1. Ascender

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-Dex, ¿Dónde estás? - Pregunté, al empacar mi última maleta sobre la Hillux y volver al depto.
-Aquí, tonta, quiero decir, Valerie. Y ya deja de llamarme así. Mi nombre es D-E-X-T-E-R, más formalidad con este bombón. Recuerda que yo podría haber sido tu profesor de danza, y no lo soy. Tú, sabes muy bien el porqué...- Su intento de hermano mayor y comunes ganas de molestar a la gente eran fastidiosas. Y sí, yo practicaba danza, Hip hop, para ser más exactos. Era la única manera en la que podía liberarme, era como Maddie en los vídeos para Sia, eso sentía. Un caos interior, que al paso que daba, explotaba.
-Como sea, subamos. El vuelo sale en 30' -

Mamá y papá, documentados como Rosa y Jhonn. Ambos habían estado de acuerdo en enviarnos a otro país. Era algo extraño, ya que ellos no podían mantener una charla decente; que consiguiente les había llevado a separarse, y finalmente mudarse. Estaban viviendo gratamente, algo que estaba bien para todos. Yo tenía pensado que su separación nos iba a afectar, pero al contrario, creo que todos ya suponíamos lo que iba a pasar. Porque si no eres feliz, no puedes hacer feliz a otros... Nadie está bien, y tú, mucho menos.
  Nunca habían comprado una casa, por lo que cada uno tenía su departamento cercano a la zona central de la Ciudad, Buenos Aires. Sí, éramos porteños. Y ellos, habían hecho un complot para mandarnos al otro lado del mundo.

Pero, a pesar de todo, no los odié cuando me tocó despedirlos, ellos hacían lo mejor por nosotros. Querían que aprendiéramos inglés, de una forma más dinámica, culta y práctica a la hora de ejercer. Los abracé con todas las fuerzas, mi hermano hizo igual. La despedida fue corta, conmovedora, simplemente fue integra. Y, el asunto de dejar a mis amigas no me preocupaba, porque yo volvería, y volvería a lo grande, como se debe. De esa particularidad, no habría un vacilar.

1 día después...


Me desperté como una princesa. Y no podía creer que el mundo parecía ser "verde" (en vez de rosa como en los cuentos, (el verde era su color preferido)).

    Tenía una ventana a mi lado que daba a una hermosa costa/mar. La cama era alta. Las sábanas que llevaba eran de una fina seda fría color beige. Las paredes estaban cubiertas por un wallpaper de nubes, versión Toy story, pero con un marrón lúcido, creando juego con las sábanas. El piso tenía una rústica madera, simple. Aquella habitación era para un sibarita, no quería esperar a ir al closet y ver que tan enorme era.
   Anoche, al parecer, llegamos muy tarde que pensamos que una habitación era para ambos, y cuando el gerente volvió, nos dijo que había dos habitaciones reservadas. Así que me levanté dispuesta a conocer la habitación de mi bochornoso hermano, ya me imaginaba la expresión de su rostro. Me lavé los dientes. Me dejé el pijamas, eso es más que obvio. Decidí por último, revisar mi iphone...


¡TOCK, TOCK! – Me percaté de que alguien llamaba a la puerta, y fui como Flash, a salvar al mundo. La abrí.

-¿Hola? – Dije como pude. Frente mío, se hallaba un macho- pecho- peludo -americano- de metro ochenta. ¡Santos Dioses! Ojos oscuros, era lo único que veía. Y esos lentes, que lo hacían verse tan culto e intelectual.
Habló.
-¿Puedes irte? Ésta es mi habitación. Normalmente no llegan locas aquí... esto es raro – Qué voz...



Es un grato gusto conocer a cada uno de .Utds. Mi nombre es Rocío y actualizaré siempre que pueda. Si les gusta la historia diganme, y si no, también. Total, de los errores.. ¿Acaso no se aprende? Mejoremos juntos. Y bueno, aquí les dejó a esta niña que desde ahora será parte de mi vida. Pueden dejar todos los comentarios que quieran, es más hagánlo que me pondrán feliz.


Pd: Denme amor, soy nueva, 16 años y joven escritora... Espero les encante y llene tanto como a mí. Un fuerte abrazo. Kisses <3 See u soon, guys!

B UrSelf!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora