Eres tan estúpidamente adorable (Castiel x Nathaniel)

Capitulo 6

-¿Perdon? - pregunto tosiendo un poco. Tratando de evitar hacer un show. ¿Me lo ha dicho a mi?

Miro detrás de mi para cerciorarme que se ha confundido de persona al decir esa declaración. No hay nadie más que una mesera que acaba de pasar para dejar un pedido. A decir verdad, Sucrette se esta acercando con mi pedido, frunciendo el ceño al ver a Kentin. Sonrió cordialmente para volver mi mirada hacia el chico de ojos verdes que tengo al frente. Frunciendo el ceño, examinandolo.

Hace unos cuantos días hablamos y me expresó su enorme fanatismo por mi, además de que escuche a su amiga gritar sobre que yo le gustaba. Es muy raro, se comportó tan tímido en ese entonces que me pareció muy adorable. Castiel me comentó algo sobre que él era el más travieso de su aula en la época de colegio pero cuando me abrazó tan repentinamente en el baño para luego sonrojarse me pareció muy tierno. Pero ahora está aquí diciendo como si nada que yo le gustó mientras juega un juego tipo Guitar Hero en su celular, pretendiendo que no ha dicho algo importante.

-Aquí está tu pedido, Lys. ¿Querrá algo tú amigo? -indica Sucrette señalándolo.

La chica de cabellos marrones le da una fugaz mirada a Kentin y la vuelve hacia mi. Atenta a lo que yo diga. Kentin levanta su mirada de forma rápida para devolver de inmediato a su juego.

-No, gracias. Me ire rápido. -responde Kentin.

Esa sonrisa es la más cínica que he visto en su rostro. Nisiquiera miró a la mesera cuando le sonrió.

Sucrette asiente sonriendo de nuevo.

-Si nesecitas algo, me llamas. - indica la chica.

Le asiento como respuesta y ella se da la vuelta volviendo al trabajo. Observo a Kentin, recordando que su amiga me ha dicho que lo cuide por el momento.

-No te puedes ir. Tu amiga me ha dicho que te cuide.

-¡Mierda!. Perdí. -Kentin exclama apagando su celular para dejarlo descuidadamente sobre la mesa y frotarse su rostro con sus manos de forma cansada. Veo que su vocabulario tan poco es el mejor. Su rostro de chico lindo no concuerda para nada su manera de comportarse. Kentin deja sus manos tapando su nariz y me mira. -¿Tu novia?

Kentin señala levantando un dedo hacia la cafeteria central, donde Sucrette esta mirando en mi dirección. La miro y ella se voltea dándome la espalda para iniciar una charla con su colega.

-¿Sucrette? No. -replico rápidamente.

No estoy seguro porque respondí tan apresurado. Talvez por que parecía que los ojos de Kentin me miraban como si estuviera haciendo algo mal. Kentin me vuelve a mirar con sus ojos verdes, intensamente. Baja su mirada enfocándose en algún punto en mi rostro para luego volver a mirarme, con una sonrisa tirando de lado. Raro.

-Bien. Debería irme. -contesta.

Agarra su celular y se levanta de su asiento. Sin darme cuenta también me he levanto abruptamente de mi asiento.

-Debería acompañarte. -¿Debería? ¿Qué estoy diciendo?

Kentin me mira, realzando su sonrisa de lado. Estira sus brazos sobre su cabeza en dirección al techo mientras se para en la punta de sus pies, estirando todo su cuerpo. Pienso aprovechar este tiempo sacando mi billetera para dejar el dinero que debo por mi compra, pero me desconcentra ver unos agujeros en sus jeans, dejando a la vista bastante de su piel. Dios, sus piernas son realmente bonitas. Trago fuerte al darme cuenta de mi pensamiento. Debería despegar mi mirada de sus piernas y rebuscar en los bolsillos de mi billetera por el dinero. Pero sigo subiendo mi mirada hasta su cinturón, su polo se arruga un poco encima de este. Y ahí está su polo color verde. Paso a mirar sus brazos. Otra vez trago fuertemente. Él esta demasiado bien. Demasiado mi tipo. ¿Como es que no me di cuenta de cómo andaba vestido antes? Mierda, yo nunca me he dejado llevar por los deseos carnales, nunca ha habido alguien que me llame lo suficiente la atención, pero por él, puedo observarlo todo el día si quiere.