-¿Por aquí? No...-Él soltó una risita.- Ellas no me visitan tan temprano.
-Hopffman no estamos para juegos.-dictó firme la anciana.- Dinos realmente si no viste a nadie pasar estos pasillos.
-Bueno,además de mí despertandome tarde no...no he visto a nadie,señorita Green.
-Bien. Será mejor que vayas a clases.
Él asintió,cerrando la puerta detrás de si.
Luego, se lanzó sobre la cama sin mucho interés.
-Me debes una.
-¿Disculpa?
El se giró para verme a la cara.
-¿Que creías? Ethan Hopffman no hace trabajos de caridad. Agradece que salvé tu trasero.
Rodeé mis ojos, bufando.
-Bien,¿Y que se supone que quieres?-El levantó una ceja.-Sí,lo pensé. Olvídalo.
Soltó una carcajada,estirando su cabeza hacia atrás.
-Bien,valía la pena intentar. No lo sé chica rebelde,ya se me ocurrirá algo. Ahora tendrías que irte.
-Sí,tienes razón. Si no me apresuró llegaré tarde a clases.
-Yo me refería a que dentro de un rato recibiré visitas pero si te van los tríos...
-¡Eres repugnante!-Le lancé una almohada.- Me largo.
El me guiñó un ojo,antes de que saliera de esa habitación.
-¡Espera!
Me detuvo antes que terminara de cerrar la puerta,asome mí cabeza esperando que volviese a hablar.
-¿Si?
-¿Te volveré a ver chica rebelde?
-Espero que no.-Dije con toda la sinceridad del mundo. Él sonrió.-
-¿Eso es un sí?
Lo dejé sin responder,solo cerrando la puerta. Me había caído bien. Además,necesitaría gente que supiera los movimientos de aquí si quería salir. Y qué mejor que el tipico estúpido que lo que menos hace es ir a clases y sin embargo sabe cada esquina del lugar. No niego que en su momento me enrollé con alguno en mí escuela anterior.
Regla uno, supervivencia.
Caminé con sigilo pero velocidad por los pasillos con el temor de que me encuentren en territorio ajeno.
Bueno,digamos que de por sí ya era una fugitiva en búsqueda y captura,que me vieran aquí no iba a afectar mucho la situación. Pero como tampoco quería leña al fuego, opté por convertirme en ninja y tratar de pasar por el campus sin ser vista.
No me fue difícil. Por alguna razón se encontraban en asuntos mejores dado a que no había un solo segurata en ninguna de las esquinas. Por lo que con la respiración sostenida viaje hasta llegar a la puerta de mí salvación y entrar,soltando el aire.
Lástima que no estaba sola y también me soltaron algo. Ariel y una pantufla a mí cara, por ejemplo.
-Ouch, ¿Qué te pasa?
- ¡Eres una suicida! ¿Qué pasó con la discreción?
Levanté mis hombros con inocencia.
-Ups.-Ella rodó sus ojos y solté un soplido.- Esa mononeuronal necesitaba una lección. Sé que no debí dársela yo de cualquier forma. Lo siento.
Detrás de lo despeinada melena roja salió una sonrisa de su parte.
-No te preocupes por mí. Tu eres el problema ahora. Cuando GreenHarb te encuentre estará muy enfadada.
-Creéme,no es la primera vez que lidio con viejas amargadas. Además camino aquí no encontré a nadie,a lo mejor se cansaron de buscarme.
-Estan todos ocupados en la cena de bienvenida de esta noche. ¿Irás verdad?
-¿Cena? ¿Esa de la que hablabas? ¿Es esta noche? Joder. Pero es que no tengo que diablos ponerme...-Mordí mí labio.- Como sea,ya conseguiré algo y mientras tanto...
Mí plan fue interrumpido por la puerta siendo abierta con fuerza,dónde dos tipos grandes entraron y luego,la vieja loca.
Y digamos que no tenía cara de muchos amigos.
Los tipos se acercaron a nosotras,Ariel hizo un ademán hacia atrás pero sin embargo solo venían por mí. Intenté safarme pero me terminaron llevando colgada,con uno a cada lado.
-Western,a mí oficina.
Y por alguna razón,no dije nada al respecto.
(...)
-Bueno,Western, quiero que me des explicaciones sobre tu comportamiento en el almuerzo hoy.
-¡Me tiró salsa bolognesa en el cabello! ¿Sabe cuánto me costará arreglarlo?
-Sólo creí que te quedaría bonito el pelirrojo Brooke.-Dije de forma inocente,levantando mis hombros.-
-¡Silencio! Brooke,le hablé a Lola, no a ti.
Ella solo hizo una mueca en su lugar. La señorita GreenHarb me miró,esperando que hable.
Tomé aire,y comencé.
-Mire,no le iré con vueltas. Brooke se comportó como una perra con Ariel y estoy al tanto que usted lo sabe,pero no hace nada al respecto porque seguramente sus padres pagan su silencio. Pero yo no le debo nada, así que solo crei que sería adecuado darle una lección. Que sí,que estuvo mal pero si va a darme una lección,dele una a ella primero.
-No creo que estés entendiendo cómo funcionan las cosas aquí.
Rodeé mis ojos,ella volvió a hablar.
-Sino te piensas adaptar aquí,tendremos que adaptarte a la fuerza,Megan.
Salté de mí silla,apoyando ambas manos sobre su escritorio de manera amenazante.
-Vuelves a repetir ese nombre y prendo en llamas este lugar cueste lo que me cueste.
-Tu padre lleno tus datos y aquí dice que así es tu nombre.-Sonrió. Prepotente. Como si le diese poder.-
-Mi nombre es Lola. Llámame asíy punto. No me digas que no te avisé.
Me quedó mirando. Con sus ojos verdes penetrantes. Sin expresión,como si me analizara mentalmente.
-No le tenemos miedo a gente como tú aquí,Lola. Vienen niñas como tú todo el tiempo. Tú debes aprender a amoldarte al lugar. Estás castigada por tres días,sin cena de bienvenida.
Venía bien hasta oír lo último.
-Espera,¿Qué? No puedo faltar esta noche.
-Lo hubieses pensado antes. No creo que nadie muera porque Lola Western se ausente una noche a una cena.
Diablos. Maldita sea. Jodido cerebro impulsivo.
Ahí estaba perdiendo la única oportunidad de recuperar mí celular y salir cuanto antes.
-No,no,no...¿No me puedes castigar después?
Ella siquiera me prestó atención,hizo una seña y los dos gigantes me tomaron de los brazos sacándome de la habitación.
Llegamos a mí cuarto,dónde me lanzaron técnicamente dentro y uno se quedó vigilando mí puerta. Ariel ya no estaba,pero debía estar muy confundida al respecto. O quizás se lo esperaba,quién sabe.
Joder,que estaba que le metía una paliza al maldito guardia que aguardaba en mí puerta,de toda la cólera que traía acumulada.
Me tiré refunfuñando a mí cama y supongo que de lo agotada que me dejó mí enojo,me quedé dormida.

ESTÁS LEYENDO
Niña Mal. #1
Novela JuvenilLola puede ser llamada por los demás una perra,malcriada,egoísta, caprichosa y manipuladora. ...Y puede demostrar que es aún peor. "...-¿Sabes? Te pediría que beses mi trasero pero estoy segura que terminarías enamorándote,y ya no podría deshacerme...