Me despertó el sonido del móvil. Eran las 9:00.
Intenté abrir los ojos y cogí el móvil. Era Jesús.
*Conversación con Jesús*
J: Despierta ya dormilona.
A: Malo.
J: Qué he hecho?
A: Me has despertado tonto.
J: Ah bueno, entonces me ha salido bien.
A: Qué haces despierto a las 9:00?
J: Hablar contigo.
A: Aparte de eso?
J: Ah, nada. Jajaja. Quedamos hoy?
A: Uf, pues va a ser que no eh.
J: Por?
A: Tengo sueño. Eso te pasa por haberme despertado.
J: Bueno, no sé si sabrás que vivimos al lado.
A: Y..?
J: Que si no quedas con nosotros, te podemos secuestrar.
A: Vale, vale. Hoy a las 12:00.
J: Perfecto.
Cada día que pasa me van cayendo mejor, cada día que pasa los voy queriendo más y cada día que pasa aumentan los cosquilleos en la tripa.
Intenté volver a dormirme, pero era imposible. Opté por levantarme.
Hice la cama, me vestí y me peiné.
11:30.
Bajé al salón y encendí la tele. Había un anuncio de un programa llamado La Voz Kids.
No había nada interesante en la tele, así que decidí apagarla.
Llamaron a la puerta y...¡sorpresa! Eran los gemelos.
-¿Qué hacéis aquí?
-¿Habíamos quedado, no? - dijo Jesús.
-Sí, pero no pensaba que llegaríais tan pronto.
-Somos así. - dijo Dani.
-¿Nos vamos? - dije.
-Sí, vamos.
Salimos de casa y enfrente de mi casa había una chica rubia, guapa y más o menos alta.
Jesús se acercó a ella y la abrazó.
-Andrea, ahí tienes a una niña insoportable. - me dijo Dani.
Jesús se acercó a nosotros con la chica.
-Andree, ella es Natalia, mi novia. - dijo Jesús.
-Encantada. - dije por parecer educada.
Ella me miró de arriba a abajo con cara de asco.
Jesús y Natalia caminaban delante nuestro.
-¿Esa es Natalia? - pregunté a Dani.
-No, esa es una interesada.
-¿Por qué no te cae bien?
-Se lía con todos los tíos.
-¿Cómo lo sabes?
-Fue mi ex. - dijo.
-¿Jesús lo sabe?
-Se lo dije, pero no me hace caso. Según él, dice que Natalia ha cambiado, pero no me lo creo.
Fuimos a un parque y nos sentamos en el césped.
Era una mañana calurosa, así que buscamos un poco de sombra.
Se notaba que Jesús era feliz con ella.
-No queremos molestaros, así que nos vamos. - dijo Dani.
-No molestais. - dijo Jesús.
-Si quieren irse que se vayan. - dijo Natalia mirándome con asco.
-Vámonos Andree. - me dijo Dani ofreciéndome la mano.
Nos sentamos en un banco que estaba lo suficientemente cerca como para poder verlos, pero lo suficientemente lejos como para que no nos oyeran.
-Le caigo mal.
-Es por Jesús. - dijo Dani.
-¿Por Jesús?
-Sí, se piensa que le vas a robar a Jesús o algo así, cuando es ella la que se va liando con el primer chico que pasa delante.
-Que imbécil.
-Lo sé. - dijo acercándose más a mí.
-Quizás no tendría que haberme juntado con vosotros.
-¿Qué dices? Si lo dices por Natalia no vale la pena. Ella es una más y tú eres especial. - dijo mirándome a los ojos.
*Narra Jesús*
Cuando vi a mi hermano y a Andrea sentados en aquel banco tan alegres y tan juntos me daban ganas de pegar a mi hermano.
'¿Jesús, estás celoso? illo que tienes novia.
Olvídate de Andrea o corta con Natalia.'
Andrea era simpática, maja, una persona increíble, divertida, pero la conocía desde ayer. Por otro lado Natalia era una persona que solo se preocupa por ella, pero la conocía desde hace 3 años.
Estaba hecho un lío. No sabía que hacer.
*Narra Andrea*
Su mirada me mataba.
-Eres increíble Dani. Gracias.
-No sé porque das las gracias. Eres una gran persona.
-Me alegro de haberte conocido Dani.
-Y yo a ti guapetona. - dijo guiñándome un ojo.
Le estaba mirando cuando apareció Jesús.
