nuestra relación -se acerca lentamente-
q-que dices vi... -no pudo terminar la frase ya que fue callado con un beso el cual correspondió a duras penas-
El pequeño conejo al no tener rechazo alguno, profundiza más el beso metiendo sus manos entre la pijama del oso haciéndolo respingar. El oso le mira bastante avergonzado, aunque la habitación se encontrase oscura el conejo podría sentir los nervios y la vergüenza del contrario.
v-viktor... m-me da vergüenza... no me encuentro preparado aun... creo...
yuuri~ -se separa un poco- no haré nada que tu no quieras... aunque tampoco iba a propasarme... tu hermano me mataría...
mmm... -el oso asintió avergonzado, la habitación de su hermano se encontraba al lado- mejor... durmamos, si?
si, está bien yuuri -el conejo solo pudo sonreír aunque en la oscuridad no se notara su sonrisa, ambos se acomodaron mejor en la cama y este abraza al pequeño- buenas noches yuuri -le deja un beso en sus cabellos-
buenas noches viktor -se acomodó en los brazos de su pareja y se quedó dormido al instante-
Y el fin de semana se terminó en un santiamén, ambos osos junto con el gatito fueron a encaminar al conejo hacia su hogar, aunque este estuviera apegado a su pareja, ambos notaban que algo andaba mal entre el oso mayor y el gatito gruñón.
yuuri~ -le llamo en susurro el conejo- es mi imaginación o le ocurre algo a ellos dos.
mmmm, he notado a mi hermano un poco raro pero... no sabría decir que es...
Ambos se quedaron con la duda, llegaron al hogar del ruso y este se despidió con su típica sonrisa, de vuelta hacia la casa de los osos, yuuri observaba a la pareja, algo había ocurrido y no se imaginaba nada. Al llegar a su hogar, organizaron todo para el día siguiente ya que tenían escuela.
Ya bañados todos, el oso menor camino hacia su habitación encontrándose al gatito, avergonzado, todo su ser dudada, la duda le carcomía, quería ayudar a su amigo y a su hermano ya que ambos no se comportan así.
yura -el nombrado dio un gran salto-
estúpido cerdo! me asustaste!! -le reclamo el rubio-
ocurre algo entre tú y mi hermano? -le pregunto directamente, si le respondía o no era cosa del ruso- puedo ayudarte en algo?
emmm... se nota mucho? -le comento avergonzado- es que... es que... me volví el novio de tu hermano -le confeso- p-pero... hicimos algo... y nos sentimos bastantes avergonzados -oculto su rostro con una almohada-
-el oso menor le miraba atento, no quería preguntar que hicieron, se imaginaba que fue algo más íntimo y si ambos sentían vergüenza no podía ayudarles en nada- solo... deben actuar normal...
pero como! -le tira la almohada- hasta dónde has llegado tú con el calvo! -le pregunto con el ceño fruncido-
lo máximo que hemos hecho solo besos y abrazos. -le confeso en un tono bastante casual- solo te diré que él quería profundizar nuestra relación pero.... no me siento preparado... es todo... -le miro con cierto sonrojo- y que si mi hermano se enteraba lo iba a matar.
tienes razón -susurro el rubio- bueno, mejor vayamos a dormir... gracias por escucharme cerdo.
de nada yura...
Ambos se acomodaron para dormir, el pequeño oso cayo al instante en los brazos de morfeo mientras que cierto gatito aun pensaba en lo sucedido, pasaron las horas y no logro conciliar el sueño. La mañana llego y el rubio tenía unas pequeñas ojeras en su rostro cosa que todos notaron pero no le dijeron nada.
Camino a la escuela, se encontraron con el conejo y se uno al grupo. Todos llegaron en silencio los mayores se fueron a sus respectivos salones al igual que los menores, ambos se sentaron en sus pupitres a esperar que llegara el profesor.
yura... -le llamo el oso- aun no haces nada con mi hermano -le mira preocupado- no quiero verlos así.-
cerdo... cállate... no pude dormir por lo mismo -estaba dispuesto a cerrar los ojos pero en ese instante llego el profesor-
buenos días alumnos! -saludo su profesor bastante animado y observo que todos se sentaran- hoy les tengo una gran sorpresa! tenemos a un nuevo compañero que se transfiere a nuestra escuela. -hizo una pausa- pasa por favor
La puerta se abrió lentamente, a paso lento entro un niño de rasgos asiáticos, cabello negro y con un rostro bastante serio, con unas orejas grandes y una cola peluda que podía deducirse que un can, el profesor escribió su nombre en el pizarrón y todos esperaban a que el nuevo se presentara.
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(créditos al respectivo autor)
me llamo Seung-gil Lee, soy de corea, tengo 15 años y soy de la especie lobo. -hablo seriamente-
muy bien Lee , veamos, siéntate detrás de Katsuki por favor. -el nombrado levanta la mano y el nuevo se acerca para tomar asiento-
La clase transcurrió bastante normal, en el receso el pequeño oso se gira para poder hablarle al nuevo, cosa que solo le miro seriamente y coloco un poco nervioso al oso.
em... un gusto Lee, mi nombre es Yuuri Katsuki...
un gusto.
e-él es mi amigo Yuri Plisetsky, también es de intercambio. -le hablaba apuntando al rubio que le miraba con el ceño fruncido y este le responde de la misma manera-
y dinos, porque te transferiste? -le pregunto el rubio-
vine porque mi pareja está aquí -se cruza de brazos- todo por culpa de su hermana, según ella estaba el amor de su vida aquí y lo arrastro.
ambos le miraron sorprendidos, no se esperaban aquella respuesta.
y...y... como se llama tu pareja? -pregunto temeroso el oso-
hm, Michele Crispino.
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Como están mis bellos y hermosos lectores.
Les deseo un feliz año 2019. Espero que este año sea mucho mejor que el anterior!
No tengo excusa por no poder actualizar, pero ya terminaron mis clases!!! y podre actualizar sin problemas hasta marzo, que vuelvo nuevamente. T--T
Pero les quiero agradecer la paciencia que tienen conmigo y esperarme T-T les quiero.
Espero que les guste el nuevo capítulo, a que no se esperaban la nueva pareja. <3
