Los colores de los impuros

Naranja

   "Conoce a tu enemigo y mil batallas serán mil victorias."  



Dicen que la Gran Guerra ha empezado con el Asesinato del archiduque Francisco Fernando de Austria en Sarajevo el 28 de junio, declaración de guerra por parte del Imperio Austro-Húngaro a Serbia, y la movilización rusa contra el Imperio Austro-Húngaro el 29 de julio. El asesinato del archiduque no ha sido más que una excusa. Todos buscan justificar la guerra, pero la verdad es que ya hacía por lo menos 25 años que las grandes potencias europeas nos habíamos estado armando hasta los dientes, compitiendo entre nosotros.


En los años previos a este conflicto se habían configurado dos grandes alianzas, la Triple Entente y la Triple Alianza, que, supongo, van a ser el centro de los enfrentamientos de esta Gran Guerra. Bismarck había construido una compleja red de tratados internacionales cuyo elemento clave era la Triple Alianza, este ligaba a Alemania con Austria-Hungría e Italia. La otra cara de la moneda era el Triple Ente que, animadas por Francia y tras resolver sus problemas en Asia Central, firmaron el Acuerdo Anglo-Ruso. Se han de cumplir las bases ya firmadas entre Francia, Gran Bretaña y Rusia, por eso nos vemos involucrados en el conflicto.


Yo confiaba en Jean Jaurès, un gran pacifista que nos salvaría de la guerra, pero su toma de postura en pro del pacifismo, poco antes del desencadenamiento de la Primera Guerra Mundial, lo hicieron impopular entre los sectores nacionalistas y el mismo día en que estalla la guerra es sepultado. De un día a otro, los hombres de veinte a cuarenta y cinco años han de ir al frente. Cuando desfilamos antes de marcharnos las mujeres nos aplauden y algunas se desmayan al observarnos.


El mundo entero se ve obligado a vivir una gran miseria y a defender su patria de la salvajez de los animales, así consideramos al enemigo en ambas partes.


Debíamos estar preparados ya que empezaban a circular rumores. Los rumores más claros fueron que en el frente occidental, los alemanes, pretendían una guerra rápida, clave para su victoria, siguiendo las previsiones del plan Schlieffen, basado en el cálculo de que el ejército Ruso, necesitaría varias semanas para colocar en el frente toda su potencia. Los alemanes pretendían lanzar un rápido ataque contra Francia para luego caer sobre Rusia de forma fulminante, asegurándose así el frente oriental.


Me enviaron a Francia para ayudar a los Franceses, ya que éramos pocos los que sabíamos el idioma y el país estaba en peligro. Nadie ha podido predecir esta barbarie. No sé si mi madre estará recitándome plegarias, si volverá a quererme.


Las mujeres se han casado con la muerte. Ellas están padeciendo una guerra impuesta, pero para nosotros fue una guerra libremente coincidida.


En 1914, el cine está en sus comienzos, es necesario saber que las cámaras no pueden filmar cualquier cosa y que no van a todas partes. El ejército es el encargado de reconstruir los grandes acontecimientos. Este año fue caracterizado por el amor y el odio. El odio es una virtud patriótica, eso dicen todos. Nosotros debíamos defender la nación.


El Imperio Germánico se ha vuelto muy militarista. El militarismo ha alcanzado incluso a los más pequeños y en los patios de recreo y los campos de recreo llevan una arma, no siempre son de madera. Francia también ha ido adoctrinando a los colegiales, diciendo que alguien debe salvarlos de el águila negra germánica, ellos tienen un mínimo de razón.