¿Venganza O Amor?

Capítulo 2

Emmie

La policia llegó muy rápido, Tayler los habia llamado luego de que hubiera quedado inconciente, también llamó a sus padres quienes tomarian un viaje mañana a primera hora. Yo no tenia otra opción más que llamar a los mios. Sabia que tendria problemas con ellos, especialmente con papá, pero en estos momentos no me importaba.

Solo tenia grabada en mi mente la escena en la que ese bastardo asesinaba a mi mejor amiga. Yo pude haberla ayudado y no hice nada para salvarla, soy una completa inutil. Tal vez si hubiera intervenido ella no estaria, muerta.

-Emmi, o por Dios hija- la voz de mi madre me sacó de mis pensamientos.

-Mamá- mi voz se quebró, corri hacia ella con la poca fuerza que me quedaba y la abracé, la abracé lo más fuerte que pude. Sentí que alguien me separó bruscamente de mamá.

-¿Sabes el problema en el que nos acabas de meter?- era papá, su voz sonaba enojado y realmente lo estaba.

-Papá yo, - me interrupió

-¿Qué pasaria si en vez de ella fueras tú?- Preguntó señalandome.- Conestame Emmie, agregó gritandome.

-¡Ya basta James!, no es momento. Si siquiera preguntaste como está o como se senienta- dijo mamá entre sollozos. Ambas comenzamos a llorar, mi cuerpo temblaba y se me hacia casi imposible controlarlo.

Al otra extremo de la casa se encontraba Tayler, sentando en el piso, abrazando sus pies. Su llanto era inconsolable. Debia sentirse culpable por todo lo qué estaba pasando.

Estaba a punto de caminar hacia él, cuando una hombre mayor bloquea mi camino. Tenia una chequeta azul oscuro y las siglas "FBI" color amarillo en ella.

-Disculpe, agente Reyes del FBI,- se presentó mostrandome su Placa.- ¿Es usted Emmie Rodriguez?

-Así es- respondió mi padre mi espalda y le extendió su mano.- James Rodrigiez ex policia y padre de Emmie - agregó.

-Un placer Sr. Rodriguez, tengo entendido que su hija fué testigo del  homicidio de Tatiana Thompson ¿es correcto?- Asentí, la palabra homicidio hacia eco en mi cabeza.- Es necesario tomar su declaración, la espero mañana en nuestras oficinas, su padre debe saber donde quedan.- finalmente se despidio y nos dio la espalda.

Intente buscar a Tayler pero extrañamente ya no se encontraba por ningun rincon de la casa. Seguramente algun familiar lo habia recogido, me partió el alma en dos verlo de esa manera. Todos estamos destrozados pero el debia estarlo más que nadie, después de todo el tuvo la idea de la fiesta.

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No queria saber que pensaba mi padre de todo esto. Aunque no lo demostrara sabia que la situación le afectaba igual que a todos. El camino a casa fué un mar de silencio, nadie comentó, ni dijo nada hasta que llegamos. Los tres nos quedamos montados en el auto hasta que papá rompió el silencio.

-  ¿Podrias dejaros solo un momento?- preguntó dirigiendose a mi madre.

-Bien, solo no seas tan duro con ella por favor.- mustio bajando del auto.

-¿Qué demonios sucedio?- me quedé en silencio por unos segundos- ¡Contesteme maldita sea!

-¡NO!- sus ojos se abrieron como platos al oir mi respuesta. -Justo ahora lo que quiero es tomar un baño y recostarme- dije entre sollozos.

Abrí la puerta del auto y corrí hasta la casa. Subí las escaleras lo más rápido que pude y me encerre en mi habitación. Caminé hasta la cama y tome el cuadro que habia en mi mase de noche, eramos Tatiana y yo. Me recoste en la cama abrazando la foto.

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Eran la 10:45 cuando me levante, me hubiera encantado que todo esto hubiera sido un sueño, pero no, fué real y ella ya no estaba con nosotros. Me levante con dificultad, tomé una ducha intentando controlar mi dolor pero no habia nada ni nadie que pudiera remediar lo que sentia.

Salí del baño y tomé el primer conjunto de ropa que encontre. Unos jeans negros y una camisa manga larga blanca. Me quedé observando la foto por unos segundos y una lagrima bajó por mi mejilla. La sequé y me dirigí a la cocina.

Para mi sorpresa estaba el resto de mi familia en ella. Todos me miraron por un segund y volvieron a lo suyo. Mamá se acercó y plantó un beso en mi mejilla.

-Preparé el desayuno, ven para que comas.- habló tomando mi brazo.

-Lo siento mucho hermanita-  se disculpó mientras me abrazaba. Era una sorpresa para mi que él actuara de esa manera. Siempre estaba golpeandome y sino molestandome. James era exactamente 9 años mayor que yo. Se llamaba James al igual que mi padre. Habia estudiado ingenieria y estaba aquí con nosotros mientras conseguia un trabajo.

- Los padres de Tatiana ya están aqui. Enteraran su cuerpo mañana mismo, no quieren esperar mucho tiempo.- informó mi padre.

- Nuestro padres iran con los padres de Tatiana miestras que yo te acompañaré a las oficinas del FBI, darás tu declaración y descanzaras todo el día.

Me parecia bien, necesitaba un descanzo, olvidarme de todo por un momento y mañana enterrar a Tat como se lo merece.

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El día de ayer pasó realmente muy rápido, James me llevó a dar mis declaraciones y el agente Reyes solo apuntaba mis palabras en un papel. Antes de salir de su oficina se acercó a mi oido y prometió que encontraria a los culpables y los haria pagar.

Al parecer el día sabia que nos despediriamos de ella pues amanecio bastante triste. El cielo gris solo lloraba y creanme no ers el unico.

-Queridos hermanos, estamos aquí para entregar al cielo a Tatiana Thompson. Una joven luchadora, amable y amorosa.- el Padre seguia hablando y mandaba a algunos de los familiares de Tat.

Finalmente los padres de Tatiana se acercaron a los mios dandole las gracias y a su lado estaba Tayler.

-Hola- salude

-Hola Emy- respondió mi saludo secandose las lagrimas. - todo esto es mi culpa.-

- No Tayler no lo es, estoy segura de que si hubieras sabido, no habrias hecho la fiesta.- intente consolarlo

- Mi hermanita Emy, mi hermanita no estaa.- lo abracé con todas las fueras que pude. Tayler me gustaba mucho y haria lo que fuera por que esté bien.

- El angente Reyes encontrará a los culpables lo prometió, él lo prometió.

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Todo estaba oscuro, no podia ver nada. Hasta que apareció una sombra, era ella, era Tatiana parada frente ami con el cuchillo clavado en su pecho.

-Promete que vengaraz mi muerte, prometelo. Tienes que prometerlo Emmie, ¡PROMETELO! Promete que buscaras y buscaras hasta encontrar al responsable de esto y vengaras mi muere.- su llanto era inconsolable.

Corri hacia ella para abrazarla pero ella ya no estaba, habia desaparecido y nunca la veria otra vez.

-Prometelo, prometelo, prometelo- su voz se oia cada vez más lejos.

¡LO PROMETO!