Margaret: *pensativa* Hmm...
Nigth: *inquieto* ¿Qué ocurre, jefa?
Margaret: *mirando la puerta* Nada... aquí es...
Ambos se encuentran frente a una puerta donde unas letras rojas advierten:
Partes y Servicios
NO ENTRAR
Nigth: *escéptico* Hm... ¿Aquí es? No me inspira mucha confianza.
Margaret: *con una mirada significativa* Lo que verás aquí... NO... debes contárselo a NADIE... ¿OÍSTE?
Nigth: *asintiendo con seriedad* Sí, jefa...
Margaret: *insistente* Ok... entra...
Nigth: *resignado* Está bien... *tras recibir la orden, se adentra en la sala* Dios... está muy oscuro...
Margaret: *guiándolo* Por aquí está el interruptor... *clic*
Con la iluminación restablecida, la habitación se revela ante Nigth. La escena es impactante: cuatro trajes dañados se presentan ante él. Un traje amarillo que representa a un pollo, pero con la mandíbula suelta. Un traje blanco que parece ser de una zorra albina, pero solo sus manos y su endoesqueleto son visibles, ya que su cabeza y pies están ausentes. Otro traje, de color café, muestra signos de deterioro, con partes carcomidas por hongos y aceite. Por último, una figura de coneja carece de rostro, teniendo solo la mandíbula inferior intacta, y su mano derecha y pie izquierdo sin su recubrimiento característico.
Nigth: *asombrado y confundido* ¿Qué es todo esto?!?!?
Margaret: *explicando* En el formulario que te di para el trabajo, pregunté si tenías experiencia mecánica. Tú dijiste que sí. Así que te pido, por favor, que los repares...
Nigth: *determinado* No tiene que pedirme nada por favor...
Margaret: *interrumpiéndolo* Sí debo...
Nigth: *sonriendo* Para nada... soy su empleado, usted es mi jefa. Debo pedir las cosas por favor. Además, la caballerosidad es una cualidad que siempre he mantenido.
Margaret: *reflexionando* Hm... está bien. Bueno, ¿puedes arreglarlas?
Nigth: *afirmando* Por supuesto.
Margaret: *comenzando a agradecer* Gracias...
Nigth: *interrumpiendo en tono jocoso* Pa Pa Pa Pa pa...
Margaret: *sorprendida* ...
Nigth: *respetuosamente* Ok... yo las arreglaré. Puede retirarse.
Margaret: *saliendo de la sala* Ojalá puedas repararlas...
Nigth: *solo en la sala, saca un cuaderno y un lápiz de su mochila* Ok... a trabajar.
La sala está llena de partes desmanteladas y herramientas dispuestas. Nigth se sumerge en la tarea con una determinación palpable. Horas pasan mientras examina cada pieza, ajusta engranajes y busca piezas faltantes. Finalmente, encuentra las partes necesarias y su atención se centra en ensamblar las animatrónicas que yacen en un estado de descomposición.
Nigth: *suspira agotado* Ahhh... maldición... *resuelto* ¡Vamos, manos a la obra!
Las horas avanzan y Nigth se sumerge en su labor. Tras un tiempo prolongado, el esfuerzo comienza a dar sus frutos.
Nigth: *cansado pero satisfecho* Ahhh... mal... di... ción... *suspira de alivio* Listo... la albina está reparada... y las demás también. La única que falta es... ajustar la mandíbula...
Nigth dedica su atención a la tarea final, dedicando paciencia y cuidado para asegurar que todo quede en su lugar. Sin embargo, mientras trabaja en la mandíbula de la chica pollo...
Chica: *confundida* Ah? ¿Qué?...
Nigth: *concentrado* Haah... unas... vueltas... más...
Chica: *reaccionando al brazo cruzado sobre su mandíbula* ¿Qué...?
Nigth: *prosigue* Ya... casi...
Chica toma la situación de manera inesperada y actúa por instinto, mordiendo el brazo de Nigth de manera repentina.
Nigth: *gritando de dolor* ¡AHHHHHHHHH! ¡MALDICIÓN! *usa su otro brazo para liberarse de la mandíbula*
