Valdioria

Capítulo IX

Kabaya se encontraba en su oficina tomando una taza de café como cada mañana mientras leía las noticias de hoy. Se percató al leer la noticia principal.

"Se encuentra cadáver en el bosque del norte.  Los forenses investigaron su hora de muerte parece ser entre las 10:30 -11:00. Se toma precauciones de no salir al bosque solos y en la noche"

En ese momento llamaron a su celular tratándose de Godfree un compañero del trabajo para hablarle acerca del cadáver encontrado. Kabaya le molesto el hecho que no lo llamó en el momento.

Asuna bajo a desayunar solitaria pues Kabaya salió de la cabaña, ni siquiera se llevó un pan para el camino. Lavo los platos y se sentó en el sofá leyendo un poco, necesitaba distraerse algo le preocupaba una extraña sensación. Tocaron la puerta y al fijarse en la entrada era su amiga Alice la invito a pasar ¿que estaba haciendo tan temprano?

—Hola Asuna-

—Hi Alice...no es que no me moleste tu compañía, pero ¿que haces aquí tan temprano?-

—Vine haber que tal te encuentras y pasar un poco el rato-

Apreció el gesto de su compañera e hizo una taza de té para ambas. A pesar que ambas se conocen muy bien desde su infancia y no había problemas de comunicación, en este caso era un poco diferente a lo habitual. Se encontraba un poco de tensión en la atmósfera y ninguna habia comentado palabra alguna después de hablar sobre la noticia principal que tenía a todo el pueblo en preocupación. Después de enterarse por su amiga ya sabía el motivo por el cual Kabaya salió sin más y la razón por la cual Alice la visita justo ahora.

—Alice aprecio mucho de verdad el motivo de tu visita, pero créeme que estoy bien con esta noticia—

Asuna habia tomado la iniciativa de romper el hielo y aunque Alice no dice palabra con sólo mirarla puede descifrar lo que piensa en ese instante.

—Asuna después de trabajar permíteme ir por ti, no quiero veas algo como eso...tu sabes con el asunto de tus-

—Lose— la interrumpió. Era un asunto que la pelirroja había superado a medias y por ende era un asunto que no quería tocar aún, ni recordar. —Gracias Alice-

Pasaron de página e hablaron acerca de otros temas y como algunas recetas nuevas que podría probar Asuna para esa familia y para su mentor. Pasaron mayor parte de la mañana preparando todo tipo de recetas para distraer a la pelirroja. Hablando del trabajo ya casi fue hora de irse y el camino no es para nada cercano, Alice ofreció llevarla y juntas fueron rumbo a esa mansión donde el trabajo espera por ella. Al llegar la dejo Alice e se despidió, pero antes de tocar a la puerta escucho unos fuertes gritos desde dentro.

—¡La discreción! ¡¡que no te importa lo peligroso que es para nosotros!!-

—Te recuerdo lo que somos y no es mi culpa. Estaba en mi límite desde hace varias semanas-

—¡Para eso tenemos un suministro moderado! ¡no es mi culpa que odies tomartelo cuando debes!-

La puerta se abrió mostrando a un Kazuto enojado y a una Asuna apenada y sin poder hablar. No hubo palabra y sólo el chico paso de su lado ignorandola por completo. Silica salió después siguiendo a su amo y encontró Asuna.

—Lo..¿escuchaste?-

La pelirroja asintió e Silica la invito a pasar, una tensión reinaba el lugar. La señora Midori estaba sentada en uno de los sofás de la entrada junto con su hija con la cabeza cabizbaja. Al ver Asuna pasar se reincorporó. La misma pregunta de antes se dio.