Parte 10

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Aviso: contenido para 18+

Con todas las cosas que Nico tenía a cargo en el Senado, la pareja solo pudo permitirse una semana de luna de miel, pero sería una semana que intentarían convertir en el viaje más memorable de todos.

Habían elegido Aspen Mountain como su destino al que llegaron al anochecer, el corazón de la ciudad en el que podrían ver de todo desde la habitación del hotel que se hospedarían. Fue toda una experiencia para ambos al salir del aeropuerto y encaminarse hacia el hotel Jerome, el más antiguo de la ciudad en el que, según les había contado Venus, albergaba como dueño a un semidiós de su linaje con el que ella había hablado para que pudieran tener una buena estadía durante la semana.

Ambos estuvieron dentro del hospedaje en poco tiempo, no había mucho equipaje así que no necesitaron ayuda de los botones, pero fueron a la recepción esperando encontrarse con el dueño, uno de los hermanos de _____.

- Este lugar es precioso - admiró la chica mirando a su alrededor - la decoración habla por sí sola

- Bueno, no se espera menos de uno de tus hermanos - Nico sonrió mirando el lugar con ella, la decoración era con un toque tradicional, pero todo lucía bien y la iluminación era buena

- ¿A quiénes tengo el placer de recibir en este humilde lugar? - una voz detrás de ellos les sobresaltó y se giraron encontrándose con un señor que aparentaba tener unos 40 más o menos

Llevaba un traje, con el cabello peinado hacía atrás, los zapatos bien lustrados y un reloj muy llamativo en la muñeca. Lucía impecable e importante, a pesar de su edad, con la sonrisa que tenía y su carisma seguro que llamaba la atención de muchas mujeres, no había duda de que él era el hermano de la chica.

- Venimos del campamento romano - se presentó ella - somos...

- Ah, el matrimonio Di Ángelo - asintió poniendo las manos en los bolsillos - Madre vino a verme para hablar sobre ello - sonrió viendo a su hermana menor sonrojarse - felicidades a ambos

- Eh, gracias - asintió Nico - nos gustaría haberle invitado, pero...

- Lo sé, no se preocupen - le restó importancia - no podemos conocernos entre todos cuando hay tantos semidioses como yo que decidieron hacer su vida fuera del campamento - sonrió hacía _______

- Sí, eso hace la situación un poco complicada -sonrió de vuelta - por lo visto a usted no le fue nada mal, su hotel es precioso

- Pueden hablarme con confianza - le aseguró - y por el resto, bueno, debo decir que era buena época para el negocio, sobre todo en invierno cuando todos quieren esquiar

- Suena a que deberíamos volver para entonces - rio ella - muero por recorrer la ciudad de día

- Seguro que les encantará - comenzó a caminar hacía la recepción - tengo la mejor de mis habitaciones reservada para ustedes -tomó una llave de los pequeños gabinetes en la pared y se la tendió a Nico - espero que su estadía sea favorable -sonrió - ya nos veremos por ahí, hermanita, cuñado

Se despidió y ambos caminaron hacía el ascensor del lugar sin poder creerse que estuvieran en compañía de un semidiós hermano de ______. Aunque claro, estaban seguros que en los próximos días no sería el único semidiós independiente que conocieran

Los nervios se apoderaron de la semidiosa en cuanto estuvieron dentro de la habitación, entendía lo que estaba por suceder esa noche, pero no podía evitar tener encima los nervios e inseguridades por ser un terreno desconocido. Bien es cierto que pudo preguntárselo a Regina, pero le resultaba algo incómodo luego de cómo sucedieron las cosas.

Un Matrimonio Mestizo- one shoot (Nico Di Ángelo y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora