Diaval

capitulo 1 Encuentro

Fuck my life

Primer pensamiento del día, todos los días desde hace dos semanas.

Definitivamente llevar una vida aburrida puede llevar a desarrollar mañas raras, como hablar sola, hablarles a las plantas y emocionarte porque los vecinos de al lado no hicieron fiesta hasta la madrugada el fin de semana... definitivamente necesito dormir el fin de semana para poder sobrevivir los días de universidad, pero mis nuevos y enamorados vecinos rara vez me lo permiten.

Me levanto perezosamente de mi cama, agarro la toalla y arrastro mis pies hasta el baño, es lunes, y tengo clase a las 7 AM, enciendo la ducha caliente y me baño.

Al cabo de 2 horas estoy lista para salir, voy a clase, pero primero debo pasar por la biblioteca a dejar los libros que saque la semana pasada y se vencen hoy. Veo mi uniforme Vinotinto en los reflejos de los ventanales de la biblioteca y me siento hermosa... unos nacen para ser médicos o enfermeras, pero yo, yo nací para ser fisioterapeuta y llevo orgullosamente mi uniforme.

Después de las primeras horas de clase estoy en la cafetería del hospital comiéndome una compota, amo las compotas especialmente la de ciruela y la de durazno. Tengo que hacer la ronda del medio día y la de la noche, así que termino de comer rápidamente para poder leer apropiadamente las historias clínicas de los pacientes que se me han asignado.
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Miro la hora y puedo ir a la conferencia de neurorrehabilitación que se realizara después del turno de la noche ( área de las ciencias que encanta a muchas personas que trabajan con la salud), camino por los pasillos blancos del hospital mirando hacia algunas habitaciones, hasta que salgo al jardín y camino a la sala de conferencias, creí que iba a estar muy llena de personas pero está bastante vacía, debe ser por el horario en que decidieron hacerla, me siento en una de las sillas de enfrente y se sienta un chico a mi lado, lo miro rápidamente antes de hacer contacto visual y en mi mente aparece la palabra mojigato así que lo ignoro, igualmente no tiendo a ser la primera que habla, cinco minutos más y otro chico se sienta a mi lado, algo me dice que lo mire a la cara más tiempo de lo normal y encuentro unos bonitos ojos verdes, me doy cuenta de que lo he mirado demasiado y desvío la mirada rápidamente hacia la tarima dos minutos más... ya va a comenzar la conferencia.

Pasada una hora el chico de los ojos verdes toca mi hombro y me dice - hola, mi nombre es Alexander, ¿quieres charlar un rato conmigo cuando la conferencia termine?

- ¿Y porque debería hablar contigo?, mejor presta atención a las afasias de conducción y el test de Boston.

- Whoa así que alguien es un poco arisco

- Dime algo interesante y lo consideraré

- Es que se me sube la bilirrubina... y no me creerás porque

- ¿Porque?

- Bueno, cuando te miro y no me miras

- Pffftt- casi o puedo contener la carcajada que sale del fondo de mi estomago- ese chiste ya está pasado de moda

Al salir Alexander presiona mi hombro derecho y señala en dirección a la cafetería, lo sigo y ya saben hago el debido "escaneo primario de posible objetivo varón", no está nada mal es más alto que yo y siempre tiene una expresión de "zorro muy astuto", uno al cual le debes tener mucho cuidado, de igual forma guardo este pensamiento en la carpeta de cosas a analizar después, ya que me fijo en el uniforme azul celeste y la bata con las letras que rezan "medicina", me detengo , tomo aire, y vuelvo a caminar como si nada.... Médicos, espero haber encontrado uno amable ya que tienden a subestimar mucho a los fisioterapeutas y a sus compañeros enfermeros, me molesta mucho así que comienzo a repasar mentalmente todo lo que he aprendido hasta ahora... es como mi sistema de defensas. En un abrir y cerrar de ojos estoy en la cafetería con una avena en la mano esperando a que aquel chico termine la fila de reclamar lo que haya ordenado, lo veo caminar hacia mí con un jugo y cuando toma asiento no puedo evitar preguntar:

-no tomas café?

-no me gusta, prefiero agua o jugo

-genial a mí tampoco me gusta... dime porque quieres charlar conmigo?

-no sé, pareces interesante, dime ¿tienes chatl?

-sí- ¿interesante? Será porque hoy solo me hice una cola de caballo y no dos colas bajas como acostumbro a hacer... ok no

- ¿podemos intercambiar números?

- vale- rarito...

Hay un pequeño silencio mientras intercambiamos números y siento una pequeña sensación de ansiedad dentro de mí, no sé si es una advertencia y de todos modos, no voy a pensarlo...por ahora. Miro mi reloj y es hora de que me vaya, así que me despido de mano, pero él responde con un beso en la mejilla...no estoy acostumbrada a eso, pero no esta tan mal acercarse de vez en cuando a las personas fuera del trabajo.

SPHINX

gracias por leer esta primera parte chicos