Capítulo 11

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Spencer:

-Okay, entonces... ¿recuerdas cuando me dijiste que Aria estaba actuando raro?

-Sí.

-Bueno, en realidad yo sé por qué.

-¿¡Y no me lo dijiste !? ¿Por qué lo escondiste y actuaste como si no lo supieras?

-¡Porque ella quería que lo hiciera! Ella me pidió que lo mantuviera en secreto, así que eso fue lo que hice.

-Pero... ¿es algo malo?

-No, no, en absoluto. Así que, si crees que tiene a alguien escondido en su armario -comentó sonriendo- o algo así, no te preocupes, porque no es nada serio. O no así, al menos.

-¿Podrías decirme? Me estás matando. Y ella también.

-¿Tienes alguna idea de lo que podría ser?

Aria:

Estaba en la casa de Hanna, acostada en su cama mientras ella estaba sentada en el piso.

-¿Debería invitar a Em y a Spencer? -preguntó

-No.

-Está bien... alguien no se siente muy amigable, ¿eh?

No respondí, entonces el silencio llenó la habitación de nuevo.

-Soy lesbiana. -Susurré

-Lo sé. -dijo ella sin siquiera mirarme

-¿Qué? -dije con los ojos muy abiertos

-¿Qué? -respondió ella con una mirada confundida

- Yo... ¿dije eso en voz alta?

-Sí. -dijo ella encogiéndose de hombros-. De cualquier forma, no me molesta. Pero supongo que ya lo sabes. Quiero decir, Emily.

-En realidad... No lo soy. Yo solo... ¡ugh, no puedo hacer esto! -Me quejé y me dejé caer otra vez en la cama

-¿Por qué estás actuando así? -dijo ella volteándose y mirándome- ¡Te estoy diciendo que está bien! ¡Ni siquiera estoy sorprendida! ¡Es normal!

-No lo sé, ¿está bien? -dije de repente poniéndome de pie

-¿Te gusto o algo así?

-No.

-Entonces no entiendo. No tienes una razón para estar así.

-No quiero hablar más. -dije sentándome otra vez

-¿Podemos al menos hablar de cosas que no están relacionadas con ese tema? ¿O no quieres hablar en absoluto?

Spencer:

-Solo tengo una teoría de lo que puede estar pasando, pero no estoy segura.

-Bueno, ve, entonces.

-¿Qué? ¿Ir a donde?

-A hablar con ella. Si crees que sabes qué es, ve y díselo.

-Pero-

-¡Solo hazlo! -insistió

Me rendí. La llamé pero ella no respondió, así que llamé a Hanna, quien me dijo que ambas estaban en su casa.

Cuando llegué, Aria estaba acostada en la cama y Hanna estaba en el piso.

-Aria.

Ambas me miraron con una expresión de sorpresa.

-¿Cómo entraste aquí? -Hanna preguntó con el ceño fruncido

-Tu madre me dejó entrar. Aria -dije mirándola- ¿podemos hablar?, ¿en privado?

Incluso si no estábamos realmente cerca, podía ver que estaba nerviosa. Me sentí mal, porque seguramente la pondría aún más nerviosa.


Creo que el próximo capítulo es el último así que... si pudieran decirme qué piensan de esto y si cambiarían algo sería genial. Gracias por leer!

Ámame, de cualquier manera. (Sparia)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora