3:45 UN LÍMITE
Apenas fue ese día. Jueves entrando por una puerta en el pasillo del Salón, ve hay, blanca como la leche, ojos negros, con un peinado nada normal y una vestimenta muy feminista (literalmente). Pasa y se sienta al frente y a la izquierda... Pasa el día y ni una palabra, pocos meses casualidad un chico quedo sin grupo de estudio por dormir y levantarse hasta tarde llegando a clases retardado para quedarse fuera, lo que no sabía que en el principio del salón un pequeño grupo lo recibiría para marcar un antes y un después en una vida iniciada por el primer comienzo universitario.
Aquel día de retraso anticiparía a un pequeño grupo de chicos, quedaría en ese grupito que lo recibiría sin ningún temor, empezaron a charlar y a estudiar supuestamente lo que la profesora de dicho curso dictaba, al final de la clase final de la mañana una despedida para el siguiente día del instituto universitario.
Al día siguiente llegando temprano y al ver al mismo grupo que lo apoyo al día anterior se sentó junto a ellos expresando cariño y apego, al pasar el tiempo llegando la hora que marcaría la mitad de clase interrumpen en la puerta y los alumnos angustiados observan atentamente la puerta incluyendo a la profesora que ansía ver quien interrumpía su clase, una chica de piel blanca que relumbraba con el enfoque de la luz que brotaba el sol, brillaba como un ángel saliendo del cielo, sentado ojos brillantes aclamaron su rostro con gracia y apego, furor y ternura, entrando lentamente la chica dijo una famosa frase dicha por millones de personas pero muy conocida entre adolescentes responsables.
-Buenos días profesora ¿puedo pasar?
-Adelante, la profesora vistosa por su tardanza le respondía.
Su mirada fijamente observadora, una mirada de búsqueda clara fijamente observaba un puesto donde sentarse a recibir la venerada clase matemáticas, pero un salón repleto y con un solo puesto llevaría al lado del chico que le brillaron los ojos al entrar la hermosa chica que su piel brillaba bajo el resplandor de la luz del sol pero no era el sol era una luz que venia del interior de la chica una luz inexplicable, los ojos del chico inclinados por la sensación harían una chispa con destellos de cariño una ráfaga con sensación hermosa, un clip como explicarían expertos en el sentimiento de la luz interna o del corazón, ella camino y se sentó justo al lado del chico.
-Hola.
Este amigo con un nudo en la garganta dijo cuatro letras muy fáciles de decir y escribir pero para el se hizo atroz expresar.
-Hola, respondió.
Ambos voltearon observando la clase y cuya profesora atención debían fijar, con un nudo en la garganta y ninguna idea sobre ella, volteando lentamente mientras todo paralizado, alumnos hablando mientras la profesora daba su clase, mientras una chica se le caía su celular otros reían pero el fijamente volteo lentamente, todo en ese instante era como si el mundo estuviera paralizado, tiempo y espacio pero sin fin, resalta que nuestro amigo, voltea lentamente y de reojos ve a la chica y su mirada brilla esta chica se da cuenta y lo mira pero el rápidamente voltea esta vez no era cámara ni tiempo fue un giro rápido hacia al frete esquivando la vista de la chica, todo volvía a la normalidad ya no era lento ni nada en stop pero el simplemente pensó en la mirada de ella y lentamente sonrió aclamando su pensamiento.
Así paso esa semana ella frecuentaba a clases pero relativamente retardaba sus ingresos al aula a cambio regularmente el chico asistía a todas sus clases en frecuencia de asistencia, otro día igualmente retardada llegaba ya era de costumbre y frecuencia la conocían por poseer ese don, al principio hablaban entre ellos ya que ella quedaría junto al mismo equipo que recibiría a nuestro amigo así seria ella en el famoso pero angustiante grupo que dos chicos y tres chicas así quedaría nuestro grupo que juntos harían cinco amigos incondicionales entre los estudios , nuestro amigo frecuentaba palabras con ellas concluyendo temas sin importancias o con solo el hecho de llamar la atención y presencia de esa chica que quería conocer aún más, fijamente ella cuenta algunas cortas historias y temas para seguir la corriente cosas sin importancias por la simple razón de conocer partes de una nueva persona, incluso se presenciaban algunos sentimientos, cada mañana al término de cada clase ambos caminaban hasta su habitual parada pero con diferentes destinos hablaban hasta llegar intercam-biando chistes y risas, preguntas y respuestas, habitualmente cosas inexplicables para saber y pensar cosas esperadas para conocer de cada uno de ellos o con la sensación de ser amigables sintiéndose iguales o mutuos, mientras caminaban hasta la parada con una estrategia que me enseño este chico era tratar de caminar o improvisar mientras estabas junto a ella simplemente era parecerle o sentirle interesado o amenos él se sentía interesado en ella y así obtendría resultados muy pronto.
Fijamente ella la corriente seguía retratándole cuentos sin importancia sobre su vida pero para el sentía esa sensación de importancia incluso llegando a sentir algunos sentimientos sobre ella, cada mañana en el término de su clase al salir del instituto el estando a su lado no le importaba lo demás llegar tarde a casas era un detalle sin mucha importancia solo con estar en presencia de ella bastaría ser amenos feliz o parecía estarlo porque al llegar casa todo se derrumbaría lleno de problemas y familias con detalles agotadores que hacia la vida de nuestro amigo a decidir muchas decisiones que marcarían el alejamiento familiar muy pronto, mientras que ella entraba un poco retardada al trabajo que era su fuerte rutina diaria después de la universidad, amigos se habían vueltos caminaban metros buscando la parada más lejana para despedirse, la actitud del chico vivía llena de locura como si la vida no importara un poco mariquito así lo expresaría ella cada vez que la hacía reír, finalmente el objetivo de acercarse a ella seria útil y franco para él ya que cada vez que se veían eran inseparables o amenos duraría. Fijamente por algunas semanas caminaban juntos por la avenida más corta del mundo pero en realidad es larguísima cuando ella no asistía a clases el caminaba igual la ruta dicha hasta la famosa parada pero esta vez era larguísima como si no tuviera fin pero cuando ella iba junto a él en segundos llegaban a su destino para arrechera del amigo verdad, a cambio la técnica de ella era preguntar sin fin cualquier cosa pero preguntar y el atentamente respondía las preguntas más complejas para conocer a una personas y algunas que no eran complejas si no dichas como las grandes puntas que lanzan los adolescentes para expresarse y que se note para que la pareja opuesta se dé cuenta que ocultas algunos sentimientos por ellos. El siendo un sentimental era fijamente responderle con autoridad y verdad con ella era una persona transparente no quería lastimar a esa chica que le brilla la piel con la luz del sol, ojos oscuros y cabello de catarata.
Un día después de una agitada hora de clases por la mañana ella expresa un don que poseen todos pero más los adolescentes, el don del Hambre decir tengo hambre y no poseer dinero para regalarle a menos unos tequeños para calmarle el huracán que poseía dentro de ella el fijamente se quedó callado pero ella muy linda dijo:
-Vayámonos.
Ya fijada la salida del examen de derecho que tenían no dudaron y se fueron por la avenida, mientras el decía algunos proyectos que el haría ella observo un cartel, un folleto en una parada de autobús a cambio el dándose cuenta de aquel folleto que pararía aquella caminata, observo y dijo.
-Yo estaré en el vip.
-Yo quiero ir, averiguarme cuanto me saldría estar junto a ti en el vip.
-tranquila cariño yo te averiguare, diría el para calmar su ansia.
Era simplemente un rapero famoso por algunos temas que estaría en un reconocido club de la ciudad.
