¡Déjame Acosador!

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y volvimos a la historia de hace unos meses... Jungkook encerrado en su habitación sintiéndose miserable mientras lloraba sin control abrazando su almohada, su mundo se había caído de nuevo.

¿Por qué no solo le dijo que no lo quería? ¿Por qué mintió?

Jin acariciaba su cabello mientras el menor se aferraba a su almohada soltando fuertes sollozos.

Era el único que podía estar para él, sus amigos habían salido de vacaciones y Jin se quedó.

Nunca le gustó el ir a la escuela, pero ahora definitivamente lo odiaba, todos los días veía a Jimin con su nueva pareja, aunque lucía feliz, no paraba de pensar en el daño que le causó.

Jungkook cambió drásticamente, aunque lloró innumerables veces, parece que un día se cansó de hacerlo y simplemente camina sin ninguna expresión, apenas respira.

Sus amigos al regresar le entregaron varios obsequios y lo llevaban a diferentes lugares con intenciones de hacerlo sonreír, pero nunca funcionaba.

— Gyeomie para — le dijo al pelinegro quien estaba haciendo caras graciosas para animar a su amigo.

— Jungkook solo quiero que sonrías.

— no puedo sonreír Gyeomie, solo me quiero ir a mi casa — se levantó de golpe y se dirigió al patio de atrás.

Aunque visualizó a Jimin cariñosamente con su pareja decidió pasar desapercibido y quedarse ahí, se sentó abajo de un árbol y se puso a ver su teléfono.

Era imposible concentrarse, cuando los amigos de Jimin gritaban que se besaran una y otra vez más.

Se colocó los audífonos perdiéndose en la melodia de "The Other Woman" de Lana del Rey hasta que observó a la chica que se sentó a un lado.

— ¿necesitas algo? — Jungkook la miró sin ninguna expresión.

— no, te molesta que me siente aquí? — la chica era linda, su voz era tranquila así que Jungkook decidió no ser duro con ella.

— en realidad no.

— bueno. — La chica sonrió — oh, mi nombre es Tiffany. Soy nueva aquí y no conozco a nadie.

— Mi nombre es Jungkook soy de tercer año de administración.

— ah, tú eres Jungkookie?

— sí, me conoces?

— Soy prima de Jimin.

— vaya que maravilla.

— Mi primo me ha hablado mucho de ti y tenía razón, eres muy lindo en persona, Jungkook.

— Muchas gracias, Tiffany.

— ¿Por qué no sonríes? hace un rato que estuve observándote, incluso te di un cumplido y no sonreíste, tuviste un mal día?

— No me gusta sonreír.

— Debe ser muy linda tu sonrisa. Algún día lograré verla, sé que lograré hacerte sonreír — rió.

— mucha suerte con eso. — regresó al tono frío de antes causado que Tiffany se pusiera un poco nerviosa — Nos vemos después Tiff... — Se despidió, se levantó y se fue a buscar a Yugyeom para ir a la siguiente clase.