Okaerinasai (Historia Alterna de Topaz)

Día 100, antes.

Después de un día más de postrarnos ante las imbéciles de la clase alta, ahora hay tiempo libre de ahogarse en alcohol. La población general lo tiene prohibido. La clase alta puede hacer cualquier cosa e incluso romper la ley siempre y cuando no sea en contra de las Diamantes. Genial, hasta esta especie escogió quedarse con un Stalin.

Fuimos al bar en el piso de abajo, porque al parecer prefieren que las otras puedan vender su virginidad a los aristócratas borrachos con mayor privacidad. Aunque la otra quería vivir, ambas estábamos hartas del sufrimiento, y queríamos acabar con nuestra rutina eterna en whisky. El alcohol es ilegal para las clases bajas pero pensé, acabando con nosotras se reduce la sobrepoblación. Justo antes de beber, una gema de color azul, pequeña y con pelo redondo, tomando apenas un vaso con hielo y echando un poco de la botella decide hablar conmigo.

-Hey.

-Hola. -le dije.

-¿Qué haces?

-Sólo esperando ahogar la pesadilla lo más pronto posible.

-No pierdas tu tiempo en eso.

-¿Y qué piensas hacer para evitarlo? -pregunté sospechosa.

Ella había dejado varios billetes en la mesa y salió. Parece que también pagó mi veneno. Me encontraba desesperada, y decidí ir a buscarla. La puerta se abrió, y la observé volando como un hada de agua.

-¿A dónde vas?

Mi miró por unos segundos y sonrió. ¿Quién será ella?