Lamento tanto no ser lo que esperabas.
Lamento tanto no tomar una decisión con tu juicio y carácter.
Lamento tanto no haber sabido decir no.
Pero lo único que no lamento es no ser tu.
No quiero decidir sin tocarme el corazón.
Quiero darlo todo por la persona que tiene mi cariño.
Quiero vivir sin miedo a fracasar y sin miedo de caer.
Lo único que en realidad lamento, es que no pueda cambiar tu opinión.