1: ¡TE GUSTAN LOS TIPOS!

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—Buenos días, mi nombre es Kim Taehyung y yo les vengo a hablar un poc...

—¡NO SE ESCUCHA!—Se escuchó desde los últimos puestos.

El coñísimo de la madre de Chávez. Pensó Taehyung.

—Mi nombre es Kim Taehyung y yo les vengo a hablar...— Repitó elevando un poco su tono de voz.

—¡HABLA DURO!— Gritó otra persona.

—¡¡COÑO DE LA MADRE MAMAGUEVOS NI SIQUIERA HE EMPEZADO!!— Gritó exasperado.

—¡Kim! ¿Cuantas veces te voy a decir que cuides tu vocabulario? ¿eso es lo que te enseñan en tu casa? — Esta vez la profesora fue quién habló.

Ahora si la cagué y la recontra cagué.

—Coño profesora pero es que estos mamague...

—¡Yo no te voy a tolerar ese vocabulario en mi clase!— Interrumpió levantándose de su asiento. —anda a darte una vuelta por la dirección y explicas por qué te saqué. — Dijo mientras señalaba con un dedo hacia la dirección.

—Profesora mire yo le prometo— juntó sus manos como si estuviera rezando— yo se lo juro por chávez que yo no lo hago de nuevo, yo me quedo tranquilito en mi pupitre y no hablo en todo el día, yo...

—Le dije que se vaya a dirección. — habló de nuevo la profesora muy decidida.

—Profe pero...

—O te sales o busco a la directora yo misma.—Dijo ella, alzando un poco la voz y caminando hacia la puerta.

Coño de la madre maduro, esto es tu culpa pajúo.

—No no no profe...yo me voy, tranquila. No se estrese.— Dijo Taehyung rendido mientras buscaba sus cosas para dirigirse a dirección.

Taehyung era de ese tipo de alumno que siempre estaba en dirección por cosas estúpidas. Si un compañero mataba a un profesor no pasaba nada, pero él abría la boca y ahí mismo lo sacaban de clase. Se podía decir que el coñito estaba bien salado.

—Profesora no me parece justo que lo saque de clases.—Una nueva voz intervino.

Taehyung frunció el ceño al darse cuenta de quién fue la persona que habló.

—¿Jungkook? ¿como por qué no te parece justo?.— Dijo la profesora con una ceja levantada.

Jungkook era nuevo en el liceo, venía casi del otro lado del país, desde Mérida a Anzoátegui. Era uno de esos carajitos con bastante plata que todos creen que es mala gente y sifrino. Sí, tenía dinero pero tampoco es que era un maldito. Además, él no se quejaba, no iba a mentir diciendo que era malo tener lujos, el dinero compra oreos y doritos, y eso en Venezuela es felicidad pura.

Apenas empezaba el segundo lapso y ya era bastante popular considerando el poco tiempo que tenía allí, sin embargo con Taehyung había cruzado muy pocas palabras, es por esto que éste último se extrañó cuando se vio defendido por Jungkook.

—Los demás estaban gritandole cosas mientras él hacía su exposición; el pobre carajito no es de hierro profe, en algún momento iba a explotar.—Respondió encogiéndose de hombros.—En tal caso debería sacar a los pajúos estos también.—Dijo señalando a todo el salón.

Taehyung mientras tanto, observaba la escena sin decir nada, el pobre carajito estaba como en shock, en un trance raro; tal vez estaba medio muerto y ya estaba del otro lado tomándose un café con Chávez. O al menos eso parecía cuando...

—¡AY VALE TE GUSTAN LOS TIPOS!—Gritó cagándose de la risa.

Jungkook lo miró con el ceño fruncido mientras todo el mundo se reía y la profesora lo miraba con los ojos muy abiertos.

—Ah no vale, yo defendiendote y tú me sales con esa.—Dijo Jungkook rodando los ojos y luego mirando a la profesora.—¿Sabe como es la vaina?, lleveselo profesora, tranquila, haga lo que usted quiera con él.—Señaló a Taehyung.—¿Por qué no le cita el representante? usted tiene razón, es un falta de respeto.—Se puso una mano en el pecho.—Estos carajitos van cada día peor.

La profesora solo miraba la escena desconcertada.

—¡MARICO NO SEAS MIERDA!—Dijo mientras abría mucho los ojos.—No no chamo eso fue echando vaina webón, te pasaste.

—¿Cuanto es diez más diez?—Fue la respuesta del menor.

—¿Veinte?—Dijo haciendo una mueca de confusión.

—Veinte caravanas de guevo te vas a mamar, pajúo.

Si algo tenía Jungkook era que se picaba más rápido que mi mamá cuando le digo que la comida le queda chimba.

—¡BUENO YA ESTÁ!—Al fin dijo algo la profesora que había estado todo ese rato solo mirando como si se tratase de una película.—Kim y Jungkook.—Los señaló a ambos.—Pueden seguir su discusión en dirección, sálganse de mi clase, respeten a sus compañeros que quieren estudiar.

—¡PROFE PERO NOSOTROS QUEREMOS ES VER COÑAZO!—Se escuchó un grito en el fondo de la tukky del salón.

—¿Yasurineiska, usted quiere acompañarlos también?—Yasurineiska no respondió, por primera vez se quedó calladita. La profesora volvió a mirar a los dos de antes.—¿Y ustedes dos que esperan para retirarse?

—Chao pues.—Jungkook tomó sus cosas y salió del salón sin decir nada más.

La profesora lo siguió con la mirada y luego miró fijamente a taehyung, esperando a que saliera también, en vista de que el carajito es medio pegado tuvo que aclarar su garganta y repetirle que se fuera.

—Bueno ya, está bien. Chao.

Y así fue como el intento de Jungkook de defender a Taehyung y hacer algo bueno por su vida, fracasó.






Emily×

¡TE GUSTAN LOS TIPOS! » taekook.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora