La Compañía Fantasma

Capítulo II - Amistad

La ciudad había crecido y cobrado mucha vida en los últimos años pero específicamente en los últimos meses ya que se aproximaba el Festival de la Luna que se celebraba anualmente.
Todos los establecimientos educativos preparaban sus carrozas, armaban coreografías, instalaban juegos, puestos de comida, artistas en la calle y lo mejor... se elegiría a la Reina del Festival. Solo decir que al hablar de ello un solo nombre pasaba por mi cabeza: Valery Mirkel; la chica mas inteligente, simpática, amable y guapa de todo el colegio. Le habría confesado que me gustaba hace mucho tiempo de no ser por un solo problema, era mi mejor amiga. Crecimos prácticamente juntos, sus padres murieron en un accidente de coche cuando era pequeña y quedó bajo el cuidado de su tía Amalia, que era nuestra vecina de enfrente. Ella, junto a Tommas y Julian nos habíamos convertido en el mejor grupo de amigos.

Tommas era hijo del Jefe de Policía de la ciudad, lo conocí practicando natación y supimos que estábamos hecho del mismo molde en cuanto nos vimos. Lo que a él le faltaba de astucia lo compensaba con valor y camaradería, era un muchacho impulsivo de cabello y ojos marrón oscuro, casi siempre llevaba un chaleco azul estampado con un águila negra, decía que era su prenda de la suerte y tenía alrededor de tres o cuatro iguales que había mandado hacer a pedido. Su hermano mayor había seguido los pasos de su padre y había ingresado al Instituto Militar, había progresado tanto en tan poco tiempo que ahora estaba en el sector de Inteligencia. Al menos eso nos había hecho creer Tommas, nunca contaba mas porque decía que de compartir información luego tendría que matarnos. Era alguien en quien yo confiaba y consideraba como un hermano.

Julian llegó de Canadá el mismo año en que el Centro de Investigación S.T.A.R. fue atacado. Su padre era diplomático en temas relacionado con los Ases y consiguió un trabajo en el Ayuntamiento de la ciudad. Su madre era profesora de piano y asi fue como lo conocimos; Valery comenzó a tomar clases con ella y una tarde de la nada nos presentó a Julian. Un chico callado pero brillante, le gustaban los deportes extremos, tenía varias tatuajes, cabello negro igual que yo pero había algo que lo hacía único y lo diferenciaba de nosotros. Tenía heterocromía, una anomalía de los ojos en la que los iris son de diferente color. Desde ese momento y gracias a todas las tardes que pasamos nos volvimos un grupo inseparable.

Aceleré el Nissan de James y tomé la Avenida Roca que llevaba hasta la casa de Tommas, al este de la ciudad junto al Jardín Botánico. Les había enviado un mensaje desde el móvil al grupo que teníamos avisando que me esperaran allí porque tenía algo que contarles y llevaba alguien que quería que conocieran. Estacioné el Nissan negro bajo la sombra de un árbol y encontré a Tomm fumando en la vereda junto a Valery que llevaba un pantalón gris ajustado con una remera naranja en detalles floreados y el pelo recogido. Supuse que venía de entrenar, pues todos los días practicaba voleyball para el Instituto, este año intentarían llevarse el trofeo de las intercolegiales.

-Joder, ya déjalo, eso algún día va a matarte ¿lo sabes? - dije acercándome a Tomm y estrechando su mano.

-Todos vamos a morir algún dia, lamentablemente no siempre podemos elegir como. No seas cabrón y déjame ver ese coche que trajiste. ¿De donde lo sacaste?

-Es de James - comenté mientras me acercaba a saludar a Valery y señalando al muchacho de ojos azules y campera de cuero que estaba bajando del coche - Es mi nuevo vecino. Compraron la casa del Sr. Brown, le estoy llevando a recorrer la ciudad. Es un puto genio de la electrónica o algo asi.

-Menuda nave, venga y dame esa mano - dijo Tomm - ¿Asi que te llamas James? Yo soy Tommas, puedes decirme Tomm, cualquier amigo de Matt y con tremendo coche asi es amigo mio. Se deben de subir muchas chicas en esto ¿no?

-Encantado, el coche fue un regalo al cumplir los 18. No soy de conducir demasiado, prefiero quedarme en casa y trabajar en mis tesis.

-Creo que este chico va a caerme bien, es todo lo que ustedes no son. Estudioso, callado e inteligente - dijo Valery mientras saludaba con un beso en la mejilla a James y largaba una pequeña risita por lo bajo.