Operación R.E.G.A.L.O

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Transmisión recuperada...

Los golpes y las patadas no se hacían esperar, estaban exhaustos pero no daban marcha atrás, tenían que cubrirse de los adolescentes y de Padre, haciendo que la tarea cada vez se volvía más y más difícil.

Kuki trataba de hacer entrar en razón a sus amigos pero ellos no respondían a sus esfuerzos, pues eran simples marionetas sin voluntad.

Seguía luchando, cosa que no era nada fácil, pero, no se daría por vencido, tomó algunas cosas que yacían tiradas en el suelo de aquel sitio y sin perder oportunidad improviso armas contra aquella amenaza.

En un vago intento por recuperar a sus amigos Kuki se abalanzó a ellos y comenzó a golpearlos sin delicadeza, a la vez que tomaba unos caramelos de su pantalón y se los daba en la boca, los chicos se resistieron pero al final comieron.

Los tres se retorcieron y después abrieron su rostro con pesar no comprendiendo en donde se encontraban, Kuki les habló y ellos no respondieron, sin embargo, no atacaban, así que Kuki comenzó a llorar y los abrazo sin mas.

Los muchachos estuvieron así unos segundos, cuando, Abby volvió en sí:-¿qué diablos pasa aquí y porqué tengo en mi boca el  sabor a cereza?-.

Kuki habló contenta por ver a su amiga mejor:-Abby, que bueno que éstas bien, debemos ayudar a Uno-.

-Pero, ¿qué rayos sucede?-, vio a Memo ido y decidió darle unas cachetadas guajoloteras para hacerlo reaccionar y así lo hizo.

-¿Apuntaron la matrícula del auto que me atropelló?-.

-No hay tiempo para tus babosadas, despierta a nuestro descerebrado amigo y vamos a pelear que Migue nos necesita-.

Memo vio la situación e hizo un saludo estilo militar:-a la orden jefa-, dándole unas buenas sangoloteadas a su amigo rubio, sacándolo del trance.

-Hay mamá, ¿dónde estoy?, yo..., ví a Padre y..., ¿qué esta pasando Dos?-.

-No se pero lo averiguaremos, les daremos a estos canallas sus pataditas en las costillitas-.

-Ahora sí hablas mi lenguaje-.
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Migue mordió a Padre en la mano y este furioso le dijo:-insolente, te mataré-.

Migue sonrió burlón:-si no pudiste conmigo de niño ¿qué te hace pensar que podrás ahora de adolescente?-.

Padre sonrió:- aún no lo comprendes niño, tengo mas poder sobre ti ahora que estás enamorado, te destrozaré, sino puedo física lo haré mentalmente-, en ese momento Padre sacó un arma y Migue vio con horror a donde la apuntaba.

Migue creyó no llegar a tiempo cuando el arma fue disparada pero el impacto le dio de lleno a Uno mandándolo al suelo y Kuki fue rápidamente a su lado.

Padre por primera vez había usado un arma de fuego contra ellos y hasta los adolescentes se alarmaron saliendo despavoridos de ahí temiendo represalias.

Padre se llevó su mano a la frente y furioso exclamó:-¡que incompetentes subordinados tengo, son unos cobardes!-, a la vez que volvía a apuntar su arma hacía los chicos y decía con su sonrisa maquiavélica:-hasta la vista Migue-, disparando en el proceso.

Pero..., justo antes de que la bala impactara, Memo tiro frente a él un viejo rin de carro desviando la bala mientras que Cinco y Cuatro se abalanzaban sobre él.

Kuki hacia presión sobre la herida e improvisaba un torniquete donde la bala había impactado, le decía que todo estaría bien, pero Migue perdía mucha sangre al haber impactado en un vaso sanguíneo.

Las situación era crítica, Padre había logrado zafarse de los muchachos y ahora iba directo a donde Uno se encontraba, no obstante Cuatro lo envistió sin ninguna contemplación haciéndolo caer, a la par que Abby tomaba una cuerda del suelo y lo amarraba como si de un puerco se tratase, volteo con su mano su gorra y grito haciendo una señal de victoria:-yiiiiija, soy la mejor-.

-Lo amarraste como puerco- Cuatro la apoyo.

-Que esperabas de mí-.

Memo habló:-necesitamos ayuda-.

Kuki habló:-tenemos que llevarlo a un hospital o al menos al cuartel-.

-Y ¿qué haremos con el adulto?- el rubio lo señaló exaltado.

Todos se miraron a los ojos y Migue dijo:-no se preocupen estaré bien, llamen a los chicos del barrio, yo...-, en ese momento Migue se desmayo alarmando a los demás.

Padre reía eufórico:-me pueden haber derrotado, pero Uno ha caído-.

Cuatro se molestó con el comentario y le pateo las costillas a la vez que tomaba una cinta que los adolescentes habían dejado y se la puso en la boca:-callate anciano-.

Abby sacó su comunicador y mando la señal de emergencia, esperando que no fuese tarde, a la vez que veían la desesperación de la asiática y a su amigo tirado en el suelo sin poder hacer mucho, mientras que Dos trataba de idear uno de sus planes o inventos para ayudar a su amigo antes de que llegase la ayuda, sin embargo, el panorama era por demás sombrío.