chocolate

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Me la estaba pasando genial en la fiesta ryan y yo nos estamos divirtiendo, dylan estaba un poco aguafiestas, tenía que sacarle algunas sonrisa un par de veces a lo que el negaba con la cabeza sonriendo pero al verme cerca de ryan se desaparecía su sonrisa, había olvidado totalmente de que tenia que ir a clases la mañana siguiente asi que revise mi teléfono al cual tenia varias llamadas perdidas de mi mama junto a un mensaje de verónica y para no estar metida en mas problemas eran las tres casi cuatro de la madrugada.

—Hay no puede ser — dije sentándome cubriendo mi rostro

—Que pasa linda — siento la mano de dylan en mi espalda — ¿hay algún problema?

—Tenemos que irnos ya, tengo que volver a casa tengo que ir a clases dentro de unas horas—  note que tenía su mirada perdida — ¿estás pasado de copas dylan? — pregunte molesta y ni sabia porque

—Yo — se señala—  no para nada — saca las llaves de su auto del bolsillo—  en tal caso deberíamos irnos entonces daniella

—Se iba a levantar pero lo volvi a sentar—  dylan no, ni se te ocurra, le dire a ryan u lo mas seguro un taxi pero no dejare que te vallas asi.

—Que no lo estoy daniella— toma mi muñeca mirándome serio—  hazme esas pruebas de policías o la que te sepas

—Bien me diras cuantos dedos te enseñe — moví mis dedos rápidamente ya que eso me lo hizo papa cuando fui a una fiesta y era mi primera vez tomando una bebida alcohólica

—5,3,1,4 y 2 — dijo al terminar de que moviera mis dedos

—Ahg, bien pero iremos con cuidado no confió mucho en ti— tome mi cartera y salimos de la casa

Nos adentramos en su auto y me coloque el cinturón y lo puso en marcha, en el camino yo no decía nada. yo solo lo veía el camino y el solo me decía que no estaba pasado de copas que estaba bien el cual no le hacia caso cuando mire el retrovisor note que estaba la camioneta, eso era lo único que faltaba, dylan no tardo en darse cuenta y acelero ya comienzo a entender el porque dylan los odia tanto. Al llegar a casa abrí el garaje suerte de que mama no utilizo el otro garaje, nos adentramos a mi casa con cuidado y fuimos para mi habitación colocándole seguro a la puerta, caminando hasta el closet para buscar la ropa que me pondría y la de dormir tanto para dylan y para mi.

—¿Aquí traes a tus amigos hombres después de una fiesta?—  levanta una ceja

—No— suerte de que tenga algo de ropa de hombre, tome un pantalón de pijama junto una camisa y se lo lance—  y tu mi querido amigo tienes que aprender a conquistar una chica porque eres un desastre, allí tienes el baño para que te cambies — tome un conjunto de pijama y Sali de la habitación.

Me dirigi al garaje buscando entre todas las cajas una bolsa de dormir, al encontrarla la deje en una mesa que tenia allí y aproveche que estaba sola y me cambie de ropa poniéndome la pijama, deje el vestido en la mesita y tome la bolsa de dormir para volver a mi habitación, observando por unos segundos a dylan ya que solo se había puesto el pantalón y podía ver todo su pecho descubierto bien ejercitado. Parpadee dos veces sacudiendo mi cabeza.

—Aquí tienes una bolsa de dormir—  se la entrego

—Espero que no te haya molestado que encendiera el aire — acomoda la bolsa al lado del izquierdo de la cama.

—No, para nada — me adentro en la cama — buenas noches dylan — le tiro una almohada.

—Que lindas formas de dar las buenas noches daniella... buenas noches Danny

te quiero a tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora