Capítulo 17: Desastres

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Keith había ido preparado para pasar por unas horas incómodas, pero realmente no creyó ni por lo mas remoto que fuese a desarrollarse cómo lo hizo.

No podía alegar que nadie hubiese sido grosero o irrespetuoso.  Mariano, los Morgan y los Tomlinson le respaldaban y suponían un importante grupo de poder dentro de la sociedad neoyorquina como para que se atreviesen a ser maleducados con el esclavo reconvertido en juguete de Mariano.

Pero el silencio espeso, la incomodidad y las miradas eran suficientes como para que un hombre medianamente inteligente, y Keith lo era, comprendiese que ahí él no encajaba más que un pez fuera del agua.

Podía hacer como que respiraba, pero no había sitio para él.

Mariano le apretó la mano.

-Esta a punto de terminar el oficio.  Iremos a la comida después. 



El cachorro de lobo lloriqueaba.  Cuando el sacerdote le aplicó el agua bautismal chilló más fuerte y en ese momento se transformó de nuevo en una niña morena de piel clara.  Louis la envolvió en la manta y miró al sacerdote con aspecto avergonzado.

-Ella hace un poco esto... como puede transformarse...



Clive trataba de mantenerse consciente.  Sentía que estaba a punto de desmayarse y como si el ambiente del templo estuviese demasiado cargado para que sus pulmones pudiesen llenarse adecuadamente.

Todo el mundo empezó a levantarse.  Clive lo hizo y entonces una especie de estallido negro invadió su visión.  Escucho voces de lejos y las manos fuertes de su alfa sosteniéndole.



-Necesito hablar contigo.

Keith se sobresaltó cuando una mano le sujetó el brazo.

Un señor mayor, con la piel de un color similar al suyo, le estaba mirando con el rostro serio como un cadáver.

-Lo que estás haciendo mataría a tu padre.

-Señor Brown...

Brown había comprado su libertad años atrás, y vivía ahora en esa ciudad.  Keith no sabía cómo podía estar allí.

-Escuché los rumores -disipó sus dudas el hombre – el chico negro y el italiano.  Vine para verlo con mis ojos y no puedo permitir que hagas esto. O al menos permitirlo sin advertirte de cómo terminará.  Él te acabará abandonando y tú te quedarás solo y acabarás como yo.  Mendigando para sobrevivir.  ¿Cómo crees que lo hago?  Viste como sucedió lo de tu padre y tú madre... ¿vas a aumentar la condena familiar?

Keith abrió la boca pero el señor Brown desapareció sin dejarle continuar.





-Ahora se transforma.  Como quiere y cuando quiere.  Tiene tres meses y manda ella, imagina cuando tenga trece años.

-Estas exagerando, Jason.  Estas muy insoportable. 

-Claro, soy yo.  Mejor vamos a esa comida con medio Nueva York. 

-Ya hablaremos en casa.

-Louis -William se acercó -Tengo que llevar a Clive a casa.  Se siente mal.

-¿Necesitáis ayuda?

-Yo me encargo de todo. 



Clive apenas recuperó la consciencia en el camino a casa.  Ya en la cama, el doctor le examinó. 

-Esta todo bien.  Solo necesita descansar.  Y calmarse.

-¿Qué ocurrió? -preguntó William en cuanto se fue el doctor. 

-Nada... había mucha gente, supongo.

-Me acostare a tu lado.

-No.  Ve a... ve a bautizo.  Es tu sobrino, es tu ahijado.

-Clive...

-Necesito descansar y dormir y quiero que vayas. 

-Estaré de vuelta temprano.

Cuestión De Dos ||Wive||Zarry||Niam||Lason|| Historical-Fiction|| Donde viven las historias. Descúbrelo ahora