Alex
Emma ya se había despedido y marchado a su clase.
Yo entro al aula seguido de Kate, quien va directa a los calefactores. Pese a ser marzo, hace bastante frío. Fuera se ven los árboles zarandeados por el viento y, de vez en cuando, parece que alguno se va a caer.
Tuerzo a la derecha en busca de mi asiento y saludo a todos con un «buenos días» al que apenas dos o tres responden.
Mientras esperamos a que llegue el profesor de matemáticas me doy la vuelta, buscando mi mochila negra y gris y suelto un sonoro suspiro.
—Debería ser ilegal dar clase tan temprano —digo abriendo la dichosa mochila —. ¡Si ni siquiera nos enteramos de nada, todavía estamos empanados! —prosigo indignado mientras saco el libro de matemáticas: uno naranja con los bordes blancos.
Valery solo ríe, sin apartar la mirada de su móvil rosa con funda de unicornios. Está sentada en la mesa, apoyando los pies en la silla. Alza la mano y se retira su pelo azabache de la cara.
—Si yo fuera presidente prohibiría dar clases antes de las diez. ¡Así no hay quien viva, joder! —finalizo mi discurso dejando caer con fuerza el libro en la mesa.
Al oír el estruendo Valery pega un brinco que hace que se le escape el teléfono de las manos, aterrizando este en el suelo con la pantalla hacia abajo.
—¿Te he asustado? —pregunto en tono de burla, esbozando una sonrisa.
—¿Eres tonto o qué? —me responde seca mientras comienza a pegarme, ante lo que solo puedo cubrirme con los brazos.
—¡Nooo! ¡Para! ¡Para! —exclamo entre risas —¡Me haces daño!
—¡Más daño te voy a hacer como le haya pasado algo al móvil! —dice. Al poco para y se agacha a recoger su móvil. Suspira aliviada al ver que está bien.
—¿Ves como está bien? —digo con seguridad, aunque en el fondo tenía miedo de que le hubiera pasado algo.
Ella me lanza una mirada asesina y sigue mirando Instagram.
Yo me levanto de mi asiento y camino hacia Kate. Ella está en la otra punta de la habitación, también mirando el móvil.
Cuando llego me siento junto a ella, apoyando la espalda en los calefactores y acurrucándome en su hombro.
—¿Qué haces? —dice Kate.
—Déjame —respondo —Tengo sueño.
—¡Me da igual, quítate de mi hombro! —dice dándome empujones para alejarme.
—Wow, veo que sigues igual de agradable que siempre —digo irónico, apartándome de su lado.
—¡Ahhh! —bufa —Perdona Alex, es que llevo un día...
—¿Ha pasado algo con Jesse? —ella asiente y agacha la cabeza —. Lo suponía. Bueno... Hoy es miércoles y no tengo nada que hacer... ¿Damos una vuelta luego? O... ¿Prefieres ir de fiesta?
Kate ríe aunque no entiendo muy bien por qué. Luego me mira sonriente y asiente con la cabeza.
—Vamos, cada uno a su sitio —dice el profesor de matemáticas al entrar en el aula. Espera a que todos nos sentemos. Nuestro profesor de matemáticas, al contrario que la mayoría, es muy amable, joven y bueno dando clase —. Hoy ha llegado una alumna nueva —empieza —Viene desde la capital, aunque nació aquí. Sed amables con ella —dice —Adelante, Irina.
Vuelvo la cabeza hacia la puerta y veo a mi tutora, una mujer jovencísima no muy alta con el pelo rizado, acompañando a una chica delgada y castaña con la cara sonrojada que camina hacia la pizarra mirando al suelo.
—No me lo creo... —oigo decir a Kate entre dientes —No puede ser verdad...
La ignoro y presto atención a la tutora, quien parece querer decir algo.
Cuando se hace el silencio sonríe, coloca la mano en el hombro de la chica y empieza a hablar.
—Alumnado, tenemos a una chica nueva con nosotros. Quiero que la tratéis bien y que no la agobiéis. ¿Quieres decir algo? —dice refiriéndose a ella.
—N-No... —responde sonrojándose aún más y agachando la cabeza.
—Bien, como quieras. Irás ahí, junto al calefactor. Al lado de Katherine.
Miro a Kate y su expresión es de puro horror. ¿Qué le habrá hecho esa chica para que ponga esa cara?
La chica se sienta en su sitio y la profesora se va, dejándonos solos con el de mates.
Al rato, cuando suena la sirena del cambio de hora, nos acercamos Valery y yo a hablar con ella.
—Hola —dice mi compañera —. Me llamo Valery, encantada —sonríe.
La chica asiente sin levantar la cabeza.
—Yo soy Alex, un placer —me acerco a darle dos besos pero se encoge y gira sobre si misma, dándome la espalda.
Miro a Kate y ella solo encoge los hombros.
—Te llamabas Irina, ¿no? —insisto sin mucho éxito. Respiro profundamente y lo vuelvo a intentar —. Dime, ¿te gustan las fiestas? —ella me ignora —. ¿Qué te parecería venir esta tarde de fiesta con nosotros? ¡Queremos conocerte y, ¿de qué mejor forma que celebrando una fiesta?!
Valery y Kate me miran con los ojos como platos pero, afortunadamente, Irina comienza a levantar lentamente la mirada.
—¿L-Lo dices en serio? —me pregunta haciendo un puchero.
—Pues claro —sonrío —Puedes venir si quieres.
—Pero Alex —me corta Valery —Te recuerdo que aún no tenemos las bebidas.
—Ni el lugar para la fiesta —añade Kate.
—¡Ah! ¡Por el lugar no os preocupéis, mi madre ha alquilado un garaje cerca de aquí! ¡Sí queréis podemos celebrar la fiesta allí! —dice Irina emocionada.
—¿Véis? Todo solucionado —concluyo.
El resto de la mañana es bastante corriente. Damos literatura, inglés, dibujo... En el recreo aprovechamos para presentar a Irina al grupo.
El grupo con el que me junto está compuesto por gente de dos clases de 4º distintas, un repetidor que está en 3º y, cuando hay, lxs novixs de cada unx. Somos unos 13 regularmente, aunque rara vez coincidimos todos y, cuando lo hacemos, tiembla la tierra.
Del grupo, se apuntan a la fiesta James, Aiden, Emma, Kate, Lydia, Elliott y la recién incorporada Irina.
En la salida pactamos la hora y quién compraría qué. Quedamos todos a las 20:30 en el garaje.
Habrá que volver pronto a casa, mañana hay clase.
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ADRE MÍA QUE ES LA PRIMERA VEZ QUE HABLO MADRE MÍAAAAAA
Hola mis bbs.
*NOTICIA*
Próximamente subiré un capítulo dedicado únicamente a la descripción (puede que con fotos incluso) de los personajes.
De esta forma no habrá líos.
~Espero que estéis disfrutando tanto como yo al escribirlo.
Adiós mis bbs <3
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Don't Stop Me Now
Non-ficțiuneIrina Salchow, de 16 años, cambia de ciudad para empezar de cero. Una vez allí, decide conocer nuevas personas y poco a poco hacer amigos. En su nuevo instituto se encuentran unos adolescentes con un concepto de la vida algo distinto al que está aco...