One for All

13

Unos cuantos de días después, en lo que podría ser un día normal, en lo que pudo ser un día normal…

Las cosas pasan y lentamente el destino se desliza entre las sombras para saltarnos al camino con una sorpresa...

— Por hoy el entrenamiento básico de héroe se convirtió en una clase con 3 instructores: All Might, yo y una persona más –nos explica Aizawa.

— Disculpe ¿Qué es lo que haremos? –pregunta Sero, un chico cuya Particularidad consiste en disparar cintas de sus codos.

— Desastres, catástrofes y todo lo relacionado –responde el profesor, mostrándonos una ficha que dice “rescue”. Finalmente, la hora de los rescates– es un entrenamiento de rescate.

Mis amigos comienzan a murmurar entre sí emocionados: aquí sí que puedo brillar, pues es mi especialidad a la hora de combatir.

— Hey, aún no he terminado –continúa el sensei– pueden decidir si quieren usar sus trajes o no esta vez, porque hay trajes que probablemente limiten sus habilidades también: el entrenamiento tomará lugar fuera del campus, así que nos iremos en autobús. Eso es todo, comiencen a alistarse.

Literalmente me precipito a tomar mi traje y salgo corriendo a los vestidores a ponérmelo y salgo primera; afortunadamente sólo es una actividad escolar lo que me quita la preocupación de rescatar civiles de verdad. Si todo es un juego, es muy divertido.

— ¡Clase 1-A, reúnanse! –dice Iida, soplando un silbato: está a tope con su cargo –formen 2 filas por su número de estudiantes para que al abordar el bus sea mejor.

Voy primera en la lista y de cualquier modo, el autobús no acaba siendo como lo esperábamos: voy sentada a un lado de Todoroki, de quien no sé si va dormido o no pues lleva los ojos cerrados sin relajar el cuerpo completamente, pero es entretenido ver su perfil izquierdo con el ojo cerrado: si a mí me lo preguntasen, diría que la quemadura es una marca de nacimiento por poseer el elemento del fuego.

— … tu Kosei es como el de All Might.

De pronto escucho esta frase de boca de Tsuyu, deseando que por favor se retracte. Lo defendería, pero temo llamar la atención y sospechas si lo hago. Bueno, Kirishima acaba haciéndolo por mí. Ellos se ponen a hablar sobre Particularidades profesionales o a la vista impresionantes como la Bakugo y Todoroki.

— Bakugo siempre está molesto, así que él no parece ser popular –dice Tsuyu sinceramente.

— ¿¡Qué rayos!? ¿Quieres pelear!? –reta Bakugo.

— Ves?

— No nos hemos conocido lo suficiente, así que es increíble que todos sepan que tu personalidad es peor que mierda en aguas residuales –se burla Kaminari.

— ¿Qué tiene ese vocabulario, bastardo? ¡Te mataré!

Como a pasado de largo lo del Kosei de Midoriya me vuelvo a Todoroki, quien sigue no sé si dormido o relajado o en trance, aunque reacciona cuando Aizawa-sensei dice que estamos por llegar.

— Los he estado esperando a todos –nos saluda Trece, la Heroína espacial.

— ¡el gentil héroe que a salvado a muchas personas de desastres! ¡Amo a Trece! –exclaman mis compañeros, quienes tanto como yo admiran a Trece, quien nos invita a entrar sin retrasos al campus cubierto que no es ni más ni menos que un simulador inmenso– ¡esperamos trabajar con usted!

— … wow ¡parece el Universal Studios de Japón! –exclama alguien, creo que Kirishima. Aunque eso no importa, pues realmente estoy tan impresionada que no puedo menos que estar de acuerdo.