5-El manicomio.

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Mei estaba acostada en una cama de resorte. Era de color blanco con sabanas finas de un color rosa crema con un logo algo extraño. A su lado había una mesita a la altura de la cama con una lampara y su peluche Yumbo.

Ella no reconocía esa habitación. Cuando se sentó en la cama para verificar que realmente no era un sueño, entro la chica del día anterior.

-Hola Mei, ¿como amaneciste?. -Entró, y se sentó a su lado acariciándole su obscuro cabello.

-¿Qui-quien eres?, ¿porque estoy en esta habitación?, ¿y mi mamá?, ¿donde estoy?, ¿esto es un sueño? - Mei miro para todos los rincones de donde estaba sentada, como si estuviera tratando de econtrar algo...

-Soy la chica de ayer, mi nombre es Sophie. ¿Me recuerdas?. -Pregunto la bella chica de ojos celestes cielo, regalando le una hermosa sonrisa.

-¿Ehh?. -Mei la miro atentamente, y rebobinando su memoria.-¡Ahh!, ¡si!, ¡me acuerdo de ti!, que me llevaron a una oficina donde estabas tu. Y me ayudaste- Hizo una bella mueca de felicidad.

-¡Que bueno que te acuerdes de mi!, ahora vístete que tenemos que ir a desayunar. Tengo mucha hambre, ¿tu no?

-Ahora que lo dices, si tengo un poco... -Se levanto de esa cama, caminando a una silla que estaba en un rincón de la habitación.

-¡Hay, casi lo olvido!, ¿Mei me podrías hacerme un favor pequeñito?-Pregunto la chica a la niña.

-Claro, ¿que?. -Pregunto Mei mirándola.

Sophie sacó de su bolsillo una pastilla rosa, pasandosela a Mei.

-¿Te la podrias comer porfavor?

-¡sipi!

Mei tomó la pastilla, y se comenzo a cambiar. Se pusó una calza gris y un buzo blanco con el logo del manicomio que Sophie la habia dado.

-¿Vamos?, si quieres podemos llevar a Yumbo para que el tambien conoza.-Pregunto Sophie brindandole su mano para que ella la agarrara.

-¡Si!, ¡vamos Shiara!, ¡Vamos Yumbo!-Miro para atras de ella sonriendo muy feliz y agarrando a su peluche en su otra mano.

Caminaron por unos pasillos pasando unas salas donde habian chicos o chicas, viendo la tele, leyendo, o hablando.

Luego de un rato, llegaron a un comedor donde habian mesas de madera pintadas de azul, rojo, y rosa. En las mesas rosa, habian chicas, y en las mesas azul, habian chicos.

-Mei, no te acerques a esa mesa de color rojo. Fuera de eso, agarra una de las bandejas, y luego haz la fila para que te den tu desayuno. Si necesitas algo llamame yo voy a estar en esa sala- Señalo una sala con una mesa rectangular con personas vestidas de una bata.

-Si Sophie.

Acto seguido, Sophie se fue a esa sala de doctores, y Mei fue a buscar una bandeja. Cogió la bandeja e hizo la fila, pidió su desayuno. Lo que estaba por comer, era cereales con leche, y un té de frutilla.

Se sentó en la ultima mesa. Luego de que se acomodara para comer, aparecio una chica.

-Hooola... ¿me puedo senn... ntar?-Preguntó una chica de ojos grises claro y pelo negro muy obscuro

-Claro! ¿Como te llamas?, yo me llamo Mei.-Le regalo una confortable sonrisa.

-Gracias.. Me llamo Ann, por sierto, que bonito nombre tienes...

-Gracias, ¿comemos?.-Preguntó Mei agarrando la cuchara para mas tarde comer el cereal.

-Si.

Ann agarro la cuchara y miró el plato de cereal. Se le inflaron los cachetes, y fue corriendo muy rapido a un baño de alli cerca. Una chica de unos 28 años, de pelo rubio y ojos marrones fue detras de ella.

¡Tengo un nuevo amigo!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora