Desperate wives ©

16 | Narrado - Olivia drama.

30/03. Beverly Hills, 9:30 a.m
Tribunal de Familia, primera sesión.

Al entrar el juez, todos los presentes se ponen en pie. Una vez que el anterior se sienta y da la orden de sentarse, los demás hacen caso a su petición.
A la derecha del estrado, se encuentra Harry Styles, el demandante, junto con su abogado.
Mientras tanto, al lado izquierdo del estrado, está ubicado el matrimonio Dallas Baldwin y su abogada defensora.

Se cuenta también con un jurado especializado en el ámbito familiar, asignado por el estado y como público, están los padres de Cameron y Hailey, así también como el grupo familiar de amigos.
Gracias a Dios, Olivia en esta sesión no debe participar.

El juez comienza a leer el porqué están todos reunidos y seguidamente comienza a tipificar los deseos de Harry con este encuentro.
Una vez terminado todo, da palabra al abogado de Harry para que pueda explicar su caso.

El señor abotona su saco de vestir y comienza a caminar, alejándose de su mesa y posicionándose frente al honorable juez.

—Señor Juez —habla con voz fuerte y clara—.Hace unos... dieciocho años para ser exactos... —se vuelve hacia el público—... a mi cliente se le privó de un derecho inviolable, llamado paternidad.

Una vez dicho lo anterior, el hombre provocó un gran escándalo dentro de la sala. El cual el juez mandó a callar.

—La Srta. Hailey Baldwin, le negó al Sr. Harry Styles su derecho de paternidad sobre aquel feto, huyendo de su lado y ocultándole la verdad sobre quién era el padre —alzó la voz aquel sujeto provocado otra vez un gran disgusto entre el público presente.

—¡Objeción su señoría! —se levantó hablando fuerte la abogada de aquel matrimonio con su ceño fruncido.

—Denegada Srta. Martínez, ya tendrá su tiempo para hablar —apuntó el juez luego de darle una mirada rápida y otorgándole de nuevo el poder del habla al abogado de Harry.

—Mi cliente lo que pide es algo muy sencillo, él lo único que quiere es tener custodia (con la custodia parcial se conforma) sobre su hija para poder reponer el tiempo perdido y una orden de alejamiento para el Sr. Cameron Dallas sobre su hija, para poder borrar cualquier pensamiento erróneo que la menor tenga sobre quién es su padre.

Otra vez ruido en la sala. Este hombre está loco.
Aquel personaje ofreció como sustento a su teoría la prueba de ADN realizada entre Olivia y Harry con respuesta positiva y retomó su asiento después de darle las gracias al juez e inmediatamente el anterior le dio la palabra a la defensora de Cameron y Hailey.
Esta expuso todos los puntos reales de la situación. E incluso ofreció como prueba todas las inversiones que Cameron realizaba por Olivia por mes y por año; desde educación, salud, alimentación, ocio y demás gastos, demostrando con esto que desde los diez años de la menor quien ayuda a la madre es él y que Olivia nunca recibió ni un dólar por parte de Harry.

La sesión se cerró yendo a un corto receso de veinte minutos, en donde tanto su abogada defensora como sus familiares se ocuparon de alentar al matrimonio, ya que tenían todas las de ganar.
Al regreso, a la primera que se llamó al estrado fue a Hailey.

—Srta. Hailey Baldwin, ¿podría decirme usted por qué su hija no tiene los apellidos de algún hombre? —la miró fijo el abogado loco.

Hailey tragó grueso y miró a Harry quién se estaba cruzando de brazos y parecía disfrutar esto. —Bueno... —titubeó—los primeros diez años crié a Olivia sola. Cuando nació no quería darle los apellidos de un traidor —apuñaló sin dejar de ver a Harry—. Cuando Cameron llegó y se responsabilizó por ella realmente no vi necesario hacerlo. Ella entendía perfectamente que a pesar de no tener sus apellidos, él era su padre.

—Entonces, su hija no tiene un padre legal. No tendría porqué estarle negando la paternidad a mi demandante —atacó el hombre.

—¡Mi hija sí tiene padre! ¡Se llama Cameron Alexander Dallas! —se alteró Hailey— ¡Y le niego la paternidad a este descarado porque él hace dieciocho años la negó! —gritó provocando que Harry bajara su cabeza y se moviera incómodamente en su asiento.

—Srta. Hailey, le pido cuide su vocabulario en el estrado —pidió el juez.

La rubia cerró sus ojos y suspiró, recobrándose un poco.—Lo siento su señoría, pero no pienso responder más preguntas de este hombre —miró al juez impaciente.

—Muy bien. Se acabaron las preguntas —concluyó el intimidador mirando duramente a Hailey.

—Gracias —susurró para después encaminarse hasta su asiento. El abogado imitó su acto.
El juez miró a la abogada y le dio permiso para comenzar su sesión de preguntas y llamar a alguien al estrado. La muchacha se levantó tragando grueso y una vez estando frente a todos, llamó a Harry al frente.
El hombre hizo caso y se encaminó hacia el podio que estaba al lado del juez. Aclaró su garganta y miró a la morena poniéndole total atención.

—Señor Styles, ¿podría usted contarnos por qué ahora, después de dieciocho años decide usted querer a su hija y reclamarla como suya? —lo miró fijo y todos los presentes susurraron un pequeño "uuuhh". Sin duda era el público más activo que el juez había recibido.

Harry lamió sus labios y miró hacia el frente.—Verá usted Srta. Martínez: como mi abogado anteriormente dijo, yo no sabía que Olivia era mi hija. Hailey siempre me lo ocultó...

—Eso no responde mi pregunta —interrumpió la abogada.

—Si me deja terminar... —se quejó Harry mirándola. La abogada guardó silencio y con gesto le dio permiso para continuar—. Y hasta algunos meses atrás fue que yo mismo quise verificar realmente de quién era esa niña. Y es hija mía —sonrió mirando a Cameron.
¿En qué momento Olivia se convirtió en un premio por el que deben luchar?

—¿Cómo conoció a Olivia?

—Solo la he podido ver por internet. Redes sociales.

—¿Cómo consiguió el ADN de ella para la prueba de paternidad?

—Eso a usted no le interesa —atacó Harry.

—A mi sí —levantó Hailey la mano interrumpiendo.

—No. A usted tampoco Hailey —Harry le dedicó una pequeña mirada de odio y después miró a la abogada.

—Han terminado las preguntas.

La abogada se volteó cerrando los ojos y suspirando. Llegó a su asiento y lo primero que hizo fue tomar aquel vaso con agua e ingerir su líquido.

—¿Alguno de los dos quiere hacer más preguntas? —dijo el juez mirando a ambos abogados. Los dos negaron—. Muy bien —dijo tomando el folder donde venía el caso—. La perjudicada es menor de edad, pero aún así, ante el estado tiene la edad suficiente para escoger con cuál de los dos padres quiere estar y porqué, su opinión de mañana será muy importante para definir la resolución. Nos vemos mañana. La sesión se da por finalizada —avisa antes de tomar el maso y hacerla sonar, indicando el fin definitivo de la reunión.