ㅡ Quiero hacerte mío...
ㅡ Llévame... a tu casa. Quiero que lo hagas ㅡ Youngjae dijo con las mejillas acaloradas y antes de que pudiera arrepentirse.
ㅡ Oh... créeme que lo haré.
Youngjae no se reconocía en esos momentos, cuando sus labios se aferraron a los suyos para besarlo un poco más, aumentando el ritmo para hacerle saber que estaba despertando y era su culpa. Kim yugyeom terminó por apoderarse del beso, con movimientos candentes de labios sobre los suyos, dominándolo, haciéndolo seguir el ritmo que le imponía hasta que el aire les faltara a los dos.
Kim yugyeom se pegó más a él y le dejó sentir su miembro descarado despertando con cada segundo transcurrido por el potente beso entre ambos.
Youngjae jadeó cuando se separaron para poder respirar y sus manos se aferraron a la camiseta que Kim yugyeom traía puesta, sintiéndose arder cuando Kim yugyeom se inclinó sobre él levemente.
Se sentía un idiota por ser tan fácil, pero lo cierto es que Kim yugyeom tenía el poder de hacerlo tener una erección creciendo entre las piernas con solo una mirada llena de erotismo
Se sentía delicioso, como Kim yugyeom se acomodaba entre sus piernas y las abría un poco más, inclinándose y meneando las caderas de manera cadenciosa, torturándolo con el simple gesto por encima de la ropa.
El muchacho dejó sus labios para besar su mentón, bajando peligrosamente por su cuello mientras Youngjae intentaba contenerse, se mordió el labio inferior cuando Kim yugyeom chupó parte de su piel y se aferró a él, mientras Kim yugyeom lo acariciaba bajo la camiseta que usaba por pijama y estaba dispuesto a deshacerse de ella.
levantando las manos para que Kim yugyeom la sacara y la lanzara lejos, Youngjae no tuvo tiempo de ver hacia donde, cuando las manos del muchacho se deslizaron por todo su pecho, dejando caminillos invisibles con sus labios , acariciando cada centímetro de su piel hasta llegar a los pantalones.
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Youngjae se sentía avergonzado, de dejarse desnudar por aquellas habilidosas manos que lo ponían incluso más caliente de lo que ya estaba.
Kim yugyeom le sonrió desde su lugar y se quitó la camiseta con cierta naturalidad en sus gestos, con la sensualidad suficiente como para que Youngjae no pudiera resistirse y sus manos viajaran hasta su pecho para tocarlo.
Se relamió los labios al observarlo ahí, imponente entre sus piernas, con la erección lista para deshacerlo como lo había hecho la noche anterior, y lo cierto era que se sentía ansioso porque así fuera. Pero todavía podía darse el lujo de pensar con claridad.
Youngjae quería que lo tocara , quería sentirlo un poquito más, quería que sus miembros siguieran tocándose con cada roce implícito de sus caderas de manera coordinada.
ㅡ kim yugyeom... ㅡ exclamó entre jadeos, mientras que el aludido se enfrascaba en morder uno de sus pequeños pezones para ponerlo completamente erecto
ㅡ no podemos... mi madre, va a escuchar.
Kim yugyeom levantó la mirada hacia el chico, con los ojos llenos de deseo y con la lengua aun acariciando su pecho desnudo.
