-Dale, yo lo agarro, vos pegale-dijo, muy animado Valentín.
-Estás en pepe vos-rechazó Kiara-. Si no dejás de joder le voy a decir a la seño.
- Buena quién era... No seas maricona.
-Yo no soy maricona, el maricón sos vos que le querés pegar a alguien que no es ni la mitad de tu tamaño, y que, encima, no te hizo nada. Yo me portaré mal en el aula, me reiré, contaré chistes y todo lo que vos quieras, pero injusta, no soy.
-Dejá de hacerte la madura y ayúdame con aquel pelotudo.
-¿Qué te hizo? Seguro te maltrató ¿No?-preguntó, irónica.
-Me dijo La Gorda.
-Valen, yo entiendo que te moleste bocha que te jodan estas cosas, pero no es razón para pegarle a nadie.
Suena la campana que significa el fin del recreo.
-Uy, ¿Ves? La cagaste.
-Yo no te cagué nada, te la cagaste vos solito al engancharte en esta conversación, che, listo, fue. Dejalo.
-Yo hago lo que quiero.
-No, no lo haces. Le puedo decir a la seño lo que pensás hacer y no te va a dejar.
-Ay, sos una ortiva.
Valentín se va del patio y entra al aula. Kiara se queda contemplando las opciones un poco más. No, no quiere entrar ahí, odia la escuela. No es mala, tiene un promedio de 8,6 y es delegada, tiene muchos amigos, de todos los lados, chicas, chicos, los que se portan bien, los que no tanto, los nuevos, los antiguos, etc. Es muy sociable y todo eso, pero hay algo que le falta, aunque ella no sabe lo que es. Cuando estaba pensando en todo eso, y en encontrar la razón de su tristeza, la maestra de séptimo grado le hace unas caricias en la cabeza, le sonríe y le apunta la puerta del aula, por donde ya habían entrado todos sus compañeros, animándola a entrar.Kiara le sonríe y entra, seguida por ella.
Se sienta en su lugar, al fondo, como siempre, con Alexia. Camila viene a decirle algo, pero Kiara no la escucha, como pasa casi siempre. Los chicos gritando, como suelen hacer. La seño Clara parada al frente intentando que se callen todos y se sienten, como acostumbra a estar. Todo era una rutina insoportable, que la torturaba poco a poco, como las más dolorosas. Ya estaba cansada, quería un cambio, ¡Y ya!
-... ¿Vas a ir?-concluyó Camila.
-¿A dónde?-a Kiara la agarró desprevenida. No tenía ni idea sobre qué le estaba hablando.
-Chabona, ¿Me estabas escuchando?
-Emm... Sí... Obvio-mintió-. Solo no sé el lugar.
-Ahh. En el anfiteatro.
-Ok veo.
Camila se vuelve a su asiento aproximadamente tres bancos adelante del de Kiara, junto a Bianca
-Bueno, hoy vamos a ver temas de la potenciación...
A Kiara le cayó un papel en la mesa, mejor dicho, un avioncito con un mensaje, que decía "Kiara", así que lo abrió.
Era un papel medio roto, con cuentas de un lado y unos apuntes muy, pero muy incompletos. En el dorso decía "Benjamín Nisso". En el mensaje se leía lo siguiente:
"Eu fea sapoide, vas al anfi el sábado ¿No? Va a estar re zarpado, vamos todos los pibes, y la pesada de Camila, no me mandes la respuesta por éste medio que conozco como sos lanzando avioncitos, me avisas en el recreo"
-...cuando es así es "equivalente"...
Se acercó Leda a su banco.
-¿Vas al anfi? A mí no me invitaron... así que pensé en hacer una juntada con las chicas y, si querés...-intentó invitarla, aunque titubeó, le daba un poco de vergüenza,
-Banca, ¿Cómo que no te invitaron? No tenés por qué esperar a que alguien te invite, el anfiteatro es público y gratuito. En cualquier caso, te invito. ¿Querés venir conmigo y con los chicos el sábado al anfiteatro?-preguntó Kiara.
-¡Me encantaría! Gracias.
Leda sonríe y Kiara le guiña un ojo, también sonriente.
En el recreo Kiara le dijo a Benja que iba, se encontraron, obviamente, donde siempre lo hacían, al lado del armario que está cerca del baño, ahí iban todos los de su grupo, era el escondite perfecto, lo había encontrado el hermano de Kiara, al igual que la contraseña de wi-fi del vecino de la escuela, y todo ese saber de un chico que cursó seis años en esa escuela y se graduó, pasaron a Kiara. Pero Leonardo, que así se llamaba, ya se había ido a estudiar ingeniería en una universidad muy lejos el año pasado.
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Ojos Verdes
Teen FictionElla pasa por una etapa difícil de su vida, ya no es una nena, pero tampoco es adulta. Está aburrida de vivir su vida. Después de todo, es una adolescente normal, ama la musica, se siente atraida por algún chico, pero hay algo que ni ella misma sabe...