Capítulo 12

1.1K 84 30
                                    

Camus:

Sentía mucha calor, mi cuerpo sudaba, aún quería seguir durmiendo pero no lo soportaba.
Intenté moverme, pero algo estaba sobre mí. Abrí los ojos y lo único que pude ver era cabello azul en mi rostro.

Me levanté de golpe, observé mi cabellera y note que seguía rojiza. ¿Entonces?

-¡Auch! ¿Quién fue el idiota que me lanzó de la cama? -dice Kanon-.

Así que él era quien estaba encima de mí.

-¿Qué haces aquí?

-Dormía.

-Eso ya lo sé.

-Entonces para qué...

-¡Hola! -Saluda Milo saliendo del baño- Kanon, ¿qué haces en el suelo?

-¡Camus me empujó!

-¿Por qué Cam?

-Me estaba asfixiando...

-¡No es cierto!

-Jaja si los vi, se veían tal lindos abrazados.

-Pero no tan bien como tú sin camisa...

Volteo a mirar a Milo, y en efecto, su torso estaba desnudo. Sin saber porqué, terminé lanzandole una almohada en la cabeza a Kanon.

-¿Qué? ¿Te molesta que miren a tu bicho?

-¡No es mi bicho! ¡Cállate!

Me levanté de la cama y entré al cuarto de baño.
¿Por qué me siento tan molesto? ¿Será por la prescencia de Kanon?
Pero si era así, ¿que exactamente me molestaba?

Entre a la ducha esperando que el agua fría me relajara.
El recuerdo de la noche anterior llegó a mi mente. ¿Cómo es posible que yo, fuera capaz de intentar besar a mi amigo? ¿En qué rayos pensaba?

"Sentimientos encontrados, no creí que sintiera algo así por él, un hombre orgulloso, sádico e impulsivo. Siempre se la pasa quejándose sobre mi manera de ser, es muy molesto, pero sin duda es un buen amigo, aunque lo ignore no se aleja de mí.

Estaba tan confundido, me aconsejaron hablar con él y lo hice, pero... en un momento a otro, lo miré a los ojos y algo dentro de mí quiso besarlo.
Creo que fue una buena decisión, así logré aclarar mis sentimientos hacia él.
Kardia...
Esa noche fue la mejor de mi vida."

Ahora recuerdo, intenté hacer lo mismo con Milo, ¡que idiota fui al creerme esa estupidez!
¡Degel eres un...
¿

Y por qué lo hice? No es como si ese bicho me gustara... ¿verdad?


-¡Agh! ¡Idiota!

-Cam, ¿estás bien? -Pregunta Milo desde el otro lado de la puerta-.

-¡Sí!

-Bien, pediré el desayuno.

Terminé de ducharme, me cubrí con una toalla y salí del cuarto de baño, por fortuna ninguno de los dos estaba ahí.
Comencé a vestirme tranquilamente.


¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Corazón de HieloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora