Ojos Verdes

El anfiteatro

Kiara les dijo a sus papás que salía con sus amigas, así que la dejaron ir. Fátima era su vecina, así que pasó por su casa para ir hasta el anfiteatro con ella.

De camino al anfiteatro, tuvieron la charla de sus vidas, hablaron de temas desde el último partido de River, hasta de su libro favorito-Kiara, por supuesto, hablaba de Harry Potter, pero Fátima de Ciudades de Papel-, se cayeron muy bien, excelente.

Cuando llegaron, estaba pasando algo muy raro. Azul estaba sentada en una butaca alejada por dos asientos de las de Antonella y Milagros, llorando. Eso llamaba mucho la atención, pero lo que hizo que las dos chicas quedaran casi en shock, era que estaba pasando lo que menos se esperaban; Ojos Verdes y Mili se estaban dando un beso que ya iba como cinco o seis segundos. Siete. Ocho. No se separaban más. Así que Fátima y Kiara se dirigieron a sus lugares, pero sin molestar a las chicas, que no dejaron de besarse ni para saludarlas. Se dispusieron entonces, a consolar a Azul.

-¿Qué te pasó?-fue lo primero que atinó a preguntar Fátima-¿Estás bien?

-Ah, hola chicas-fue todo lo que respondió Azul-.

-Si no querés decirnos, no nos digas-avisó Kiara-. Solo que si nos necesitás, acá estamos para escucharte, hablarte, o abrazarte si es necesario.

Azul miró a los ojos por unos segundos a Kiara, y la abrazó, la abrazó con todas sus fuerzas, pero Kiara no se quejó, porque Kiara daba todo por sus amigas, no le importaba que le doliera la espalda a la noche.

-Vos peleala, normalmente diría que no es para vos, pero estuve mirando, y sé que sí. Esperá. Esperala.

-No sé de qué estás hablando-dijo Azul, reincorporándose, con un tono poco convincente, secándose las lágrimas-.

Kiara no habló, en ese momento las palabras estaban de más.

>>Perdón, tengo que ir al baño-siguió Azul-.

Kiara y Fátima, automáticamente miraron a Anto y a Mili. Ellas ya se habían separado pero estaban tomadas de las manos, charlando y riendo con caras de enamoradas.

Había mucho de qué hablar.

-Sabías lo de Azul-sentenció Fátima-¿no?

-Lo sospechaba.

-Me lo podrías haber contado.

-¿Un chisme sin corroborar? No, no es mi estilo.

-Un segundo... Milagros tiene novio.

-Eso es malo, y bueno.

-¿Por?

-Significa que lo suyo con Oj... Antonella no es nada, pero también significa que tiene una relación seria, lo cual no es bueno porque Azul no tiene chance ahí.

-Pero también es raro, porque, si lo que le molesta es que ella esté con alguien, ¿por qué no llora cuando la ve con Bruno?

-Fácil: la ve mucho más feliz con Antonella. Lo de ella con Bruno es muy superficial, puede romperse en cualquier momento. Además, acaba de notar que Milagros no la registra no porque le gusten los hombres, sino porque no le gusta ella. Ya viste como en menos de una hora se chapó con otra mina y ella no lo consiguió ni en siete años.

-Pero no entiendo... ¿Entonces lo de ella con Bruno es todo mentira? ¿Le gustan los hombres o las mujeres?

-¿Sos tonta? Le gustan los dos, sin una regla, se enamora de quien la haga feliz, sin importar que tenga pene o no. Es bisexual o pansexual.

-¿Que se enamora de los cara de pan?-inquirió, irónica, y luego rió, Kiara no la acompañó, estaba seria-Ok me pasé.

-Sí. Ahí viene.