Wings || [Park Jimin] ~ BTS

Esencialismo I (Park Jimin)

Decidí pasarme por casa de Wendy algo antes de que empezase la fiesta para ayudarla. Ella era mi mejor amiga en la academia y sabía casi todo de mí. Conocía el camino de memoria, pues durante los dos últimos años lo había recorrido más veces de las que se puede contar para ver cómo bailaba. Estaba frente a la imponente casa blanca, era cuadrada y tenía demasiados ventanales para mi gusto. "¿Cómo consiguen tener privacidad así?"  Tres golpes secos sobre la puerta: primero dos más rápido, luego una breve pausa y el último; <<TocToc-Toc>> era como una señal de que quien estaba fuera esperando era yo.

  — Hola enano. — observé serio al anfitrión para luego dedicarle una leve sonrisa.

— Hola hyung, ¿está Wen por casa?

Mingyu era el hermano mayor de Wendy, tenía tres años más que nosotros —26— aunque aún estaba en el último curso de la academia ya que le tomó dos años poder aprobar las pruebas. Era imponente, alto y con músculos fibrosos por horas de gimnasio, nada que ver con los que tenía yo esculpidos por las horas de baile y mucho menos ejercicio seguro. Era alguien que se tomaba bastante en serio el baile, a diferencia que Wendy. Ella era más relajada con eso, era alegría pura y no paraba quieta un segundo, además se le daba bien escuchar a la gente. Ella me reveló que quiso entrar a la academia por la gran admiración que sentía hacia su hermano. Creo que para ella era algo así como un príncipe azul.

—  Claro, pasa. —  se hizo a un lado invitándome a entrar, pase a la gran estancia que era inundada por la luz que aún teñía la ciudad en colores rojizos como el fuego. Siempre que iba un sentimiento de paz interior me inundaba. —  No entiendo cómo puedes ser tan bueno Park, si no te conociese pensaría que quieres algo con mi hermana. Aunque supongo que eso de ser bueno y amable te facilita aún más poder tirarte a cualquier chica de la academia ¿eh?

  — No soy tan bueno. — reí, aunque con algo de amargura, tapando un poco mi boca bajo mis pequeñas manos. 

Esta costumbre la había desarrollado en los dos últimos años, según los expertos por mi creciente inseguridad y frustración.

  — Estoy de acuerdo ¡es un jodido cabrón egoista! 

Wendy apareció por las escaleras que se veían desde la entrada para tirarse sobre mí revolviéndome el pelo y soltando maldiciones. A veces dudaba que fuese una chica por esa forma en la que hablaba. Los insultos y bromas eran común entre nosotros, era nuestra forma de ser amigos, y aunque podría haber respondido igual que ella preferí guardarme esa idea para cuando Mingyu no estuviese presente.

Estudiantes del conservatorio y de la academia no tardaron en presentarse en la fiesta, alguna que otra cara que no conocía —  tal vez amigos de Wen o su hermano— todos bebían y bailaban, el ambiente era bueno. Me senté algo apartado de la oleada de gente que bailaba, con mis amigos. Suga comenzó a servirnos distintos chupitos con mezclas de alcohol, aunque yo no pensaba beber ya que mañana mi horario incluía clase de danza a primera hora a diferencia de el de muchos de los presentes. Así los pequeños vasos y las copas se acumulaban frente a mí.

 — Joder Park, toma al menos uno, no creo que pase nada. ¿Ahora eres abstemio o qué?— Suga me tendía un pequeño vaso con un líquido rojizo.

  — No gracias, estoy bien así, no te preocupes.— sonreí y rechacé la oferta educadamente, con un leve movimiento de manos como negativa. 

  — Tú mismo...¡Hoseok deja de mover tu trasero frente a mi cara, es asqueroso! — el chico de pelo verde parecía un león rugiendo, no entendía muy bien por qué. — Tienes una puta pista de baile, ¡ve allí a moverte como si estuvieras en celo!