Los niños se encontraban aún alborotados por su viaje de excursión así que Steve los había hecho dibujar sobre éste. Todos empezaron a hacer lo pedido poniendo todo su hiperactividad en sus manitas.Los primeros en terminar comenzaron a mostrarle sus obras de arte a su profesor quién los pegaba en el muro de la creatividad. Niño tras niño fue con una sonrisa y su trabajo expuesto. Los últimos fueron Peter y Gamora quiénes con sonrisas gemelas se acercaron a su profesor.
— Profesor, mireeee.
— Lo dibujamossss.
— ¿Sí? ¿Puedo verlo?
— Por supuesto, profesor.
Los niños mostraron sus dos papeles a la vez.
Steve agachó la mirada y su rostro era un poema ante lo que observó.
— ¿Eso es...?
— Usted y el señor bonito.
— Nuestros besos. Los besos fueron lo mejor.
— Claro, son muy bonitos.
— ¡Gracias profesor!
Con las miradas de los dos niños el hombre colocó los dibujos.
El timbre de recreo sonó.
— ¿Podemos salir?
— Pueden. En orden.
Con brincos y sonrisas se fueron en fila india al patio.
El profesor se permitió observar mejor los dibujos de los dos niños.
En la de Gamora se observaba a una figura con el cabello rubio besando a otra con el cabello castaño. Ellos estaban rodeados de corazones y la palabra beso sobre sus cabezas.
La de Peter era de Tony cargandolo a él y a su amiga pero el niño estaba besando a Tony. También tenía corazones y escrito De Peter arriba del castaño.
— Parece que he sido reclamado por el pequeño.
— Dios, Tony. No estoy para estos sustos.
— Hola, profesor.
— ¿Qué haces aquí?
— Prometí regresar ¿No?
—Pensé que ibas a tardar.
— Me llegó lo que necesitaba para venir así que aquí estoy.
Steve recién se percató de los dos paquetes en las manos del joven genio.
— ¿Son para ellos?
— Sí. Espero haber escogido bien.
— Seguro que sí. Ellos están encantados contigo.
— Gracias ¿Puedes darselos?
— Ellos quieren verte. Quédate.
Los ojos café de Stark brillaron ante el fervor en el tono de Steve.
— Está bien. Iré dónde María hasta la salida. Nos vemos, profesor.
Un beso en la mejilla del rubio fue depositado.
El hombre volvió a sus deberes y los niños regresaron con sus ropitas arrugadas y caritas sonrojadas.
La hora de la salida llegó y Steve recibio besos de despedida para luego ser llevados por sus padres.
Peter y Gamora se quedaron en una esquina conversando con sus cabecitas juntas.
— ¿Niños?
— Hola profesor. Estamos esperando al príncipe.
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'Cosa de niños.'
FanfictionSteve es un maestro de niños de 3 a 5. Llega un niño nuevo ese año que es demasiado adulto y desde el primer día lo miró con sus ojos de bambi para al cabo de una semana ponerse al frente suyo y decirle: Te vas a casar conmigo.