Asi pasaron los dias, llego el sabado, mi dia, fiesta de Chris,
aunque por la culpa de la maldita univercidad mi madre me prohibio
salir, pero como ella no esta y esta chica es una boba, saldre.
Me cambie, perfume, agarre las llaves de mi auto y baje.
Mientras iva pensando una maldita voz de mujer me intenrrumpio
mis pensamiento y tube que darme buelta.
-Oye!!! A donde piensas que vas asi?-me grito la chica
desde la cocina. Ni me voltie a verla.
-Donde no te importa ridicula!!-le decia mientras estaba por
abrir la puerta. Pero despues de insultarla esta fue mas rapida
que yo, se puso en frente mio, me quito las llaves de la puerta y la
serro. La estaba matando con mi mirada, pero a ella no le importo
y se atrevio a enfrentarme.
-Ya me canse, yo no vine aqui a cuidar de un pendejo malcriado
y caprichoso, que no me respete y le vale un comino lo que yo le diga,
de ahora en adelante me respetaras Justin Bieber, dame las llaves
de tu maldito auto AHORA.-con su voz algo alta, se notaba que
estaba algo molesta.
Se habia enojado por completo, me agarro un poco de miedo
de que me golpeara, pero por suerte eso no suecedio..
Me sorprendio su reaccion, creo que estaba hablando encerio,
me hiso retrodecer unos cuantos pasos atras, no sabia que decirle,
quede shoqueado con su actidud y su enfrentamiento hacia mi, pero
no me dejaria que me hable ella asi, no señor a Justin se lo respeta,
me dije a mi mismo.
-Tu no er.........-trate de hacerla callar pero me interrumpio y
ella hiso que me callara.
-Callate, yo soy tu niñera y tengo todo el derecho para castigarte,
es mas tu madre me dijo que no te dejara salir porque reproboste
todas tus materias en la universidad, dame tus llaves y te vas a tu
habitacion ahora. Ya me escuchaste.-con su tono de voz, su cara
de enojada, y como me trato, si estaba enfada.
Yo tambien me moleste, siempre metiendose donde no les importa,
desgraciadamente tube que darle mis llaves y ni modo subir a mi
habitacion, totalmtente enfurecido serre la puerta de mi cuarto
con toda mis fuersas, casi la derrumbaba.-Maldita engreida,
quien diablos se cree que es para sacarme mis cosas, te metiste mal
conmigo pequeña, sufrisas las consecuencias!-pensaba enojado
hasta mi mente. Me quede enserrado por casi dos horas, hasta
que me hagarro hambre y tube que bajar, ella estaba en la cocina
comiendo, me vio unos segundos y siguio en lo suyo. Me servi de
comer y me sente en la mesa, sin decrile ninguna palabra ella decidio
hablarme.